Entonces, ¿por qué esa preocupación del Padre entonces y de Jesús de llevar la Buena Noticia?, para poner orden, el orden que el hombre quitó del mundo, ¿por qué empezó a enfermarse el hombre?, y por usar mal su libertad. Mensaje del 08 de Julio de 2009

Habla Artemio:

Buenas tardes. Parece que no los asusta la gripe, me parece bien, muy bien.

Buscan el cántico número 15 ¿eh?, y los saludamos al Señor que está aquí
diciéndole: que viva Cristo….

Bueno estamos otro día más en la Oración, miércoles, el día de San José, como todos los miércoles, Patrono de cada uno de nosotros, San José es un intercesor maravilloso delante del Señor porque como dicen él en el Cielo no pide, ordena, por una razón muy simple, porque fue el Padre Adoptivo de Jesús. Por eso, por si acaso decimos hoy: hoy perdóname….

Uno dice: ¿cómo, estamos pidiendo perdón y no hicimos nada malo?, y ocurre que es posible que no hayamos hecho nada malo pero ¿y las cosas buenas que podíamos haber hecho y no hicimos?, por eso pedimos perdón a veces. Muchos se acusan a veces de haber cometido esta falta o la otra, el problema no es tanto eso, el problema es cuánto pude haber hecho y no hice, cuántas cosas pude haber solucionado y no solucioné, por eso pedimos perdón a veces, o acaso no nos damos cuenta que en montones de ocasiones podríamos haber sido mejores de lo que somos y ahí nomás quedó.

Muy bien, para estar a tono con nuestro Señor miramos el cántico número 20 y como necesitamos siempre la gracia del Señor para estar bien, estar en paz, con salud, sin temores, sin nada ¿eh?, entonces le decimos a Jesús con el número 20 que ponga aceite en nuestra lámpara, es decir que de gracia a nuestro ser, que nos de su gracia para poder recibir al Señor, para estar en armonía con Él, para estar en amistad con Él ¿eh?, porque no es cuestión de un día decir: necesito algo lo voy a pedir, con el Señor tenemos que ser siempre amigos, compañeros ¿eh?, Él es nuestro Padre, nuestro hermano, nuestro compinche, el que está a cada instante con nosotros ¿eh?, por eso le decimos que ponga aceite en nuestra lámpara con 20: pon aceite en mi lámpara Señor…, y después sigue: Señor Jesús tu eres mi guía….

Vamos a leer la palabra que es la que realmente nos sana, yo comprendo que a veces nos cuesta esperar un poco, por eso me piden la bendición para irse, pero tienen que convencerse de algo, quien realmente nos sana es Jesús, no es una persona ¿mmm?, entonces por eso mientras uno puede quedarse hay que estar en la Oración, sino estamos haciendo las cosas mal, por eso le pedimos entonces al Espíritu Santo que venga a nuestra alma y nos de el entendimiento que necesitamos, nos de la paz que no tenemos, la alegría que nos falta y la felicidad que para muchos creen que pasó de largo y ya no la pudieron nunca más conseguir.

Por eso, decimos así simplemente: ven, ven, ven, Espíritu Divino, ven, ven, ven, acércate a mí….

Hoy día miércoles 08 de Julio, por la señal de la santa cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor, Dios nuestro. El Evangelio de hoy es de Mateo, capítulo 10, que va de 1 a 7: “Jesús llamó a sus doce Discípulos y les dio poder sobre los malos espíritus para expulsarlos y para curar toda clase de enfermedades y dolencias. Como vemos, la preocupación principal de Jesús es sacar los malos espíritus y curar toda clase de dolencias ¿eh?, ese es el objetivo por el cual Jesús vino, quien no hace eso no está siguiendo lo que Jesús vivió ¿mmm?. Los nombres de los Discípulos eran: primero Simón, llamado Pedro, y su hermano Andrés; Santiago, hijo de Zebedeo, y su hermano Juan; Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo, el recaudador de impuestos; Santiago, el hijo de Alfeo, Tadeo; Simón, y por supuesto Judas Iscariote, que no es lo mismo que Judas Tadeo, Judas Iscariote, que lo va a traicionar. ¿Qué hace Jesús con estos doce hombres?, los envió a misionar, les dijo: vayan de a dos en dos ¿eh?. Cuando entren a un lugar digan: la paz sea con ustedes y ellos lo recibirán. Aquellos que no reciban este saludo no se merecen que ustedes estén con ellos ¿eh?, y de los lugares en que pasa esto tienen que salir del pueblo e incluso hasta sacudirse las sandalias para que no quede la tierra pegada, porque si ustedes van en son de paz y no los reciben entonces quiere decir que no son buena gente ¿mmm?. No vayan a tierra de paganos ni entren en pueblos de samaritanos. Bueno, vayan a todos lados. Y a lo largo del camino proclamen: el Reino de los Cielos está ahora cerca”. Esta es palabra del Señor, te alabamos Señor y te damos gracias.

