Que interesante seríamos todos si comprendiéramos muchas cosas ¿no?, y entendiéramos cómo deben criarse los chicos, como deben ser tratados los adultos entre sí y por supuesto sobre manera el trato con el Señor ¿no?, porque aquél que hizo cualquier macanita ya tiene un miedo pánico de pasarla muy mal ¿eh?, y a lo mejor es una cosa tan normal pero nos metieron la ley en la cabeza: esto es así y se hace así y no se discute. Oración del 31 de Diciembre de 2008
Habla Artemio:
…sonríe que Jesús te ama….
Parece demasiado fácil decir: sonríe que Jesús te ama, te quiere, te da la vida, ya te salvó, dentro de la Economía Divina es así fácil todo, así de fácil, la justicia humana y la justicia de los hombres en general es dura, es cruel, incluso la justicia que hacemos con la lengua sobre las personas siempre tiene un poco de crueldad, es decir si la persona tiene cincuenta virtudes y doscientos defectos buscamos siempre algún defecto para señalar, ni si tuviera una sola virtud podemos, que pena ¿no?, el Creador de todo, el que creemos que puede ser el juez terrible es el que nos da más facilidades para todo.
Sonríe que Jesús te ama, te quiere y te da la vida ¿mmm?, ustedes dirán: pero
está repitiendo lo mismo, no, amar es cambiar de sitio el alma, cuando se ama a alguien uno deja de estar en uno para entrar en el otro y después dice: te quiere, el querer es otra cosa, el querer está unido a la voluntad: yo quiero hacer tal cosa, yo quiero podar un árbol, yo quiero traer una flor, yo quiero ¿mmm?, y en este caso Jesús nos quiere para Él, ¿ven?, los dos planos. Dentro de un simple tema así cuántas verdades que hay y después: te da la vida, que lejos que estamos de valorar ¿no?, esto, y luego: canta, canta para Él, porque el Señor, ya te salvó, no les resulta extraño este tipo de palabras, teniendo en cuenta lo que siempre oímos que te castiga, pórtate bien porque tal cosa, si hacés esto no sé, ¿será que hemos vivido muy engañados respecto a cuánto el Señor nos quiere?, yo estoy convencido de que sí, y pienso que es por un motivo, cuando uno le infunde temor a los demás ese infundir temor es para dominar y en la medida en que uno despierta temor para el otro lo domina, es terrible ¿no?, pasa en la pareja, pasa con los hijos, pasa con todos, parecería como si nosotros vivimos en un mundo que no es el que corresponde ¿mmm?.
Yo pasé toda mi vida en las escuelas y ¿qué es lo que siempre está en la mente de la mayoría?, qué castigo aplicar o cómo voy a hacer para hacer sentir que yo puedo más que él ¿eh?. Es decir, no es en un solo orden, en este caso el orden religioso, no, en todos los ordenes el ser humano siempre quiere poner el pie sobre el otro, que terrible que es eso ¿no?, parecería que nos gustara que el otro pague, que el otro sufra, que el otro ¿eh?, la madre le dice al hijo: ya vas a ver lo que te va a pasar, seguí así nomás, o bien: llegaste a las cuatro de la mañana me vas a tener que rendir cuenta de todo ¿mmm?. Los seres humanos nos hemos equivocado, el temor nunca produce nada bueno ¿mmm?, como dice el Antiguo Testamento: la letra con sangre no entra, ustedes dirán: pero de esa forma no habría ninguno habitando las cárceles, no, no, no, despacio, cuando una persona es juzgada y se la pone entre rejas es para que no le haga daño a sus hermanos ¿eh?, a la gente ¿verdad?, pero incluso las leyes dicen que el ser humano se tiene que recuperar cuando está entre rejas.
Es decir, teóricamente, teóricamente entendemos que el castigo, el sufrimiento y todo eso no sirven, teóricamente, pero nosotros tenemos algo acá que nos impulsa siempre a querer aplastar a los demás ¿eh?, de alguna manera, poquito o mucho pero nos gusta siempre dominar, como decía Cabral, santo varón ¿no?: dominar es su manera y así nadie se libera, pobrecito mi patrón, cree que el pobre soy yo ¿mmm?, cuánta belleza, les digo más, Jesús lo citó en un Mensaje eso, dominar es u manera y así nadie se libera, pobrecito mi patrón, cree que el pobre soy yo.
