Por eso el Señor nos propone tantas cosas para sanar nuestra herencia, para sanar todos nuestros primeros tiempos, los meses en la panza de mamá y en adelante, todo ¿verdad?, porque todo tiene una explicación si uno se la busca ¿verdad?.
Oración del 21 de Enero de 2006Habla Artemio:
Es decir, según la definición de Jesús, la Misericordia Él la define o dice que es el amor obrando y ese amor obrando, ese amor obrando es en todos los órdenes, sea a nivel individual, a nivel colectivo, a nivel pueblo, a nivel nación, a nivel mundial, por eso los Mensajes no son solamente para aquí sino para todo el mundo ¿mmm?. La prioridad uno, es decir lo que más preocupaba a Jesús fue siempre sanar a los enfermos, como la principal obra de la Misericordia, por eso llegara donde llegare Jesús preguntaba enseguida: “¿dónde están los enfermos que quiero sanarlos?”, no preguntaba otras cosas, los enfermos.
Entonces, su principal preocupación siempre fueron los enfermos, en el Evangelio y a lo largo de los siglos, porque Jesús siempre parte de una base, el hombre no debe morirse por enfermedad, el hombre tiene que morirse de viejo, la enfermedad es un desorden en la vida del hombre, un desorden y el Padre cuando creó el mundo lo creó con orden, cuando miró todo lo que había creado vio que todo había sido hecho bien, con orden, por eso en aquellos tiempos las personas cumplían montones de años y cada uno de acuerdo a como se gastaba su cuerpo, su vida se moría pero no por enfermedad. Entonces tenemos Patriarcas del Antiguo Testamento que pasaron hasta los quinientos años o Abraham que vivió ciento sesenta y así ¿no?, y que yo sepa no había ni antibióticos, ni cámara gamma ni tomografías computadas ni nada por el estilo en aquél entonces ¿no es cierto?, y sin embargo cuánto vivían las personas, porque todo estaba en orden. Si nosotros nos ponemos a revisar todos los problemas de las enfermedades siempre es un desorden de algo, o bien nuestros problemas personales siempre es un desorden de algo, en nosotros o en otros que tuvieron influencia sobre nosotros, por eso que cuando tenemos que hablar de enfermedades siempre pensamos en cómo nos fue antes de nacer, es decir como estuvo formada nuestra familia ¿verdad?, como era nuestro papá y nuestra mamá ¿verdad?, cómo hemos sido engendrados, si fue un acto simplemente así común o fue realmente un acto de amor, ¿que somos nosotros, un acto de amor o fruto de una noche de joda? ¿mmm?.
Por eso, entonces, el Señor nos propone que para que lleguemos a ese orden como había en los primeros tiempos ¿no?, se hagan las sanaciones es necesaria en las personas, por eso se hacen las sanaciones de la herencia porque uno la mayoría de las enfermedades las hereda, tal vez los hijos no hereden de los padres o tal vez sí, tal vez los nuestros o tal vez más adelante, pero todas las enfermedades, digamos un noventa y ocho por ciento son heredadas, sin que a lo mejor ni por casualidad nuestros padre supieran y además de las cosas heredadas están todas las cosas provocadas porque si tu viejo la mataba a palo a tu mamá cuando te llevaba a vos en la panza evidentemente que tu futuro está medio comprometido porque lo que menos necesita un niño son palos, garrotazos ¿no es cierto?. Pero ¿verdad? por eso el Señor nos propone tantas cosas para sanar nuestra herencia, para sanar todos nuestros primeros tiempos, los meses en la panza de mamá y en adelante, todo ¿verdad?, porque todo tiene una explicación si uno se la busca ¿verdad?. Más aún, Jesús dijo que si los Sacerdotes hicieran las sanaciones de las generaciones anteriores ¿verdad? la mayoría de la gente nacería de otra forma, no habría niños dawn por ejemplo ni nada por el estilo ¿mmm?, pero a las sanaciones en general no se le da mucha importancia, cuando uno está enfermo piensa enseguida en el médico, no en Jesús, entonces uno necesita rápido estar en marcha, dos o tres pastillas y adelante, en hora buena y gracias a Dios que haya medicamentos pero..., pero quien realmente sana es el Señor ¿no?.