Ahora bien, hay que tratar de entender entonces qué significa la palabra del Señor ¿eh?, cuando Jesús habla siempre está dando un mensaje de quién lo envió, que es su Papá, Dios Padre, porque Jesús no viene a la Tierra porque se le antoja, un buen día dice: bah, me voy a ir a ver qué pasa por allá, no, el Padre decide que Jesús nazca de María, de la Virgen María, por eso viene toda esa historia que ustedes conocen ¿verdad? cuando el Ángel anuncia a María que va a ser Madre del Redentor. ¿Jesús no estaba todavía?, estaba junto al Padre y el Espíritu Santo, ¿apareció ahora?, quiere decir que antes ¿dónde estaba este buen muchacho?, no, estaba, estaba, la Santísima Trinidad, es decir, el Padre, Jesús y el Espíritu Santo estuvieron siempre, siempre ¿verdad?, pero un buen día, un buen día, el Padre decide mandar a su Hijo para que redima a todos aquellos que buscaban redención ¿eh?; ustedes dirán: ¿y cómo se sabe esto que ya en el comienzo de los tiempos estaba?, bueno, cuando en el comienzo de la Biblia, en el Génesis, Génesis quiere decir origen, en el tercer párrafo dice: que el Padre mira todo lo que había creado y vio que todo estaba hecho bien, con orden ¿mmm?, ¿y estaba Jesús por ahí?, claro que estaba en el Padre Jesús, ya estaba en el Padre, ¿por qué lo sabemos?, porque en el tercer párrafo del Génesis dice: mientras el Espíritu del Señor revoloteaba sobre las aguas, dice el Génesis, el Origen, el comienzo de la Biblia ¿mmm?. ¿Y qué es el Espíritu Santo o el Espíritu del Señor?, el amor entre el Padre y Jesús, que es también Dios, entonces ya en el comienzo estaban los tres pero en un momento determinado de la historia, mucho tiempo después de la Creación ¿mmm? y pensando que los hombres no habían hecho bien las cosas, habían usado mal su libertad para hacer daño a los demás ¿mmm?, decide mandarle a su Hijo para redimirlos a todos. Y le comunica a María lo que ustedes ya saben, el Arcángel Gabriel, que va a ser madre de un niño, ese niño crece, ese niño a los veintinueve, treinta empieza la predicación y después a los treinta y tres muere en una cruz.

Ahora, ¿y cómo?, ustedes dirán, ¿qué está diciendo, cómo relaciona una cosa con la otra?, porque aquí habla de que los Discípulos, Él los envía ¿a qué?, a predicar la Buena Nueva, Buena Nueva quiere decir la traducción del Evangelio, el Evangelio significa: Buena Noticia, y ¿qué era esa Buena Noticia?, lo que dice aquí el Evangelio de hoy, vayan a todos los lugares, sanen a los enfermos, expulsen a los demonios y resuciten a los muertos, esa era la Buena Noticia ¿verdad?. Y ya sacamos una conclusión, cuando uno viene al Santuario y quiere irse enseguida porque es de lejos ¿verdad? y se pierde la palabra del Señor, se pierde la sanación, muy simple, por una razón muy sencilla ¿mmm?, el Señor es el que envía a los Discípulos a decir todas estas cosas ¿verdad?.

Tenemos que ser tan humildes, pacientes, sabios de aceptar que el Señor para darnos lo que necesitamos tiene que entrar en nosotros, y ¿cómo entra?, a través de la palabra, si uno no conoce la palabra del Señor no puede entrar en nosotros, ¿por qué?, porque uno ama aquello que conoce, no ama cualquier cosa ¿eh?, no amo a la arañita escondida en la cableada porque no la conozco, dice que existe, entonces para que uno ame algo o lo tenga en cuenta necesita conocerlo, entonces a través del Evangelio uno conoce a ese ser que manda el Padre para darnos la salvación ¿mmm?.