Entonces, que al terminar este año 08, nos haga pensar a ver si la Navidad que vivimos, el Señor que viene otra vez hacia nosotros, porque mañana conmemoramos la circuncisión del Señor, ¿qué será eso?, circuncidar quiere decir cortar alrededor, circuncidar, cortar alrededor, el día de mañana se conmemora cuando María y José llevan al Niño a los sacerdotes del Templo para que le corten el cuerito del pitito ¿mmm?, eso era la forma en que los judíos entraban a formar parte de la ley ¿verdad?, ¿qué es lo primero que miraban durante la segunda guerra mundial para apresar a los judíos?, si tenía o no tenía el cuerito ¿mmm?, esa era, nadie podía negar que era judío si estaba circuncidado, si le habían cortado ¿verdad?, bueno. Ustedes dirán: pero ¿por qué Jesús eso también?, y sí, porque Él no quiso ser menos que los otros, y bueno hagamos esto también que la ley exige dijeron los padres y lo hicieron ¿no?, y lo siguen haciendo a todos los judíos, todavía hoy ¿mmm?, bueno.
Entonces, Jesús te ama, te quiere, te da la vida, Él te salvó, es nuestro Dios, que preciosura che, todo eso tenemos y pensar que a veces estamos tristes ¿no?, no se explica, teniendo tanto, tanto, sí, es así, estamos tristes y un Dios de amor nos ama tanto, está siempre disponible para darnos todo lo mejor y nosotros nos rompemos los cuernos en todas las cosas de la vida, nos quejamos por todo, parecería que hasta es un oficio el quejarse, incluso a veces hasta decimos con orgullo cuántas operaciones tuvimos ¿verdad?: si, yo tengo siete, y la otra mujer que sintió dice: a mí no me ganan, yo tuve nueve, como si fuera una gran cosa haber sido operado; es decir, lo que yo quiero hacer entender es esto, el ser humano tiene placer cuando sufre o cuenta que sufre cuando hace sufrir a los demás ¿eh?.
Miren que me acuerdo ahora ¿no?, cuando nosotros éramos chicos con mis hermanos y hacíamos alguna cosa como hacen los chicos, entonces mi mamá decía así, para quitarle gravedad a la cuestión ¿no?, dice: no, no, no, esta noche se van a ir a dormir todos descalzos, entonces los chicos que son rápidos se dan cuenta que está, no tomando el pelo pero como queriendo decir: esta amenaza está cargada de amor porque, en vez de decir: van a dormir sin comer no, los voy a mandar a dormir descalzos, que bueno ¿no?, y que yo sepa mi mamá fue tres meses a la escuela, escribía bien pero nunca aprendió psicología ni nada ¿no?, te voy a mandar a dormir descalzo.
Es decir, el castigo nunca sirvió para nada y no sirve, otro tipo de castigos sí, por ejemplo, que no es castigo tampoco ¿no?, una criatura rompe una planta y la mamá viene y le pega en las manos hasta dejársela colorada ¿no?, y el chico le duele, las manos tienen un simbolismo especial, con las manos hacemos todos, pegar en las manos es quitarme de alguna forma vida ¿mmm?, ningún padre lo piensa eso ¿eh?, por ejemplo, y entonces ¿qué castigo habría que usar?, ya que hablamos de esto ¿no?, retirar el afecto, rompió algo, sin reaccionar: vos sabías cuánto mamá quería ese florero porque le recuerda la abuela o porque es el regalo de no sé quién, qué lástima que se rompió, entonces el rostro triste sintiendo, no con falsedad la rotura del florero. Un hijo que está criado de esa forma se va a cuidar muy bien de romper otro florero, porque nadie, nadie quiere herir a quien le ama ¿mmm?, pero nosotros en los aspectos espirituales, con Dios, con las criaturas o con cualquiera, buscamos el castigo por el otro lado ¿mmm?, esto debe ser así y se hace de esta manera, digo porque ya vamos a ver que en el Evangelio de hoy aparece el problema de la ley. Por ejemplo los judíos, que ellos se guiaban siempre por la Torá, la ley, las cosas se debían cumplir sí o sí, por ejemplo, un judío que, si es su tradición y la mayoría ¿no?, cuando se levanta a la mañana, además de lavarse los dientes ¿no?, al mirarse en el espejo dice: gracias Señor porque no nací mujer, el varón dice eso ¿no?, que tal, sin embargo una mujer lo parió, una mujer lo ama, una mujer es su esposa, una mujer es la madre de su hijo, sin embargo: gracias Señor porque no nací mujer.
