Entonces ¿es cosa de los hombres esto del agua o es cosa del Señor y de su Mamá?, y si es del Señor y de su Mamá ¿por qué entonces no creemos?, si nosotros creyéramos ¿eh?, todas las enfermedades y todos los problemas desaparecerían en un instante, en un instante ¿escucharon?, en un instante.
Oración del 02 de Junio de 2007

Habla Artemio:

… mirarte solo a ti Señor….

Ahora como hacemos siempre, pensando que el agua que sale del Corazón del Señor de la Misericordia, representada en esta fuente, porque así quiso la Madre, es el Agua Viva que nos trae a nosotros todas las Gracias y bendiciones, el Agua Sagrada de la Madre. La Madre pensaba que así como en el desierto cuando Moisés tocó con su callado, la piedra, empezó a salir agua que calmó la sed de todos los hebreos que andaban por el desierto, la piedra de Oreb era, entonces el tema que sigue, 4: Cristo es la peña de Oreb que va brotando….

Antes de leer el Evangelio vamos a pedir la presencia del Espíritu Santo, que no solamente ahora sino siempre hay que pedirla ¿no?, pedir la presencia de la Santísima Trinidad en nosotros y especialmente el Espíritu Santo para que siempre nos diga la palabra justa, exacta para orientar nuestra vida y vivir de acuerdo como el Señor quiere, entonces decimos: ven, ven, ven, Espíritu divino, ven, ven, ven, acércate a mí….

Y como una forma de alabanza y agradecimiento al Señor antes de leer el Evangelio alguien quiere dar testimonio, ¿quién es?... (habla una señora que da testimonio) …, gloria a Dios, ¿en dónde era eso?, en Córdoba, le damos gracias al Señor por todo esto… (sigue hablando la señora) …, esto es una forma de decirle gracias al Señor por todo lo que hace, había otra señora… (habla otra señora que da testimonio) …, le damos gracias al Señor, es la mejor forma de introducir a la palabra de Él ¿no?… (habla otra señora) …, me alegro un montón por todo, nos ponemos de rodillas para dar gracias al Señor ¿no es cierto?, ¿quién más quiere decir algo?… (otra señora da su testimonio) …, le damos gracias al Señor por todo… (otra señora da testimonio) …, bueno, le damos gracias, le damos gracias por todo… (habla un señor, da su testimonio) …, le damos gracias al Señor porque la Gracia de Él sobreabunda por todos lados, no solamente aquí sino en todos lados, ¿alguno quiere decir algo?, bueno.

Nos ponemos de pie, sábado 02 de Junio, Santos Marcelino, Pedro y Eustacio, mañana es el día de la Santísima Trinidad, por la señal de la santa cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor, Dios nuestro, del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. El Evangelio es de Marcos 11, versículo 27 al 33: “volvieron a Jerusalén, y mientras Jesús estaba caminando por el Templo, se le acercaron los jefes de los Sacerdotes, los maestros de la ley y las autoridades judías, y le preguntaron: ¿con qué derecho has actuado de esa forma?, ¿quién te ha autorizado a hacer lo que haces?. Jesús les contestó: les voy a hacer Yo a ustedes una sola pregunta y si me contestan, les diré con qué derecho hago lo que hago. Háblenme del Bautismo de Juan. Este asunto: ¿venía de Dios o era cosa de los hombres?. Ellos comentaron entre sí: si decimos que este asunto es obra de Dios nos dirá: entonces ¿por qué no le creyeron?. Pero tampoco podían decir delante del pueblo que era cosa de hombres porque todos consideraban a Juan como un Profeta. Por eso respondieron a Jesús: no lo sabemos. Y Jesús les contestó: entonces tampoco Yo les diré con qué autoridad hago estas cosas” .
Esto tan precioso es palabra del Señor, te alabamos Señor y te damos gracias.