¿Y qué es lo que viene a decir Jesús cuando llega en sus Mensajes?, todo se puede concretar en esto: ámense unos a otros como Yo los he amado, vayan a todos los lugares de a dos en dos y lleven la Buena Noticia del Evangelio, ¿cuál es la Buena Noticia?, los enfermos se sanan, los demonios son expulsados y los muertos vuelven a la vida, los muertos que están en la tumba puede ser pero muchos de nosotros a veces estamos muertos sin sepultura por el mundo ¿no?, cuando uno no tiene ganas de vivir, cuando la vida le parece que es una porquería, cuando uno cree que ya todo lo tiene listo y hecho y que se yo uno está muerto, aunque coma, vaya y venga, es una pena ¿no?, muchas veces uno da olor sin darse cuenta, porque cuando uno está mal da olor, valga la expresión, por supuesto ¿no?, pero al decir da olor se refiere justamente a que las palabras que uno dice son pesimistas, doloridas, dolorosas, y total para qué, y ya soy grande, y esta enfermedad que me agarro y bueno me nuero y ya está porque de algo hay que morirse ¿eh?, esa gente está muerta ya, no hace falta que se muera del todo, ya está muerta ¿eh?, y para qué, total, yo ya tengo hijos, nietos, y ya está todo, ya cumplí, esa gente está muerta, falta que se cumpla nomás el período pero acá dentro ya aceptó que está muerta ¿eh?, bueno.

Entonces Jesús le dice: bueno vayan chicos, a los Apóstoles, a estos que les nombré, vayan por todos lados y anuncien, ¿qué?, la Buena Noticia del Evangelio, y ¿cuál es la Buena Noticia?, de que lo más grande que nos puede pasar es que nos amemos y además los Apóstoles tenían que sanar los enfermos, expulsar los demonios, resucitar a los muertos y además hacerle conocer la Buena Noticia del Evangelio a todos aquellos que no la conocían, porque nosotros decimos a veces que somos católicos y que hemos ido toda la vida a Misa y que se yo cuántas cosas más pero a lo mejor de Jesús no sabemos nada porque si no hemos descubierto todo el amor de Él hacia nosotros no sé si somos cristianos o cualquier cosa ¿mmm?.

Entonces, la palabra que le dice Jesús a los Discípulos que vayan a decir por ahí, la Buena Noticia es anunciarle todo esto ¿eh?, y sobre todo aquellos que menos tienen, menos pueden, menos saben, menos todo. Como en otra parte del Evangelio se lee: los sanos no necesitan médicos, los enfermos sí y ¿qué hombre de alguna manera no está enfermo de algo?, podemos ser muy fuertes, muy vigorosos y ganar concursos de levantamiento de pesa porque toda la fortaleza está en uno, pero acá dentro, nuestro corazón ¿cómo está?, somos egoístas, soberbias, dañinos, mal pensados, no somos buenas personas, somos traicioneros, entonces ser traicioneros, soberbios, mala persona también es estar enfermo ¿eh?. Tener una lengua terrible que destruye todo lo que ve o un pensamiento así también es estar enfermo, líbranos Señor de la gente que tiene la lengua larga, porque como dijeron siempre: que la lengua no tiene huesos pero los huesos hace romper, ¿por qué?, porque la lengua es lo peor que puede pasar cuando es mal usada y les digo más, cuando uno puede ver las almas que están en la oscuridad y que todavía no se han salvado, no han visto la Luz del Señor, la mayoría es por la lengua, porque es una de las peores cosas que podemos hacer, ¿por qué?, porque si alguien comete un delito, clava un cuchillo o le tira un tiro a alguien la ley lo toma preso y lo pone a la sombra por un tiempo hasta que se corrija porque no puede convivir con nosotros, pero cuando uno murmura con su lengua cosas de los demás porque le parece, porque sospecha, porque de acuerdo a lo podridito que estamos acá dentro creemos que los demás también están podriditos ¿no es cierto?. Entonces, si yo pienso que este está mal, este está mal, quiere decir que el que está mal soy yo y con mi lengua destruyo a los demás, sea quien sea, la edad que tenga y todo, esas cosas hay que cuidarlas ¿eh?. Tan malo como la soberbia, el egoísmo, el odio es la lengua larga che ¿mmm?, bueno.