¿Qué quiero decir con esto?, que la ley judaica siempre la mujer fue menospreciada, no sé si castigada pero, incluso San José mismo cuando todavía no sabía nada de la concepción del Espíritu Santo ¿no?, la repudia a María, en silencio, le daba pena hacerlo en voz alta en el Templo, él la repudia en silencio, porque todo hombre tenía derecho a repudiar, es decir desechar a su mujer cuando su hijo no era de él o bien si era estéril ¿no?, porque la ley decía, uno dice: pero eso fue hace tantos años, no mis queridos, vivimos nosotros con la ley metida en la cabeza, no sé si de los judíos o de quién pero tenemos la ley, esto se hace así y punto y ni chistar siquiera, se va a dormir, pero no descalzo como decía mi mamá, no, se va a dormir sin comer, bueno.
Que interesante seríamos todos si comprendiéramos muchas cosas ¿no?, y entendiéramos cómo deben criarse los chicos, como deben ser tratados los adultos entre sí y por supuesto sobre manera el trato con el Señor ¿no?, porque aquél que hizo cualquier macanita ya tiene un miedo pánico de pasarla muy mal ¿eh?, y a lo mejor es una cosa tan normal pero nos metieron la ley en la cabeza: esto es así y se hace así y no se discute, pero ¿acaso el Señor no nos dio libertad para decidir sobre nuestros actos? ¿eh?.
Numero 20, le pedimos al Señor que ponga aceite en nuestra lámpara, una lámpara sin aceite no arde, no da luz ¿verdad?, y así como vamos a poner nafta al coche, no anda si no le ponemos combustible y nosotros tampoco funcionamos si no tenemos la gracia del Señor, entonces cuando decimos: poné aceite Señor en nuestra lámpara, le estamos diciendo: poné tu gracia Señor dentro de mí para seguir, sobre todo en las postrimerías del año y del comienzo del nuevo, es decir al final del año y al comienzo del nuevo, poné aceite Señor en mi lámpara, a ver como se lo decimos: pon aceite en mi lámpara Señor…. Al comparar el aceite con la gracia no estamos haciendo nada más que lo que hacía Jesús, Él hablaba con comparaciones siempre, de esa forma las cosas se entendían ¿verdad?, cuando uno ve a alguien que habla y no le puede entender lo que dice tendría que levantar la mano y decir: hable más claro, porque así no entendemos nada, y nos pasa siempre. En televisión hay médicos muy famosos que nos hablan con un lenguaje que nada, hay sacerdotes muy sabios que nos hablan con un lenguaje que no pasa nada, no entendemos, en todos los órdenes de la vida, el padre a sus hijos le dice: porque esto, con palabras a una criatura de cuatro, cinco años no entienden, para qué.
Es decir, el gran drama de nuestro tiempo es la falta de comunicación, algunos dicen que son las guerras, otros dicen que los Tsunami que aparecen de repente, no sé cualquier cosa, pero lo que nos falta es comunicación ¿eh?, nuestros presidentes van a las conferencias de paz con el cuadernito con todo elaborado, cada uno dice lo suyo y no escucha al otro y la guerra sigue como está pasando ahora que todos los días mueren un montón, entonces el gran drama de nuestros días es la falta de comunicación, no se escucha al otro: quiero saber cuál es tu verdad, decímela, y tengo que incluso dar la vida para que vos puedas seguir sosteniendo tu verdad y lo lógico sería que vos también lo dieras para que yo pueda seguir sosteniendo mi verdad, porque sino ¿qué pasa?, un golpe, una guerra o misiles ¿eh?, puede ser que ya lleven miles de años la guerra entre árabes e israelíes?, ¿nunca pudieron sentarse a hablar para ver como solucionar?, no, el gran drama de nuestro tiempo, si, la guerra, el hambre, falta de diálogo, falta de comunicación en todos los órdenes, en todos los órdenes.
Entonces, de nuevo: pon aceite en mi lámpara Señor…. Y ahora una invocación, ¿por qué quiero que pongas aceite en mi lámpara?: Señor Jesús, tu eres mi guía…. ¿No es precioso?, que hermoso que es ¿eh?, eres mi guía, eres mi amor, salvaste mi alma perdida, por eso yo te doy gracias con todo el corazón ¿eh?, qué armonía que podemos tener los humanos cuando estamos en paz con el Señor ¿eh?, Él siempre quiere, nosotros no queremos a veces, que mal llevados que somos ¿eh?, mal llevados somos ¿no?, bueno, muy bien.
