Hoy tenes reunión en Mi Casa, te he traído personas de tantos lugares diferentes, a algunas les fue un momento tener que convencerlas, porque los seres humanos son, son simplemente personas que siempre quieren moverse entre certidumbres palpables y no tanto. Mensaje del 13 de Julio de 2008

Habla Artemio:

13 de Julio de 2008.

Está la Madre en su advocación de Nuestra Señora de Justiniano Posse

Dice Nuestra Señora de Justiniano Posse:

Hoy tenes reunión en Mi Casa, te he traído personas de tantos lugares diferentes, a algunas les fue un momento tener que convencerlas, porque los seres humanos son, son simplemente personas que siempre quieren moverse entre certidumbres palpables y no tanto, viene el médico, pone una inyección y la persona espera el efecto de esa inyección, mientras que si se entera que Yo en algún lugar como este hago una intercesión permanente delante de Mi Hijo para que se sanen, eso les cuesta creerlo, les cuesta mucho, porque no tienen de donde objetivar, no puede decir dos más dos es cuatro. Aunque si de la medicina hablamos nunca ocurre eso, pero si los médicos se equivocan o directamente el remedio llega demasiado tarde, para el hombre corriente siempre tiene disculpas, comprensión y dicen: y bueno, tenía que ser así, pero si viene a Mi Casa y a través tuyo le prometo Yo la sanación de algo, entonces al no ocurrir, pero no porque el Señor no quiera sino porque muchas veces las mismas personas no quieren. Entonces, piensan: es mejor seguir con aquellos que ponen inyecciones, hacen tragar remedios y todo por el estilo, es así el ser humano, salvo excepciones y contadas, pero no importa, todo esto uno lo dice para aclarar.

Decile a todos que los amo un montón, que así como se entregan en los brazos de alguien que aman, humanos y lo hacen con la seguridad total y completa, que piensen en Mi regazo, Mi regazo está allí esperándolos siempre para aliviar las penas, para sanar a los enfermos, para acompañarlos durante el proceso de la enfermedad, siempre disponible, esta Madre siempre está al alcance de vuestra mano para alcanzarles lo que les hace falta.

Yo les amo un montón, hagan ustedes lo mismo, háganlo.