¿Hace falta recordarles después de dos mil años que la humildad es la madre de todas las virtudes?. Mensaje del 22 de Mayo de 2007

Habla Artemio:

22.

Dice Jesús:

Mi palabra es una, la diga antes de ayer, ayer u hoy, mañana y pasado mañana.

Todo está tan claro, pero hay algo que es verdad y que quiero recordarles, cuántos hay que repiten las palabras de estos días a los hombres, pero son una campana sin badajo, son un río que si tuvo agua se ha secado, o directamente son como la sal que perdió su sabor, ¿qué hacer con la sal que perdió su sabor?.

Estas palabras solamente llegan a los hombres las dichas por San Juan citándome a Mí, solamente llegan cuando se vive de una manera, se habla de una manera, se actúa siempre de una manera, aunque haya caídas en la manera de actuar los demás siempre entenderán que la naturaleza humana es precaria, pero los hombres siempre toleran y esperan cuando ven que aquellos que
cayeron han surgido nuevamente con humildad.

¿Hace falta recordarles después de dos mil años que la humildad es la madre de todas las virtudes?, ¿qué es lo que pasa que viven de una manera?, que Yo al ser testigo de todo siento mucha pena, mucha pena.