Entonces ahora vamos a leer la palabra que hay que explicar porque la palabra de hoy es un poquito, no difícil pero elevadita, entonces hoy miércoles 31 ¿mmm?, San Silvestre y Santa Paulina o Paula, bueno, el Evangelio de San Juan 1, de 1- 18. Por la señal de la santa cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. Esto, los que tienen algún año habrán escuchado al terminar la Misa que decía: en el principio era el Verbo…, decía en latín ¿no?, en castellano: “en el principio era el Verbo y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros. Él estaba frente a Dios al principio. Por Él se hizo todo y nada se hizo sin Él. Lo que por Él se hizo era vida, la vida es Luz para los hombres. La Luz brilla en las tinieblas, pero las tinieblas no la recibieron”. Vamos a ver, en el principio era el Verbo, si se aburren levanten la mano, el Verbo es una palabra, tengo que decirlo porque sino no puedo menospreciar la capacidad de ustedes, tengo que decir las cosas para que se entienda ¿no?, verbo es una palabra latina, que quiere decir origen, quiere decir palabra ¿eh?, y cuando este Evangelio fue escrito, fue escrito en griego, San Juan lo escribió en griego ¿eh?, y en vez de verbo usaba otra palabra: logos, que quiere decir lo mismo: origen, logos y verbo es exactamente lo mismo.
Entonces, el verbo, en el principio era el verbo, quiere decir: en el principio estaba Dios y Dios era todo y Dios vino al mundo y el mundo no lo reconoció, ¿qué quiere decir todo esto?, el Verbo, la Palabra, es decir Jesús, ya estaba en el Padre desde siempre, y dice: frente a Dios era el Verbo y el Verbo era Dios, es decir lo mismo, dos personas distintas pero Dios, dice: pero Él se hizo todo y nada se hizo sin Él, bueno, y la vida de Él fue Luz para los hombres pero esa Luz los hombres no la reconocen.
Entonces, Dios Padre crea a su Hijo, el Hijo viene al mundo, nace como en Navidad, crece, predica y lo cuelgan en una cruz, Él era Luz para los hombres, la Luz brilla en las tinieblas pero los hombres no la reciben. Por eso, yo siempre les dije, a los chicos, a los grandes, a cualquiera, que la Navidad si bien era una fiesta alegre no tenía tanto de alegre, por una razón muy simple, porque es el comienzo del fin de Jesús, sí es alegre la Pascua, porque hay una resurrección, pero la Navidad no es tan alegre, no es tan alegre, no porque el chico haya nacido en un pesebre, porque después tuvo que huir a Egipto, ohh, no, no, no es por eso, sino porque Él me recuerda detrás de su figura de Niño que hay una cruz esperándolo y esa cruz somos nosotros, ¿por qué?, porque Él muere en la cruz por cada uno de nosotros, al decir nosotros digo todos los hombres ¿verdad?.
Entonces, está muy bien que veamos a ese Niñito ahí todo felicidad, todo, si, si, como todo nacimiento, precioso, pero uno si saca los ojos un poco ven que detrás de ese pesebre hay una cruz que está esperando; vos dirás: ¿y no se pudo haber evitado esa cruz?, no, no, y una de las razones es porque el Padre quiso que su Hijo derramara sangre, sangre en todas las culturas y a lo largo de los siglos fue siempre el sinónimo de vida, entonces quien traía la vida, Jesús, de parte del Padre, tenía que entregarla, ¿por quién?, por vos, por vos, por vos, por mí, por todos ¿eh?, tremendamente precioso y terrible por otro lado ¿no? que el Padre mande a su Hijo a la muerte por nosotros, y viene la pregunta rápida: ¿y tanto nos amó?, que te parece, entregó a su propio Hijo por nosotros.
Si uno pudiera un chiquitito de Luz ¿no es cierto?, hacer sobre eso se terminarían tantas cosas malas ¿no?, Él era Luz, Él era Vida, vino pero no lo reconocieron y lo pusieron en una cruz, así fue ¿mmm?.
