Cómo me gusta pasear por la Ciudad de Dios porque aunque aún no esté hecha, aunque todavía no se vea objetivamente hace ya bastante que todo funciona y funciona muy bien, algunos pensarán que todo es tan ideal que hasta parecería una utopía total, completa. Mensaje del 04 de Abril de 2009

Habla Artemio:

04 de Abril.

Dice la Virgen María:

Cómo me gusta pasear por la Ciudad de Dios porque aunque aún no esté hecha, aunque todavía no se vea objetivamente hace ya bastante que todo funciona y funciona muy bien, algunos pensarán que todo es tan ideal que hasta parecería una utopía total, completa, por supuesto que los comienzos no fueron tan fáciles, las personas no pueden de un día para otro cambiar fundamentalmente hasta que estén involucradas en la gracia, entonces todas las cosas empiezan a ser distintas, el hombre tocado por la gracia ya no piensa ni habla de la misma manera, entiéndanlo.

Por eso, cuando Yo paseo por la Ciudad de Dios visito enfermos o a personas adultas-adultas, o bueno, también niños y paso por la cocina viendo cómo se preparan esos manjares para todas las personas, sueño y al mismo tiempo veo la realidad, saben Mis queridos, que los que ya están viviendo en la Ciudad de Dios están gozando de una vida justa. Piensen Mis queridos, hay seres humanos que en su vida se han hecho una ecografía para ver algo de su cuerpo o cómo está su embarazo, que para una gran mayoría todos los aparatos sofisticados de nuestro tiempo para detectar enfermedades ni pasaron por su imaginación y de repente tienen todo al alcance de la mano.

Por supuesto, por supuesto que todos esos aparatos deben estar siempre usados por manos súper especializadas, pero no técnicamente, que eso también es necesario, tienen que estar súper especializadas en un trato de amor que no tenga igual y para eso Mi querido te vas a encargar vos cuando ves algo en la práctica o en el pensamiento de los hombres, le das un pequeño tiempo y le decís: servís al Señor en estos hermanos como debe ser o te vas, dale un tiempo para reflexionar y para aprender y como tendrán buenos sueldos las personas que trabajen allí, los que quieren cobrarlo por supuesto, entonces a veces un buen sueldo da mucha seguridad a la familia que crece. Pero estos ya son problemas de otro tipo, Yo lo que quiero decir es que vos tendrás que encargarte de decir: basta, hasta aquí.

Un enfermo no puede ser tratado ni siquiera una vez con descortesía, con falta de afecto y con todas esas cosas que para nosotros son vivenciales, no puede, no debe, y si lo hace, pues bien, gracias por los servicios prestados pero no tenés lugar en la Ciudad de Dios, se te dio el tiempo necesario pero no lo aprovechaste.

Por supuesto que habrá montones de establecimientos, valga la expresión, de secciones para atender todo tipo de enfermos, el nombre corriente es hospital pero vamos a usar las palabras de San Pío de Pietralcina: podrán ser hospitales de las más diversas clases pero todos, el conjunto, se llamará: El alivio del sufrimiento.

Con un respeto total y absoluto, completo y definitivo sobre los hombres y sus formas de pensar, cuando Yo les decía recién sobre cómo deben actuar los profesionales en la Ciudad De Dios me refería a los profesionales, porque las otras personas vendrán con sus ideas, con su forma de hacer, de sentir, de pensar y habrá que respetarlos y a su vez, hacer que ellos respeten las ideas de los otros, torpe sería si un mahometano, un judío o cualquiera, quisiera cambiarse de la forma de pensar, no, se le da todo lo que humanamente corresponde. Si ellos preguntan por el Dios que sustenta todo eso, entonces se le hablará, antes no.