Eso es un aspecto pero la tremenda y verdadera sabiduría está en entender el lenguaje de las cosas, de las plantas y de los animales y por supuesto del hombre. Mensaje del 15 de Abril de 2008

Habla Artemio:

15 de Abril.

Dice la Madre:

Esto está fragmentado en días pero estoy haciendo una continuación entre un Mensaje y el otro, siempre con la consideración total y completa de que Mis palabras tienen que ser iluminadoras para entender la Misericordia de Mi Hijo, si dicen: doy de comer al hambriento, todos piensan en un plato de comida alimentando, pero Mis queridos, hay tantas hambres diferentes, por el plato de comida es una el hambre pero hay tantas hambres diferentes, todas, todas enraizadas o consecuencias de un amor muy profundo por todos los hombres, por los acontecimientos, por todos los animales y las plantas y las cosas, que en apariencias son inertes, pero no lo son.

Lo he dicho y lo aclararé cincuenta mil veces, hay que oír hasta el lenguaje de las piedras, porque no se puede ser muy docto si no escuchan hasta el lenguaje de las piedras, algunos creen que ser docto es profundizar hasta los últimos confines cosas del Evangelio o de la vida de hombres grandes, eso es un aspecto pero la tremenda y verdadera sabiduría está en entender el lenguaje de las cosas, de las plantas y de los animales y por supuesto del hombre, pero falta tanto Mis queridos para llegar a eso, tanto falta, tanto pero tanto, aunque con la mente se piensan muchas cosas y se elaboran hermosos documentos y declaraciones que suenan muy bien pero de allí al corazón hay espacios siderales, hay distancias tan grandes que algunos no las recorren nunca y la pena es que aquellos que no la recorren nunca son los que a veces tienen…, son los que a veces tienen la resolución de los problemas, no solo de los pequeños, sino de los grandes problemas, que pena, y todo como dije ya por una manera de mirar las cosas solamente hasta unos centímetros de los ojos, de la mente por supuesto, pero incluso cuando usan la expresión: visión de futuro, el futuro de muchos es el espacio que hay desde los ojos a la nariz.

Yo veo que en general el problema es uno: la falta de ortopraxia, es decir palabra no usada pero terriblemente necesaria, es decir la ortodoxia en el amor, no hacer nada hasta las mínimas cosas si no está presente el amor… (se dio vuelta la cinta) …, el amor total, completo y definitivo por los otros y por uno mismo.