Dice: ”porque la Luz llega al mundo. La Luz verdadera ilumina a todo hombre , se refiere a Jesús. Ya estaba en el mundo pero ese mundo no lo conoció” . Lo persiguieron, lo persiguieron, lo persiguieron, lo persiguieron hasta que terminó en una cruz, claro, si la historia terminara en una cruz sería espantoso para nosotros, pero estuvo seis horas en la cruz, después estuvo en el sepulcro y después resucita y al resucitar ahí realmente es la alegría mayor ¿por qué?, porque esa resurrección representa para nosotros la vida y antes no, no, por una razón muy simple, por una razón tan simple porque para las culturas que había en ese tiempo ¿no?, morirse era morirse, morirse, terminar y según qué hubiéramos hecho pasábamos a otra cosa para seguir pagando si habíamos sido dañinos o gozando si habíamos sido buenos, ¿vieron?, desde aquellos tiempos el premio, el castigo, el premio, el castigo ¿eh?, que pena che.
“Vino a su casa, y los suyos no lo recibieron, por qué dice su casa, porque Él apareció en el pueblo de Israel, su casa ¿eh?, bueno, pero a todos los que lo recibieron les concedió ser Hijos de Dios , estos son los que creen en su nombre, seríamos nosotros, creemos en su nombre y vuelve a repetir: y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, vivió entre nosotros y nosotros no lo quisimos entender y lo pusimos en una cruz”. No hace tanto, pero ya lo había dicho antes, en uno de los Mensajes, porque para los que no conocen esto todos los días, desde hace catorce años en Marzo Jesús viene todos los días del año a dar sus Mensajes y un día dijo, varias veces pero ahora hace poco, dijo: ¿por qué no me descuelgan de la cruz y me dejan vivir entre ustedes?, nosotros los colgamos, ¿qué es lo primero que vemos cuando llegamos a la Iglesia?, allá en el altar mayor una cruz y Jesús con la cara así, muerto, yo les pregunto: ¿a quién le entusiasma un hombre muerto?, a mí no, no sé a ustedes, ¿qué me puede dar un muerto?, muerte nada más, sin embargo allá delante viste, che no se le habrá prendido la lamparita a ninguno: basta de cruces en el altar mayor, las cruces tienen que estar al costado, para recordarnos sí, que Él murió ahí, claro, que sí ¿eh?.
Fijate vos, esta cruz que yo tengo me la dio Juan Pablo II, pero cuando fuimos a una parte, es decir aparte, donde no había gente, me regaló una crucecita así que algunos de ustedes las vio pero no está Jesús en la cruz, está la crucecita nomás ¿eh?, ¿qué te está indicando?, que en el fondo todos piensan que el Señor no está en la cruz, este es un recuerdo como guardamos la foto de la madre o de que se yo, para decir: aquí murió Él, pero no está acá, está triunfante, y más aún, está presidiendo la asamblea ahí parados mirándolos a todos, bueno.
Y ya termino: “en Él estaba la plenitud del amor y de la verdad, de esa plenitud suya es de la que todos recibimos en sucesión de gracias y favores. Dice: Dios nos había dado la ley, que les dije antes, por medio de Moisés, pero Cristo Jesús, con Él llegó el amor y la verdad”. Esta es palabra del Señor ¿eh?, te alabamos Señor y te damos gracias.
Atendiendo esto, Dios nos había dado la ley por medio de Moisés, aquí Jesús pero antes lo había hecho con Santa Faustina, esa que está ahí en el vidrio, ella es Santa ahora ¿no?, a ella se lo dijo y lo dijo también aquí, entre Mi Papá que es la ley y el hombre, estoy Yo que soy la Misericordia, ahí está, Dios es la ley, dada a los hombres por medio de Moisés, los diez mandamientos ¿mmm?, bueno.
Pero Jesús nos trae otro concepto, no ya el de la ley sino el de la fe y el del amor, esto cuando yo les dije antes, les digo por el Evangelio de hoy, cuando hablaba yo de la ley, está escrito, se hace, punto, les recuerdo lo que recordé el otro día, el primer mandamiento ¿cuál es?, amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a sí mismo, sin embargo Jesús pocas horas antes de morir les dice a los Discípulos: les dejo un mandamiento nuevo, que se amen unos a otros como Yo los he amado, pero ¿cómo, no es lo mismo que al anterior?, es lo mismo, pero ¿por qué es nuevo?, porque ya no es a través de la ley de Moisés en el Monte Sinaí, sino a través de la vida que Él iba a entregar en la cruz derramando su sangre por nosotros ¿eh? ¿verdad?.