Lo mismo podríamos decir hoy con los testimonios que hemos oído: ¿viene de Dios o es cosa de los hombres?, ni que el Evangelio estuviera calcado con las cosas que pasaron hoy ¿mmm?, ¿esto viene de Dios o es cosa de los hombres?, han actuado los médicos, no sabemos ¿eh?, ahora, si es obra de Dios viene la pregunta: entonces ¿por qué algunos no creen todavía? ¿mmm?, les pregunto a cada uno de ustedes, cada uno sabrá responderme en su conciencia, después de oír todo lo que oyeron, que este señor dijo algo nada más del montón de cosas que pasan en su casa, algo dijo nada más ¿verdad?, entonces ¿por qué algunos por dentro no están creyendo?, ¿por qué piensan que ese señor del Sur lo sanaron los médicos y no se sanó por obra del Señor?, ¿ven?, el Evangelio de hoy, no yo, el Evangelio de hoy les está pregunto a aquellos que todavía no creen: ¿por qué no creen, es cosa de hombres esto?, multiplicar los alimentos, no solamente para ellos sino para todos los que van a buscar, encenderse las velas solas ¿eh?, crecer el agua en las botellas ¿es cosa de Dios?, no hay duda que sí, ¿y por qué muchos entonces no creen? ¿mmm?, y también lo digo porque hay montones de Sacerdotes que no creen, pueden ver los milagros en la propia cara y sin embargo no lo creen ¿mmm?, y eso del agua por ejemplo, hoy he traído esta pequeña jarrita porque siempre, había otra antes, pero cuando había mucho más tiempo se le daba a cada persona un poquito de Agua de la Madre, desde el año ’97, que la Madre dijo lo que dijo sobre el Agua que es Sagrada no es bendecida.

Entonces ¿es cosa de los hombres esto del agua o es cosa del Señor y de su Mamá?, y si es del Señor y de su Mamá ¿por qué entonces no creemos?, si nosotros creyéramos ¿eh?, todas las enfermedades y todos los problemas desaparecerían en un instante, en un instante ¿escucharon?, en un instante.

Yo no lo estoy inventando, el Evangelio de hoy les está preguntando: ¿viene de Dios o es cosa de los hombres?, y si viene de Dios ¿por qué no creen? ¿mmm?, ¿por qué no creen?, negarlo tampoco podemos ¿no es cierto?, como dice el Evangelio, porque lo dice Juan que es un Profeta, negarlo no podemos nosotros porque lo dice el Evangelio ahora ¿mmm? ¿verdad?, y Jesús les contestó: entonces tampoco Yo les diré con qué autoridad hago estas cosas ¿mmm?.
Cuando alguno pregunta por ejemplo eso de estar en muchos lugares al mismo tiempo, no me lo pregunten, porque yo no sé por qué, no lo sé, no podría explicárselos, que estoy durmiendo en mi cama y aparezco en tantos lugares no lo sé, por qué voy a ponerme a decir cosas que no sé ¿mmm?, pero ocurre, ¿no lo has visto vos?, ¿no me has visto A. en las procesiones en Córdoba, en el ómnibus que vengo con ustedes sin pagar pasaje?, ¿hoy también?, bueno.

Entonces, trasladamos lo nuestro al Evangelio, si es cosa de Dios ¿por qué no lo creemos?, ahora sinceramente a veces tengo que hacer un esfuerzo yo también para creerlo ¿eh?, A. me dice, tiene testigos pero hay una distancia entre lo que me decís y creer totalmente, porque yo estuve en mi casa atendiendo a las plantas, los pájaros y todo y a algunas personas y también estaba en el ómnibus, no sé, ahora, repito con el Evangelio: ¿es cosa de Dios o es cosa que inventamos?, y si es cosa de Dios ¿por qué no la creemos?. Yo digo: ¿por qué, para creer en mí?, noo, para que crean que ustedes se van a sanar de todo lo que traen ¿mmm?, todo, como esa señora de Ballesteros, que tenía las piernas torcidas sin caminar y de repente vio que las piernas se le enderezaban y salió corriendo, ella que estaba paralítica, salió corriendo y se fue del Sacerdote y los dos se pusieron delante del Sagrario a rezar, pero el Sacerdote no dijo nada, oh, dice, ya no te puedo decir más chueca le dijo porque tenés las piernas derechas, ¿es cosa de Dios o es cosa de los hombres? ¿eh?.