Entonces, ¿quién no está enfermo de algo?, prediquen la Buena Noticia a todos, a los enfermos ¿eh?, porque Jesús manda para que se sanen los enfermos, es lo primero que le preocupa, ustedes dirán: ¿y por qué?, y es muy simple darse cuenta, el Padre creó al mundo con orden, al decir orden quiere decir que todos estaban sanos, vivían muchos años, muchos porque estaban sanos, entonces la falta de salud es un desorden, la salud es orden, y cuando uno dice: y la llevo bien, estoy tranquilo porque no me pasa nada, está queriendo decir: tengo mi cuerpo en orden ¿mmm?.

Entonces, ¿por qué esa preocupación del Padre entonces y de Jesús de llevar la Buena Noticia?, para poner orden, el orden que el hombre quitó del mundo, ¿por qué empezó a enfermarse el hombre?, y por usar mal su libertad. La Biblia dice: el vino alegra el corazón del hombre, pero una o dos copas, una botella ya no sé si lo alegra tanto ¿no es cierto?, por eso todo está como tendiendo hacia un orden, yo dije el vino como pude decir también, no sé, cualquier otra cosa ¿eh?.
Entonces, tenemos que tener en cuenta que el Señor quiere la salud de todos porque Él quiere que haya orden en nuestro cuerpo. Cuando uno se siente sano, esta mañana un señor vino, no podía tenerse en pie, noventa y cinco años, vino con su señora y a él le gusta mucho jugar a las bochas, entonces dice: pero pierdo el equilibrio, era lo que más me gustaba, bueno le pedimos a Dios que te de el equilibrio ese que perdiste, después se cayó, para que vos puedas seguir jugando a las bochas ¿no?’, me conto su vida, sus cosas así rápidamente, bueno, y ¿qué buscaba él?, orden en su cuerpo para seguir haciendo lo que hacía siempre ¿no es cierto?, una persona de noventa y cinco años me parece hermoso que se haya distraído jugando a las bochas, precioso, bueno. Entonces, cuando se fue y decía: estoy bien, a él le parecía algo tan maravilloso que se emocionó, pero yo quería decirle, no le dije nada, pero quería decirle: querido, no es nada del otro mundo que el Señor te haya hecho estar bien, te haya sanado, si para eso vino Jesús, para sanar los enfermos, pero nosotros cuando vemos que alguien se sana nos extraña ¿verdad? que haya un milagro, sin embargo es lo normal, ¿por qué?, porque acaso Jesús no manda a todos: vayan de a dos en dos, sanen a los enfermos, expulsen a los demonios, etc., ¿no?. Ahora, entonces ustedes dirán: ¿quiere decir que si el Señor quiere orden, quiere decir que podemos vivir eternamente, como nuestros primeros padres que cumplieron más de mil años? ¿no?, está demostrado eso ¿eh?, no me refiero a Adán, porque Adán, la palabra Adán en hebreo significa padre de los hombres, eran grupos al comienzo de persona ¿eh?, Adán quiere decir padre de los hombres, no un hombre solo ¿eh?, no, y Eva tampoco, eran grupos ¿no es cierto?, bueno.

Entonces, el Señor al darnos lo que nosotros llamamos un milagro para Él es natural concederlo, ¿por qué es natural?, porque Él vino a poner orden, en las primeras Revelaciones que hizo aquí en el año 95, porque no sé si saben que desde el año 95 Jesús viene todos los días con su Mamá por acá y da Mensajes, bueno, para todos los hombres, ahora, entonces tenemos que tener en cuenta que un milagro no es algo como para ponerse a llorar ni a gritar, por supuesto, el que no camina y camina se siente emocionado pero no es nada más el orden que prometió Jesús y el Padre desde el comienzo cuando dijo: miró todo, estaba hecho bien, ¿qué es bien?, en orden, la gente no se moría porque no se moría, ustedes dirán: pero entonces ¿qué es esto de morirse de viejo?, no entendemos, bueno cuando un cuerpo ya no da más por algún motivo, por herencia, por lo que sea ¿eh?, se muere. Ahora, ¿qué pasa, entonces la sanación no funcionó?, sí, la sanación siempre funciona, ocurre también que la sanación es tener una buena muerte ¿mmm?. Cuando a veces nos empecinamos con esa persona que cumplió casi cien años y queremos tenerla y tenerla en vez de decirle: gracias Señor que la tuviste casi cien años a mi lado ¿eh?, ahora agotó todas sus fuerzas, no tiene más fuerzas, bueno, tiene que incluso alegrarnos y la sanación para ese ser humano es tener una buena muerte. No siempre la sanación es salir vivito por ahí, no, no, la sanación también es una buena muerte, tengámoslo en cuenta eso ¿eh?, porque creemos a veces que todo tiene que ser así, dos más dos es cuatro y no me llevo nada, pero dentro de las palabras del Señor eso no funciona porque dos por dos puede ser veinticinco también ¿eh?, dos por dos es cuatro y no me llevo nada es en el mundo de los hombres, pero en el mundo de Dios no necesariamente es así, porque se mueve en otro, en otro plano ¿mmm?, el médico dice lo suyo y Dios dice lo suyo ¿verdad?, bien.