Entonces, por eso justamente la necesidad de escuchar estas charlas en las sanaciones para enterarse de que uno puede ordenar la vida, incluso la vida que hemos vivido hasta en la panza de nuestra madre ¿verdad?, porque de una forma u otra uno más o menos sabe cómo le fue en la vida, de acuerdo a como fueron papá y mamá, cómo vivían, etc., uno en general sabe, todo no, pero sabe ¿mmm?, sabe. Además, para estar sano evidentemente que hay que sanar muchos acontecimientos que pasaron en nuestra vida, yo trato de no mirar a nadie para que nadie se de por aludido ¿no es cierto?, pero una de las cosas que me preocupa es por ejemplo la violación de los menores ¿no es cierto?, oír los actos de injusticias que pudieron sufrir los chicos en la Escuela, en la casa, por la familia, por un padre golpeador, por un padre alcohólico, todo eso de una forma u otra va quedando en la vida de cada uno, yo no los estoy mirando a la cara, por una razón muy simple, porque yo estoy hablando en base a lo que estoy viendo acá dentro y si miro a alguno, el otro va a pensar que me estoy refiriendo a esa persona, cuando hablo en general entonces miro más.
Pero ustedes llegan de lejos, o de no tan lejos o de cerca y se les nota, se les ve perfectamente en el rostro las cicatrices que le dejó un pasado doloroso, ustedes dirán: ¿todos?, una mayoría y si fuéramos a hablar en particular entonces diríamos: esto, esto, esto, esto y lo otro, aunque eso es medio, puede ser tomado como un poco indiscreto ¿no es cierto? decir cuando tenías cinco años tu tío te violó pero a lo mejor para sanar la enfermedad que uno padece en este momento habrá que sanar las consecuencias de esa violación en la niñez o más grandecitos. Porque hay muchas formas de violar, algunos creen que solamente físicamente, hay violaciones psíquicas de padres que a veces maltratan a sus hijos de una forma increíble y de eso está lleno acá dentro ¿eh?. No estamos buscando culpables, papá y mamá siempre son papá y mamá y los amamos pero como somos adultos tenemos que buscar las causas de nuestros problemas y si algo estuvo mal estuvo mal aunque papá o mamá lo hayan hecho, no hay vueltas y uno ya le digo, no busca culpables, uno busca las causa de los problemas que hoy estamos soportando.
Ahora, cuando yo hablé al comienzo de que Jesús cuando llegaba a cualquier lugar preguntaba enseguida: “¿dónde están los enfermos que quiero sanarlos?”, entre las obras de Misericordia no solamente está el sanar los enfermos ¿verdad? sino que está por ejemplo dar techo al que no tiene o contribuir a que lo tenga ¿mmm?, alojar o darles de comer a los forasteros que están de paso ¿mmm?, aconsejar a aquellos que uno ve que no anda a lo mejor por buen camino pero no creyéndose uno perfecto ni mucho menos sino tratando de ayudar ¿mmm?, porque hay personas que lo hace a veces pero creyéndose perfecto y perfecto no hay nadie ¿eh?.
