Dije hace tantos años que Yo tengo tantos rostros y tantas formas como ojos que me miran pero si todo eso no basta, les digo: el ser humano siempre quiere objetivar, decir todo aquello le ayuda a identificar más lo que piensa. Mensaje del 12 de Julio de 2008

Habla Artemio:

12 de Julio.

Sigue diciendo la Madre.

Dice la Madre:

Para los que leen estos Mensajes o los escuchan dirán: ¿y cómo estará vestida la Madre?, ¿cómo se presentará hoy?, y tantos cómo, cómo. Dije hace tantos años que Yo tengo tantos rostros y tantas formas como ojos que me miran pero si
todo eso no basta, les digo: el ser humano siempre quiere objetivar, decir todo aquello le ayuda a identificar más lo que piensa.

Por eso, digo así simplemente, no es fácil poder entender como cambio de atuendo de acuerdo a las advocaciones, tienen que desde este otro lado poner las cosas como en el otro, es decir, Yo no tengo un vestidor para pasar a él y salir de adentro como María Auxiliadora, o Nuestra Señora de los Ángeles o Nuestra Señora de Itatí, no, ustedes tienen que pensar en que en un instante puedo cambiar los atuendos y puedo también estar siempre a tono… (se interrumpe la grabación)…, siempre puedo cambiar los atuendos de acuerdo al lugar en que esté, las personas que me rodean, circunstancias que vivo, porque siempre alguien me está viendo y parece que no estaría bien que en algún lugar donde ni ropa tienen apareciera Yo con ropaje cargado de brillos, otros elementos que brillan, no, en general siempre recargan Mi presencia ¿no?, digo en los cuadros y en todos lados pero todo les indica que los hombres no entienden muy bien, no entienden directamente todo este proceso, pero sí los niños y los que no son tan niños, cuando me ven les impacta lo que llevo puesto, parto siempre de una base, que tal vez debería ser la forma de partir de todos, cubrirme si hace frío, tener ropa más liviana si hace calor para estar siempre a tono con todos los que me rodean.

Claro, no es tan simple entender eso, porque lo exterior está diciendo del estado interior y así como las personas en el mundo se mueven de una manera, Yo también, de acuerdo a las circunstancias.

Que lindo es poder hablar todas estas cosas con tanta naturalidad y además pensar que Yo estas cosas las hablé a lo largo de los siglos y de los tiempos con muchos pero que siempre los omitieron, los descartaron diciendo que no era importante si la Madre hablaba de su vestimenta, sin embargo también lo es.

Seguimos hablando de esto ¿eh?.