Entonces, el Evangelio de hoy en su palabra nos está demostrando que nos ama un montón porque ya los Discípulos los manda de a dos en dos por el mundo a todos esos muchachos que nombré recién, Pedro, Juan, Santiago, etc., los manda de a dos en dos para sanar los enfermos, expulsar los demonios y resucitar a los muertos y solamente eso se puede hacer cuando las personas se aman unos a otros, sino no hay posibilidad de todo eso. Por eso en otra parte del Evangelio dice: si llegan a una ciudad y ustedes dicen: la paz sea con ustedes y la gente ni mu, retírense de esa ciudad porque no se merecen ¿eh? y cuando se retiran sacúdanse el polvo de los zapatos porque ni siquiera de la ciudades que no reciben al Señor hay que tener sucio los zapatos, ni siquiera ¿mmm?, porque cuando uno bendice así como bendecían los Discípulos y la persona no se merece la bendición, incluso la rechaza, la bendición vuelve a quien la dio, por eso, muchas veces dicen: para qué voy a dar la bendición si la persona no la quiere, vos dásela, si la bendición no la recibe vuelve a vos, no es palabra mía, es palabra del Evangelio.

Que hermoso mensaje nos trae hoy el Señor en darnos esta buena noticia: ámense unos a otros como Yo los he amado y además sanen a los enfermos, expulsen a los demonios y resuciten a los muertos y que la palabra o la Buena Noticia sea predicada o dicha o comentada a todos, especialmente a aquellos que menos tienen, menos pueden, menos saben, menos todo ¿eh?, porque no es fácil, no es fácil ¿verdad?, cuando nada se tiene, nada se sabe, ¿qué pasa?, el ser humano está como destruido ¿por qué?, porque parecería que alguien ya decidió todo por él.

Bueno, alegrémonos entonces con esta Buena Noticia de que el Señor pasa sanando siempre y que la base de todo, y que la base de todo es escuchar su palabra y hacerla entrar en nuestro corazón, bien.

Entonces pensando en la palabra que acabamos de leer y de explicar decimos con tanto gusto: cantemos al amor de los amores….

Después de escuchar la Buena Noticia del Evangelio ¿mmm?, aquél que estaba triste o preocupado, aquél que se sentía mal, aquél que su corazón estaba como achicharrado por la falta de afecto, nosotros vamos a responder así: no puede estar triste el corazón que alaba a Cristo…, me parece que hay muchos que están tristes todavía, tomen conciencia que están en la casa del Señor, este lugar donde hace 14 años, el 11 de Marzo, decidió con su Mamá decidió quedarse aquí para siempre, quedarse aquí para siempre. Recién leyendo un mensaje que me mandan de Europa, de la zona de Medjugorje, donde aparece la Virgen, ahí entre los papeles dice: Nuestra Señora de la Paz, que aparece aquí con ese nombre, porque hay dos únicos lugares en el mundo donde aparece la Madre, en este lugar de Medjugorje y en una localidad cordobesa llamada Justiniano Posse, eso lo leyeron allá tan lejos en Europa donde aparece la Virgen en Medjugorje ¿mmm?.