Despacio ¿eh?, porque no podemos tener la verdad ahí delante y chocarla porque nos aplasta la verdad, tengamos cuidado, nos aplasta la verdad si no la reconocemos, las cosas que comentaste vos, estas señoras, estas dos señoras ¿eh?... (habla una señora presente) …, ¿qué andaba haciendo por ahí?... (sigue hablando la señora) …, Gloria a Dios, claro, uno no puede explicar estas cosas y también uno no lo cuenta porque directamente no lo sabe y son cosas del Señor, solamente sí lo que uno puede contar es que estando disponible uno para hacer cosas, el Señor lo utiliza y lo lleva donde Él quiere, eso es lo importante que descubramos, gracias a Dios lo descubrí hace tantísimos años ¿verdad?. Cuando uno está disponible el Señor lo lleva a cualquier lugar, tienen la muestra, hay varios testigos acá, ahora no me pregunten de qué manera porque no lo sé, y a veces por cosas simples porque por ejemplo en una elección de una mutual ¿no?, y vos dirás: ¿y qué tenías que hacer ahí?, ¿qué necesidad había que Dios participara en eso?, sin embargo yo fui a votar y no me moví de mi casa, y no me lo dijo otra persona, me lo dijo mi sobrino y otras personas en la calle también, bueno ¿o son cosas de Dios o son cosas de los hombres?.

¿Por qué hago este planteo, para que digan: uh que bien?, nooo, sino para que ustedes que tienen dentro de sí, yo también, enfermedades, problemas, dolores, angustias y de todo un poco, caigamos de rodillas con nuestro corazón y creamos en el Señor de una vez por todas, diciéndole: Señor perdoname porque no me di cuenta antes, Señor perdoname porque tarde te amé, va a llegar un momento en la vida de cada uno de nosotros que va a tener que decir con toda la fuerza: Señor, tarde te amé, cómo es posible que haya demorado tanto en amarte Señor ¿eh?, bueno.

Así están dadas las cosas y no les parece también que es un verdadero no sé si milagro o gracia del Señor, que el Evangelio de hoy, nada menos que el Evangelio que está establecido desde siempre ¿verdad?, sea una respuesta a todo lo que ustedes plantearon, ¿es cosa de Dios o es cosa de los hombres?, no hace falta que lo diga yo, lo está diciendo el Evangelio ¿mmm?, bueno.

Entonces, que esto que ocurre, así en forma tan grande ¿mmm?, que nosotros no reconocemos lo inmensamente grande que es, imagínense ustedes lo que es llegar a la cocina y encontrarse con todos los tápers llenos de alimentos y nada menos que la leche NIDO, mira si hubiera alguien aquí dice: va a pasar el aviso de una marca de leche ¿no?, bueno.

Que hermoso es cuando uno ve ¿no es cierto? todo esto, cuando ve por ejemplo que todo lo que hemos hablado hoy el Señor lo respondió con su Evangelio, yo creo sinceramente si ante una evidencia tan grande no creemos habrá que revisar nuestra vida, allá en lo profundo de nuestro ser: ¿qué es lo que está pasando?, ¿qué es lo que está pasando que nos estamos no sé si negando o estamos despistados para creer en el Señor y su Mamá? ¿eh?, después de ver estas cosas sí me van a creer que si yo les digo que la Madre anda paseando por el patio, mira las flores, ahora estos días está un poco triste porque está todo helado, pero lo toma como un fenómeno natural, lo mismo Jesús están continuamente ¿mmm?, aunque ustedes no lo ven Él los sale a recibir, lo mismo que la Madre, bueno ¿es cosa de Dios o es cosa que uno inventa?, qué fácil ¿no?, qué fácil que es todo, por favor, que fácil.