Es decir, no necesariamente todo lo del Antiguo Testamento es ley, es decir un Dios que ordena ¿no?, los hombres expresan así ¿eh?, no era fácil manejar a toda esa gente a través del tiempo y mucho más cuando Moisés da la tabla de los diez mandamientos, ¿por qué?, porque Moisés saca a los judíos de Egipto y lo lleva a la tierra prometida, que es donde está ahora el pueblo judío: Nazareth, Belén, todos esos lugares ¿eh?, bueno, pero antes de llegar anduvieron muchos años en el desierto y ahí pasaron muchas cosas: hambre, sed, y un día le dicen a Moisés: pero ¿cómo Moisés, nos sacaste de Egipto para traernos a sufrir al desierto?, que cosa ¿eh?, no puede ser, es justamente cuando Moisés toca una piedra y de la piedra empieza a salir agua.
Cuando la Virgen quiso hacer esto que ustedes tienen delante, que no es invento de nadie sino de la Madre, quiso volver a poner aquella piedra de Moisés allá en el desierto pero ya no manando agua solamente para tomar sino Agua Viva que sale del Corazón de su Hijo que es su Misericordia, por eso el agua de la Virgen no necesita ser bendecida aquí, porque ella dijo: es Sagrada y quien la toma con fe todo milagro se realiza, todo, no alguno sí y alguno no, algunos veremos, todos ¿eh?, bueno. Entonces, en aquél momento Moisés toca la piedra, de la piedra sale agua, después viene el problema del maná pero eso ya es otra historia más larga.
Entonces, cuando decimos al comienzo que nosotros resolvemos todo: no hacer esto, no hacer lo otro, no hacer lo otro, ¿no son así los diez mandamientos?, no matarás, no desearás la mujer de tu prójimo ni a tu prójimo como decía Cabral, no adulterio, no esto, no lo otro, etc., pero Moisés se la tuvo que ver muy mal muchas veces ¿eh?, incluso él que dio las tablas de los diez mandamientos hay en un momento que legaliza la prostitución, pero eran circunstancias históricas que vivió Moisés. Es por eso que cuando nosotros leemos el Antiguo Testamento tenemos que pensar qué pasaba en el mundo en ese momento, porque sí, todo era guerra pero ¿había otra cosa que no fuera guerra en ese tiempo? ¿eh?, si cada uno quería prevalecer sobre el otro, cada uno quería aplastar al otro, entonces las palabras que escribían eran palabras de personas guerreras y entonces lo hacen ver a Dios Padre como un Dios castigador, un Dios que hace la guerra, un Dios etc., que se ve en los Salmos. Lo digo esto para que cuando lean algunas cosas digan: claro, Dios no es así porque, Él es amor, solamente los hombres que llevaron sus palabras dijeron las cosas de acuerdo al tiempo que vivieron ¿eh?, como dice Jesús en un Mensaje: que el Antiguo y el Nuevo Testamento fue muy manipulado por los intereses de cada tiempo, como si Él no conociera como somos los hombres de manipuladores ¿eh?, transformamos siempre las cosas a nuestro gusto ¿eh?, somos así.
Bueno, entonces, qué precioso está esto de lo que estamos diciendo y para, ya que cita a Moisés allí, vamos a buscar aquí en el librito ¿no?, para entender bien lo que es eso ¿eh?, para ver lo que fue en aquél entonces la peña de Horeb que manó agua y para ver ahora como en la fuente del monasterio de Justiniano Posse, del Santuario ¿eh?, el agua mana pero ya no para quitar la sed sino para hacer todo tipo de milagros. Cuando algunos se extrañan tanto por qué en el Santuario pasan tantos milagros, es que todo fue pensado por el Señor, aquí no hay mente humana que pensó nada, lo único que puede ser: cómo querés Madre que hagamos esto, lo otro, porque ella dijo todo ¿eh?, y así como allá en el desierto Moisés le da de beber a los hombres, ella a través de la fuente, a través de su Agua Sagrada sana todo, ¿algunas cosas no?, no, no, no, todo, pero hay que creer en eso ¿no?, sino es agua impura, agua sucia o de la corriente ¿no?, bueno, entonces aquí tenemos 32: la peña de Horeb, ahora lo vamos a entender mejor porque dice, allá la peña era una simple piedra pero ahora dice: Cristo es la peña de Horeb que está brotando…. Y la invitación del Señor: ven a beberla que es más dulce que la miel… (se dio vuelta la cinta)…, leche cuajada de las cabras y miel silvestre, por eso se hizo grande y fuerte Jesús y Juan el Bautista el Precursor, también vivió de miel silvestre y langostas del desierto, bueno, vamos a empezar de nuevo: Cristo es la peña de Horeb que está brotando…. Y la invitación preciosísima: ven a beberla que es más dulce que la miel…. Y sigue: Cristo es el lirio del valle de las flores…. Miren que hermoso ahora todos: ven a beberla que es más dulce que la miel….