Les digo, para que tomen conciencia que están en lugar Sagrado Mis queridos, no porque a mí se me ocurra sino porque a Jesús y María les pareció bien adoptar este lugar como su Casa y lo que veremos todavía, cuántas cosas veremos. Todo aquello que nosotros pensamos, sanar los enfermos…, sanar los enfermos, expulsar los demonios y resucitar a los muertos, dentro de poco tiempo, tal vez menos de lo que cualquiera puede creer va a tener origen lo que llamamos la Ciudad de Dios, donde va a estar el Templo del Tercer Milenio, como quiere la Madre y además de eso va a haber hospitales, que no se llaman así en la Ciudad de Dios sino que se llaman lugares de alivio del sufrimiento, porque la palabra hospital suena medio feo, alivio del sufrimiento ¿eh?, donde por fin todos aquellos que nunca pudieron tener acceso a la medicina que es cara, porque hacerse una tomografía o todas esas cosas las mutuales no lo cubren ¿no es cierto? ¿mmm?, pero en ese lugar todos aquellos que vivieron al margen siempre de todos los adelantos de la ciencia tendrán todo gratuitamente en la Ciudad de Dios, porque allí se va a vivir como el Señor quiere, donde ¿mmm?, se va a poder decir la palabra a todos, esa misma Buena Noticia que leemos en el Evangelio de hoy que Jesús le dice… (se dio vuelta la cinta)…, todos aquellos que no tienen lugar en otro sitio, llámense adultos-adultos, que para nosotros los ancianos se llaman así, los niños de la calle, los sidosos, los tuberculosos, todas las enfermedades infecciosas, todo; ustedes dirán: pero eso dentro de cien años, no mis queridos, tal vez el mes que viene, tal vez el mes que viene, si Dios así lo quiere así va a ser.

Entonces con más fuerza vamos a decir: Jesús en el Evangelio de hoy manda a sus Discípulos de a dos en dos a predicar la Buena Nueva del Evangelio, ¿y qué es la Buena Nueva?, ámense unos a otros como Yo los he amado, sanen los enfermos, expulsen a los demonios y resuciten a los muertos, pues bien, en la Ciudad de Dios todo eso va a tener vida y todos aquellos que tal vez no tuvieron una cama para morirse dignamente porque no les alcanzaba su mutual o su presupuesto en la Ciudad de Dios va a haber lugar para todos, sí señor. Lo digo con gran gusto y como una especie de venganza al revés, es decir, estos que nunca ahora todo, estos que nunca tuvieron ahora sí ¿mmm?, ¿o Jesús no murió en la cruz por cada uno de nosotros?, ¿por qué algunos tantas ventajas, porque tienen la billetera llena?, y por qué otros que no tienen ni siquiera una mutual no tienen dónde ir a recostar su cabeza, no. Es una satisfacción tan grande que pasa en nuestro interior, sobre todo para hacer ver a todos aquellos que el corazón está lleno de egoísmo y piensan nada más que para sí, en la Ciudad de Dios se va
a pensar para todos aquellos que no tienen lugar en otro lado, sí señor, bien.

Como ustedes saben los días de Oración el Señor no me da los Mensajes en
privado sino que los da aquí en público, Él preside la asamblea junto a Mamá María, la Virgen, los Santos, Santa Faustina, la Santa de la Misericordia, Santa Rita de Casia, está por supuesto gente amiga, conocida de uno de hace tiempo, San Pío de Pietralcina, el Padre Pugnata que vivió en Reducción, el Padre que vivió en Teodelina y que se murió de treinta años en un accidente, no sé si accidente o algo por el estilo, Monseñor Angeleli, que lo mataron en un camino en la Rioja y que la Iglesia demoró treinta años en reconocerlo ¿eh?, ¿vieron?, en este lugar corre peligro la injusticia porque todo lo que sea justo aquí tiene vida.
A nosotros no nos hizo falta que pasaran tantos años para reconocer el crimen de Monseñor Angeleli, no, enseguida nos dimos cuenta y yo personalmente fui a sacar fotos y las tengo muy bien guardadas de todos los lugares que estuvo Angeleli, a los pocos días retiraron todo pero no hizo falta que la Iglesia reconociera que lo habían matado, en estos días está el juicio, nosotros nos dimos cuenta enseguida, por eso, gracias a Dios pobre injusticia, aquí no tiene lugar, que maravilla, lo digo con todo el corazón y lo mejor que puede pasar es cuando la boca reboza lo que sale del corazón dice el Evangelio ¿mmm?.
Nosotros no esperamos treinta años para decir lo mataron, en aquél momento nos dimos cuenta, pero recién después de treinta años fueron a dar una Misa para Angeleli, ese santo varón al cual conocí y me llevé una impresión que solamente uno tiene de los Santos, le cruzaron una camioneta en la calle, lo hicieron tumbar y murió ahí en los llanos de la Rioja, donde era Obispo, también está aquí presente hoy por eso lo nombré, ese gordo precioso pero del otro lado está más flaco, no tiene tanta panza, bien.