Tenemos que tener cuidado porque la verdad es tanta, es tan grande que si no la reconocemos nos aplasta, nos aplasta, sería muy doloroso que tengamos algo muy grave dentro de nosotros y no creemos que el Señor en un instante puede cambiar toda nuestra vida, en un instante nada más, como lo hace siempre ¿mmm?. ¿Qué nos está pasando a veces a nosotros?, hacemos algo, lo repetimos y por dentro decimos: no, no creo, aquí el problema es demasiado evidente ¿eh?, todo está demasiado evidente, el testimonio de personas de Córdoba, de Río III y otros días escuchan de otras partes del país ¿mmm?, bueno hoy también de otras partes del país. Todo esto lo decimos ¿para qué?, para que reconozcan que yo esto…, nooo mis queridos, estamos diciendo todo esto para que hagamos lo que dice Jesús, salgamos a los caminos, entremos en las ciudades, andemos por las calles, vayamos donde vayamos y miremos todas las cosas porque el Señor las está bendiciendo con nuestra mirada, ¿por qué las está bendiciendo?, porque Él lo prometió y dijo que es así, cada cosa que miren, toquen, huelan o gusten ¿no es cierto?, es Yo que lo hago ¿eh?, bueno.

Ustedes dirán: pero si todos nos sanamos entonces nadie se va a volver a morir nunca más, sí, Jesús dice, pero por muerte natural cuando hayamos envejecidos, pero ojo, no con la edad que todos dicen porque tener setenta, ochenta, noventa años ya es…., nooo, el Señor habla de muchos más años, como los Profetas del Antiguo Testamento, que el Profeta Isaías decía: morirse de cien años es un insulto, es una estupidez morirse así de joven, morirse de cien años.
Bueno ¿por qué el Señor va a decir algo para mentirnos?, ¿o acaso no dice Él con toda su fuerza en el Evangelio: dónde están los enfermos que quiero sanarlos?, pero Él necesita de vuestras manos, de vuestro corazón, de vuestros ojos, de todo, para llegar a cada uno de los hombres ¿eh?. Y aquí, en esa fuente, el Agua Sagrada de la Virgen y que como han visto se multiplica en otros lados también, es cuestión de tener confianza y creer. Vuelvo a repetir las palabras del Evangelio: ¿esto es cosa de Dios o es cosa de los hombres?, no sé, la respuesta la tiene cada uno de ustedes… (se dio vuelta la cinta) …, lo mejor para nosotros no es lo mejor para Él, por eso hay que estar muy atento a lo que el Señor quiere, eso sí, con seguridad nunca nos va a castigar, ni nunca nos va a poner pruebas, porque Él está para amarnos y no para hacernos sufrir.

Dice Jesús:

Retomo Yo la palabra en este momento, aquí en Mi Casa y en la Casa de Mi Mamá, los que no lo saben todavía ¿conocen que hace doce años, en Marzo hizo, que vengo aquí todos los días, lo mismo que Mi Mamá?, es decir, no vengo, estoy aquí, porque hace doce años, en Marzo del ’95, mucho antes pero consideremos esa fecha, Marzo del ’95, con Mi Mamá dijimos: aquí vamos a acampar.

Habla Artemio:

Que es un término muy usado en el país de origen de Jesús, esto lo agrego yo ¿no?.

Dice Jesús:

Aquí hemos acampado y aquí estamos, ustedes creen que hoy han venido porque tenían ganas o no sé por qué, pero Yo los traje, porque ya en el año ’95 dije que aquí acampaba para hacer todo nuevo en el Cielo y en la Tierra, ya sé que todavía no alcanzan a entender esta expresión, pero si empiezan a mirar las cosas se van a dar cuenta que efectivamente en todos los niveles, de todo este continente y también del resto del mundo se van a dar cuenta si miran bien que está pasando tantas cosas para hacer todo nuevo, no olviden, Yo no pienso defraudar a nadie teniendo en cuenta que Mi palabra es la palabra de Dios, que en este momento Artemio me está prestando su voz para que Yo les diga esto.
Cuántos años hace que me presta su voz, pero cuando estamos a solas le doy mucho trabajo a Él porque primero le digo todas las cosas en lenguas, Yo hablo mucho el arameo antiguo, el mismo idioma que hablaba con los Discípulos, entonces le dicto en él los Mensajes en arameo y por un don del Espíritu Santo, el don de lenguas, él puede traducirlos, el que quiere puede escuchar las grabaciones para ver esto, para oírlo plenamente.