Usa aquí la expresión: Cristo es el lirio del valle de las flores, el lirio es otra de las flores que está en el Antiguo Testamento y en el Nuevo, porque se lo compara incluso el lirio silvestre con los vestidos que usaba el Rey Salomón, que eran tan preciosos y dice: miren los lirios del campo que ni siquiera el Rey Salomón en sus años de esplendor nunca tuvo un vestido como los lirios del campo, por eso se lo considera allá arriba al lirio, lo mismo que la rosa: reina de las flores. La rosa siempre tiene un significado especial en la Sagrada Escritura, a lo de los siglos y siglos ¿eh?, Cristo es el lirio del valle de las flores, del valle, quiere decir todo lo que hay en el mundo, y luego la invitación ¿no es cierto?: ven a beberla que es más dulce que la miel, cuando nosotros entrábamos al Santuario a lo mejor pensábamos: mirá esta gente para llamar la atención hace una fuente ahí nomás ¿eh? y bueno, porque es lindo que cae agua, es fresco, nooo, nada que ver, es el Rio de Agua Viva, esa parte del Señor de la Misericordia, a la derecha de ustedes, es color celeste, es agua y representa a los seres humanos que se nutren del Agua Viva, la que quita la sed ¿verdad?, que hermoso ¿no?, que precioso.
Cuando uno se pone a pensar un poquito en cada una de las frases que usa el Señor o que encontramos en la Biblia o en los simples cantos ¿eh?, uno se da cuenta que hay todo un mundo preciosísimo detrás, un mundo pero tan hermoso, que si nosotros logramos entrar en Él se nos terminó el dolor, el mal, los problemas, todo, decimelo a mí dirán algunos, que hay que trabajar, que hay que esto, si, no, no, pero ya sabemos que al pan hay que ganarlo con el sudor de la frente ¿eh?, y no con el sudor de los de enfrente como decía alguien ¿mmm?.
Entonces, esta fuente es el Agua Viva, por eso cuando nos llevamos el agua de acá, no nos llevamos cualquier cosa, la Madre recordó el agua que calmó la sed de los judíos en el desierto, recordó el Bautismo de su Hijo en el Río Jordán ¿verdad?, recordó el milagro de la transformación de agua en vino en las Bodas de Caná de Galilea, el primer milagro que hace Jesús, el primero de todos ¿eh?, y nos recuerda también ese milagro de las Bodas de Caná de Galilea, nos recuerda hasta qué punto tiene influencia la Virgen sobre Jesús, por eso le decimos que es Mediadora de todas las gracias, la Virgen tiene en sus manos siempre lo que va a tener el Señor ¿eh?, ¿por qué?, porque cuando estaban en las Bodas de Caná de Galilea, se termina el vino y todos sabemos que una fiesta sin vino, bueno, no funciona, ahora mismo cuando se pone en la mesa y se pone gaseosa parece que falta algo ¿no?, bueno, porque el vino dice el Antiguo Testamento: alegra el corazón del hombre, claro un poco, no mucho, entonces el agua le dice a los sirvientes: llenen todos los toneles de agua pero a todo esto Jesús le había dicho a la Madre: Mamá todavía no llegó la hora de la predicación, como queriendo decir: me estás poniendo en apuro, por qué me decís que haga esto, la Virgen no le hace caso y dice: hagan lo que Él les diga ¿mmm?, y entonces Él ordena que llenen las vasijas con agua y convierte el agua en vino. Les digo todos estos ejemplos para que vean como en la Sagrada Escritura hay ciertos términos que siempre están presentes: el agua, el vino, la sangre, etc. ¿no?. Ahora bien, y esto nos está diciendo a nosotros: si María fue tan así fuerte para decirle: hagan lo que Él les diga, porque Él no quería hacer el milagro Jesús en un primer momento ¿no?, sin embargo la Madre lo embreta: hacé esto muchacho, como cualquier madre le dice a su hijo.
Entonces saco una conclusión yo, cuando necesitamos algo difícil y terrible: Madre, quién mejor que vos para pedirle a tu Hijo lo que a mí me hace falta, lo que yo necesito, si en las Bodas de Caná de Galilea le ordenaste a tu Hijo que hiciera el milagro de la transformación del agua en vino, le ordenaste, ¿no le vas a querer ordenar Señor mi sanación, mi vida, mis hijos, mi felicidad y todas mis cosas?, si lo mandaste a tu Hijo que era el mismísimo Dios pero también hombre ¿eh?, mitad Dios y mitad hombre.