Entonces, como les decía, como en todas las Revelaciones a lo largo de la historia de la Cristiandad y del Cristianismo, Jesús toma la palabra de alguna persona para decir sus cosas, el Señor les habla a todos en la conciencia pero cuando da mensajes para todos los hombres toma a algunas personas para darles los Mensajes, bien.

Entonces, con toda nuestra atención esperamos la venida de Jesús de la Misericordia, que continua aquí las Revelaciones que le hizo a Santa Faustina desde el año 1930 a 1937, habla Señor que tu siervo escucha.

Dice Jesús:

Yo soy el camino, la verdad y la vida, quien me sigue a Mí no anda en tinieblas, Yo soy la Luz del mundo, dichoso aquél que puede construir su vida a Mi Luz, dichoso aquél que puede alegrarse cuando las injusticias terminan, cuando aquellos pobres, enfermos o los que no tienen qué comer ni tomar agua, dichosos aquellos que pueden hacer un lugar para ellos o procurarles el sustento o la bebida, dichosos aquellos que queman su vida por la causa de la justicia entre los hombres.

Mis hermanos queridos, no puede ser que el sol salga solamente para el diez por ciento de las personas, el resto tiene que vivir una vida amarga y difícil, tal vez ustedes Mis queridos no lo vean tanto en este lugar pero hay tantos sitios pero tantos, donde las personas nacen programadas, donde el tatarabuelo sabía exactamente qué le iba a pasar a su nieto y tataranieto porque nunca tuvieron nada, ese es el reino de la injusticia, pero aquí Mis queridos se terminó, la palabra del Señor después de dos mil años por fin va a tener eco.

Cuando Yo le dije a Artemio estas cosas, ¿y por qué Señor en este lugar?, has escuchado el Evangelio donde dice que los pájaros tienen sus nidos, las fieras sus madrigueras y el Hijo del hombre, Yo, no tengo dónde reclinar la cabeza, ¿y sabés por qué todo esto aquí?, porque aquí tengo dónde reclinar Mi cabeza.

Por eso la Ciudad de Dios, por eso un lugar donde todos los pueblos del mundo vendrán a ver cómo se vive en una comunidad cristiana, ya en el año 96 Mi Mamá la Virgen decía: va a haber Misas durante las veinticuatro horas, nosotros no entendíamos, pero el Señor siguió: las veinticuatro horas porque el hombre tiene que vivir en una Misa permanente, ¿o acaso la Misa no se la llama Eucaristía?, es decir, donde todos comparten el pan, Mi Cuerpo. Entonces, el compartir Mi Cuerpo significa comunión, comunión significa común unión de las personas donde se aman, se atienden, se comprenden, se contienen.

En todo esto Mis queridos estoy sentando las bases del Tercer Milenio, pobre de aquellos que no escuchan Mi palabra, su arrepentimiento será eterno, porque la verdad del Señor, Mi verdad pasa como una aplanadora y aquellos que no quieren reconocer la verdad quedan a un costado como objetos sin vida porque ¿no comencé hoy Mi Mensaje diciendo: Yo soy el camino, la verdad y la vida?, Yo soy el que da la vida en abundancia, Yo soy la Luz del mundo, Yo soy el Enviado del Padre, quien me ve a Mí ve a Mi Papá, quien me ve a Mi ve al Espíritu Santo, por eso me parece tan feo que en algunos Templos en el altar mayor esté una cruz gigantesca donde Yo estoy colgado allí muerto amarillo y triste, Mis queridos, ¿cómo hacen decirle a vuestros hijos que Yo soy el Dios de la vida y que doy la vida en abundancia?, si me ven clavado ahí muerto, ¿cómo se las arreglan para hablarle a vuestros hijos de que Yo soy el dador de la vida?, ¿cómo se las arreglan?, está muy bien la cruz, pero a un costado para recordar, Yo estuve seis horas nada más en la cruz, seis, pero parece que otros necesitan verme siempre en la cruz, pero un buen día tienen que descolgarme y dejarme vivir entre todos, por una razón muy simple, porque he resucitado y porque estoy triunfante en medio de ustedes, delante y detrás, a derecha e izquierda, arriba y abajo, siempre, por eso en el Evangelio que hoy han leído y comentado ven como nombro a los Discípulos y los mando de a dos en dos para recorrer el mundo conocido anunciando la Buena Noticia del Evangelio, ¿qué Buena Noticia?, y que el amor debe prevalecer, ámense unos a otros como Yo los amé y además: sanan los enfermos, expulsan a los demonios y resucitan a los muertos y la palabra del Señor, Mi palabra es predicada y dicha a todos aquellos que nunca pudieron escucharla porque no tuvieron posibilidades, porque no se les enseñó, porque se los dejó de costado, porque se creyó a veces que el color de la piel hacía que fueran menos hombres que los otros. ¿O acaso no ocurrió con los habitantes del continente africano?, que hasta muy avanzado el 1800 aún creían que los negros eran un hombre incompleto, por lo tanto no merecía evangelizarse. Por eso la evangelización en África empezó tarde, empezó hace un siglo y medio, dos, antes no, ¿por qué?, porque consideraban que los negros no eran, eran un paso entre el animal y el hombre.