Mis queridos, ustedes dirán: el Señor está haciendo historia y concretamente nosotros tenemos corriendo en nuestra sangre enfermedades que son muy dañinas, que traen tantos problemas, si les digo todo esto Mis queridos es para que entiendan, comprendan definitivamente que si Yo los traigo a este lugar no es para que se vayan lo mismo de aquí, pero necesito que crean como dice el Evangelio, que bien que está eso: ¿esto es cosa de Dios o es cosa de los hombres?, bueno, aquél que cree y confía plenamente considere que su enfermedad ya no está más, su enfermedad ya no está más, y mientras Yo estoy hablando Mis hijos queridos, Mi Mamá, la Virgen, está pasando por cada uno de ustedes dándole a cada uno la bendición, por eso no se distraigan, no sea cosa que por pensar en vuestros problemas Mi Madre se demoren en darles la bendición porque ustedes no la aceptan.

Todo lo que Yo les digo, como Señor de la Misericordia, el Hijo de Dios y Dios mismo, deben creerlo, porque entrarán en un mundo nuevo, todo será diferente en la medida que ustedes crean y algunos no ven pero no les dice el Evangelio: bienaventurados los que no ven y creen, es decir felices los que no ven y creen.
Cada uno cuénteme sus dolores, cuénteme las cosas que le pasaron, pero no para todos los días acordarse y repetir, porque eso les haría mal, cuéntenme todo lo que les pasó, cuéntenme las cosas que hay que corregir, cuéntenme, ustedes dirán: sí, pero el cáncer que tengo corriendo por mi cuerpo, que tiene que ver los problemas que tuve, no Mis queridos, ocurre que los diversos problemas que tuvieron a lo largo de la vida si no son puestos en orden por Mí terminan en alguna enfermedad, ustedes mismos pueden darse cuenta de eso ¿mmm?, es por eso que cada día de oración Artemio me pide que Yo sane la herencia de ustedes, siete generaciones hacia atrás y siete hacia delante, ¿para qué?, siete quiere decir siempre, para que se borre todo el pasado que corre por vuestras venas y que no haya ningún problema en vuestra descendencia.

Aquí en Mi Casa y la Casa de Mi Mamá no andamos con cosas chiquitas, lo hacemos todo, en el sentido de que al sanar la herencia sabemos que por eso las personas se sanan y estoy tan gustoso de hacer las sanaciones porque lo conocen por el Evangelio, lo primero que Yo quiero hacer es verlos sanos, porque un hombre enfermo es quejoso, se distrae, ya es como un ser anulado para la vida y para los demás.

Yo soy la vida, Yo soy la verdad, quien cree en Mí tendrá vida en este mundo terreno y en el futuro, nunca crean que Yo puedo desilusionarlos, si ustedes se desilusionan por vuestra propia cuenta es problema de ustedes, son libres para hacerlo, pero Yo no los voy a desilusionar nunca, si han venido desde lejos y no tan lejos y han traído mensajes de personas que están en el país y en el extranjero y piden por algo ¿por qué no creen que se soluciona todo?, no le están pidiendo a los hombres que son limitados, son precarios, nooo, le están pidiendo al Señor y a su Mamá, que es Mediadora de todas las Gracias.