A través del Evangelio de hoy, el último día del año hemos recorrido una serie de acontecimientos y de cosas preciosísimas, es decir si los cristianos queremos que seamos realmente podemos encontrar todo un mundo maravilloso para edificar nuestra vida, porque sin Él nuestra vida es muy vacía, es terriblemente vacía, por eso, cuando van a tomar agua que se llevan de aquí, que se toma a veces por tomarla nomás, a veces, piensen: Cristo es la peña de Horeb que está brotando….
Ahora bien, yo digo, uno dice ahí que saber que el agua es Sagrada y lo puede todo pero también pienso: aquellas mujeres que sus maridos son medios así cabrones ¿no?, y le mezclan el agua con el jugo y sin saber se lo toman les hace un bien muy grande, yo digo por sí misma el agua aunque uno no sepa que es Sagrada transforma las cosas ¿eh?, ojo con el agua de la Virgen, porque van a tener más de una sorpresa, noo, la madre es tremenda che, tremenda, así como esta mañana eran las 05:45 por la ventana yo vi pasaba la Madre mirando todo, y saben, ponía el dedito en las cosas que la gente cortó, las flores que cortó el domingo ¿no?, ponía el dedito como queriendo decir: qué lástima, se llevaron una partecita de Mi planta, ponía el dedito, así, me dio una pena, lo hacía con tristeza, mucha tristeza, no se dan una idea, bueno.
Siempre ¿eh?, siempre es que es suyo, no se olviden que María es una ser humano, fue mujer como ustedes antes de ser la Virgen María y que Jesús además de Dios es hombre ¿mmm?, bueno.
Todo esto no sé, me parece que nos llena de una alegría muy grande, ¿por qué?, porque estemos sanos o estemos enfermos pero de repente nos damos cuenta que tenemos allí servido todo lo mejor ¿eh?, podemos seguir con nuestra vida, con todas las cosas, teniendo nuestros defectos, nuestros problemas, así en el mensaje de ayer tarde estaba yo con el presidente de la Fundación y Jesús dijo una cosa: que pena que los hombres no entiendan que no son perfectos, que tienen deficiencias, que tienen precariedades, lo tremendo es no querer reconocer que uno tiene deficiencias, precariedades, que uno es torpe a veces, que uno es perezoso, que uno es a veces mal pensado, que lástima que el hombre no entienda que esas cosas son humanas, son humanas, es una pena que no lo entiendan, ayer tarde decía eso ¿mmm?, entre otras tantas porque habló cuarenta y cinco minutos, no, una hora, muy bien.
Entonces, en este fin de año y comienzo del nuevo, que lindo si el próximo 31 pudiéramos estar todos aquí de nuevo ¿mmm?, no pensaba que viniera gente porque cada uno está en sus cosas ¿no?, que lindo si pudiéramos estar todos otra vez reunidos, porque cada vez que nos reunimos, yo pienso: el día de mañana cuando pasemos al otro lado vamos a estar siempre reunidos, aquél que quiere librarse de alguien no se haga ilusiones, nadie se libra de nadie, porque todos vamos a tener que vivir por una eternidad juntos, así que amiguémonos con todos porque eso de convivir con los enemigos no es tan grato, bueno, no digo así porque del otro lado no hay enemigos.
Señor, estamos tan contentos de ser tus hijos, estamos tan felices de poder decir todo esto, estamos tan, tan maravillados que estés allí presidiendo la asamblea, estamos tan gustosos de aspirar el aliento que vos tenés, como tu Mamá, Santa Teresita y todos los Santos y Ángeles que hay y las personas que están con ustedes que son vuestros familiares, que han partido ya y los han traído o han venido a hacerle compañía ¿verdad?, no nombro porque a muchos los conozco pero no los nombro porque, porque que se yo, uno no está tan acostumbrado de hablar de estos temas y se asustan las personas, pero es una pena porque los que están del otro lado nos acompañan siempre, porque el Cielo no está allá lejos, está entre nosotros, nada más que no vemos ¿eh?, y si yo citara algún nombre se asustarían ustedes pero lo dejamos ahí, bien.
Entonces Señor viendo todos tus Santos, tus Ángeles, Santas también, viendo yo a mis familiares, me da mucho gusto porque cuando uno ve to