Mis queridos así no, Yo les enseñé otra cosa ¿eh?, cuando Yo les digo que soy el camino, la verdad y la vida les estoy hablando y diciendo que he muerto en la cruz por todos y por cada uno, que no hay hijos y entenados sino que todos son hermanos e hijos de un mismo Padre.

Guerra a la injusticia pero no guerra con armas, noo, la guerra del amor, que destruye la maldad, los egoísmos, los resentimientos, la intolerancia, la falta de respeto y la persona puede gozar por fin de acuerdo a lo que es como persona.

Mis queridos, tengo tanto gusto en anunciar y decir todas estas cosas a ustedes, porque ustedes no vinieron porque sí, Yo los he traído desafiando a lo que la mayoría dice que en los grupos traen problemas de contaminación, etc., ustedes están acá, Yo los he traído para que escuchen todas estas cosas, para que sepan que dentro de muy poco las injusticias se van a terminar, por lo menos en la Ciudad de Dios.

Les amo con todo Mi Corazón y no se olviden que son seres privilegiados porque el único lugar en el mundo donde pueden escuchar Mi voz es acá, porque a Mi Papá y a Mí nos pareció bien, acá no hay algo distinto a Mi Papá y a Mí nos pareció bien hacerlo. Así como cuando Mi Papá terminó la Creación, en los primeros párrafos del Génesis, miró todo y vio que todo estaba bien y ahora todo esto, todo esto es porque a Mi Papá y a Mí nos pareció bien, porque los amamos a todos, sin ninguna diferencia, con total tolerancia y respeto hasta las últimas consecuencias de todos, de todas las divisiones, de todas las cosas que no son buenas, aquí dentro ya es el anticipo del paraíso.

Habla Artemio:

Está tan cerca el Señor de nosotros, tan cerquita, abrámosle nuestro corazón
para recibirlo, hemos escuchado su palabra y la explicación de su palabra, es lo único que puede sanarnos, no hay otra cosa, no hay ningún hombre que pueda sanar a otro hombre, solamente Dios es el que sana.

Abran vuestros corazones para recibir al Señor, tan cerca está de nosotros pero tan cerca que no podemos menos que decirle, con todo nuestro entusiasmo: tan cerca de mí….

El otro día Él nos pidió permiso, denme permiso dijo, quiero entrar en vuestros corazones, Él es tan respetuoso de nuestra libertad que hasta nos pide permiso para entrar a nuestro corazón, seamos conscientes para decirle: vení Señor, vine aquí para eso, estaba esperando tu llegada a mi vida, porque quiero irme de este lugar sano, porque hoy en el Evangelio hoy me lo recordaste cuando le dijiste a los Apóstoles, vayan de a dos en dos sanando los enfermos, expulsando los demonios y resucitando los muertos, es hermoso Señor, es hermoso saber que si abrimos las puertitas de nuestro corazón, que solamente tienen manija de adentro vos entrás en nosotros para quedarte para siempre y ya que está aquí y ya que Él es tan generoso todos juntos le decimos: sáname Señor con tu Espíritu…. Renovamos las promesas del Bautismo: bautízame Señor con tu Espíritu….

Vamos a pensar ahora con los ojitos cerrados en todos los problemas que tenemos, todos los problemas de salud, todas las enfermedades, las relaciones con nuestra familia, la falta de…, a ver esa criaturita para que no nos distraiga la hacemos callar, con todo el amor pero que no nos distraiga.

Pasá sanando Jesús como te pedimos, pasá sanando todas las enfermedades, desde la punta de los cabellos hasta los pies, todo Señor, pasá sanando todo.

Señor pasá sanando a las personas que tienen cánc