Siento tanto dolor en Mi Corazón Inmaculado que nunca se lo podrían imaginar.

Mensaje del 07 de Agosto de 2006

Dice la Virgen:

Estás escuchándome y trasmitiendo lo que te digo y sin embargo, no logro poner un poquito de alegría en tu corazón acongojado, algunos dirán: se exagera, y sí, hay tantos que no entienden nada, pero la Misericordia de Mi Hijo también alcanza para ellos, esta expresión Mía a muchos le dolerá porque todos aquellos que creen manejar la verdad con toda su plenitud leen o escuchan estas Revelaciones y se abrazan a los Evangelios como si esto no fuera parte del Evangelio.

Dolor, muerte, desolación, desamparo, crueldad, menosprecio, duda, esterilidad, podría seguir toda la noche agregando palabras a estas que dije, pero no se preocupen, aquellos que militan dentro de una posición soberbia y orgullosa, creyéndose centro del mundo ya tienen suficiente drama en su vida como para que les aparezca otro más.

Mi Hijo te mostró cuando te llevó por los barrios pobres y desolados del Líbano, te mostró todo lo que allí había y tu mente no lograba procesar los que los sentidos traían a la mente. El dolor visto de lejos o pensado con la mente es una cosa tan distinta del dolor real, es algo tan diferente pero para tantos el dolor o bien no existe o bien se lo merecen los que lo padecen o bien no hicieron nada para prevenirlo o bien creen que las cosas están organizadas así y debe continuar.

Siento tanto dolor en Mi Corazón Inmaculado que nunca se lo podrían imaginar.