En el fondo Mis queridos, en lo profundo de cada uno tiene que convencerse que todo gira alrededor del amor, por empezar reconocer que Mi Espíritu Santo es el amor que hay entre Mi Papá y Yo y ustedes tienen que invocarlo todos los días, a cada instante para que los oriente en vuestra vida, que sane vuestras enfermedades, solucione vuestros problemas, ¿cuáles problemas, solamente los de salud?, no, todos, cuando Yo digo todo es todo ¿mmm?. Tendrán que descubrir que también vuestras plantas y vuestros animales tienen problemas, tendrán que descubrir que hasta las cosas más simples que les rodean tienen sus problemas.

Les comento esto, que a lo mejor les viene bien, porque recién Artemio decía que él no sabía nada de todo lo que pasa, en estos días él tuvo un viaje y entonces piensen ustedes en las gotas de lluvia o en los copos de nieve que caían en cantidades infinitas, entonces en medio de todo eso ¿que se hizo?, inspirado por el Espíritu Santo dijo: que cada uno de los copos de nieve sea una alabanza al Señor, que cada planta que lo recibe sea un agradecimiento para el Señor, y que todos estos valles y sierras y montañas se santifiquen plenamente porque la gracia del Señor está descendiendo sobre todos y le pedí que no se durmiera, que mirara todo, porque si él está disponible, que es lo que le pido a cada uno de ustedes, Yo utilizaba su mirada para hacer todas las cosas, ¿qué cosas?, todo, todo significa en Mi forma de hablar todo, no queda nada afuera.

Mis queridos, les digo lo que les dije: en el fondo todo es una cuestión de amor, hoy en este día y siempre y todos los días a que alcance nuestra vida abran vuestro corazón, Mi Mamá y Yo queremos entrar y permanecer allí para siempre, ábranme vuestro corazón porque quiero circular por todo vuestro cuerpo a través de vuestra sangre, quiero conectar Mi sangre que derramé por todos ustedes con la sangre de cada uno para llevar la sanación a todas las partes de vuestro cuerpo y de vuestra alma y acuérdense también de aquellos que ustedes aman o los que de alguna forma dependen de ustedes y llévense estas palabras, dirían como contraseña para todos, Yo los amo Mis queridos y entonces no tienen nada que temer, nada, no, pero dije nada que temer, absolutamente nada, vivan este momento y el momento que sigue, el mañana está en Mis manos si ustedes me lo ofrecen, déjenme entrar, tengo tantas ganas de alojarme en vuestro corazón para hacer todos los milagros que ustedes necesiten, déjenme entrar.

Habla Artemio:

Sí Señor, te dejamos entrar, ese es nuestro propósito Jesús, queremos que entres en nosotros y tu Mamá también y como vos dijiste Mediadora de todas las Gracias, queremos Señor que vengas a vuestro corazón, ya no podríamos más vivir sin vos Señor, ya no podríamos esperar diez, quince, veinte años o veinte días para decir: tarde te amé Señor, debí amarte antes, no lo vamos a hacer Señor.

Y como vos le enseñaste a los Discípulos, lo mismo nosotros, vos dijiste: cuando quieren hablar con el Padre díganle: Padrenuestro que estás en el Cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad así en la Tierra como en el Cielo, danos hoy nuestro pan de cada día y perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a quienes nos ofenden y no nos dejes caer en la tentación, más líbranos del mal, Amén.

Señor, que contentos que estamos que estés cerca de nosotros, por eso te decimos, todos juntos: tan cerca de mí….

Y si está aquí está en la presencia de cada uno de nuestros hermanos, entonces digámosle a nuestros hermanos todo lo que le deseamos: que el Señor te bendiga, que Él te cuide, que te haga sanar, hagámoslo, a ver como nos abrazamos todos, para decirle al otro: que el Señor derrame sobre vos todas sus gracias y sus bendiciones, háganlo con ganas, mientras decimos: tan cerca de mí….

Ahora el Señor pasa sanando a todos, sí Señor: el Maestro de Galilea va pasado ya….

Sí Señor, eso es lo que necesitamos nosotros, la bendición que nos dure para siempre, hoy y siempre, aquí estamos Señor en tu presencia, queremos de vos todo lo mejor, eso mismo que dijiste en el Evangelio lo llevamos prendido en nuestro corazón.