Bueno, entonces son muchas las obras de Misericordia y uno tiene que pensar que cuando uno busca la sanación de sus problemas también debe buscar la solución de otros problemas, no solamente propios o personales sino también de los demás. Cómo trato a los forasteros, a los que están de paso, a los que viajan, a los que ofrecen bolsitas de residuos, que pasa cuando vamos por los barrios o en cualquier barrio puede haber gente que tiene hambre y que hacemos por esa hambre ¿no?, o bien la gente que está sola; las obras de Misericordia no apuntan solamente a los enfermos, sí por supuesto, pero apunta a un montón de situaciones para hacer más feliz al hombre ¿verdad?. Nuestro mundo no es tan pequeño que empieza y termina en nuestra familia, todos somos hermanos, hijos de un mismo Padre; es decir, si yo no creo de esa manera, si no creo que los demás sean hermanos, si vos no creés que las personas que tenés sentado a tu lado son tus hermanos entonces de cristiano tenés poco y nada, no, porque el máximo mandamiento que nos dio el Señor es: “ámense unos a otros como Yo los he amado” ¿verdad?. Así que no hay soluciones de otra forma, tiene que haber entre nosotros un amor muy profundo y si no hay amor por lo menos respeto y ese amor y respeto debe comenzar en la base de la familia que es la pareja, aquí estamos todos sentaditos, muy bien, todos ¿eh?, pero no hace falta mirar mucho para darse cuenta ¿no es cierto? que las cosas no son iguales dentro de la casa, palabras fuertes cuando no hay golpes ¿verdad?, las parejas en general son muy pocas las que se respetan, no digo a amarse, por lo menos respetarse, por lo menos, pero hay personas que pasan toda una vida ¿verdad? al lado de alguien que más que felicidad le dio amarguras ¿verdad?.
Entonces no podemos hablar ¿no es cierto?, de ser cristianos, de seguir a Jesús, de estar pidiéndole la sanación de un cáncer que a lo mejor tenemos adentro ¿verdad? si no estamos haciendo un acto de valoración de nuestra familia, de nuestra esposa, de nuestro esposo, de nuestros hijos ¿mmm?, es básico eso, es fundamental. La experiencia de toda una vida trabajando con estas cosas me han demostrado que son tan contadas las parejas que son realmente felices, ¿por qué?, porque pareja ¿que es?, poner cincuenta y cincuenta ¿no es cierto?, de un lado y del otro, pero la mayoría, la mayoría estamos en un ochenta y un veinte o un setenta y un treinta y eso no es pareja es despareja... (le hacen una pregunta) ..., por supuesto querido, sí señor, tenés razón, es así, claro, cuando no hay ejemplos que seguir cualquiera toma para cualquier lado, es eso, sí, sí, hay una crisis de la familia, si el ochenta por ciento por ejemplo en Argentina de los matrimonios no tienen buenas relaciones y muchos no se separan por qué, porque llegado el momento hay bienes gananciales que repartir y eso ya no les gusta entonces soportan y dicen: y bueno, aguanto, no voy a perder todo este capital que tenía, ese es el asunto... (le hace otra pregunta) ..., no podemos obligar a una persona a que esté junto a otra cuando la torturan, no podemos, pasar toda una vida siendo torturado por alguien no puede ser, entonces cada uno tendrá que seguir por su camino..., y sí, si vos estás sufriendo una situación tremenda qué otra cosa tenés que separarte. Dentro de la Iglesia hay una, un principio que dice: “no separe el hombre lo que Dios unió”, pero yo me pregunto: esas parejas formadas así ¿las unió Dios o se unieron ellos nomás?, o en este momento que se llevan como la mona ¿está Dios uniendo llevarse como la mano?, tampoco. Todavía la Iglesia está demorada en cuanto a reconocer ¿verdad? la necesidad que cada uno tiene que seguir el camino del amor, si vos te casaste mal y querés formar otra vida, con otra persona que amás tenés todo el derecho; y vos dirás: pero la Iglesia no me lo permite, San Pablo dice aquí en la Epístola a los Tesalonicenses, dice así: “el mayor tribunal que hay en el ser humano es su propia conciencia”, nadie puede decirle a un hombre algo contrario de lo que Dios le está hablando en su conciencia, si Dios te dice en tu conciencia que tenés que separarte hacelo y nadie te puede juzgar porque Dios te lo está diciendo a través de San Pablo en esto, entonces eso de “no separe el hombre lo que Dios unió”, hay que ver, ¿lo unió Dios?, habría que ver si lo unió Dios, la mayoría de las veces no lo unió Dios, hubo una conveniencia por lo material o porque hubo un apuro porque hubo un embarazo o por un montón de cosas, esas cosas irregulares Dios no las unió. Entonces, porque el Sacramento del Matrimonio es administrado por uno: yo acepto a fulano de tal ¿no es cierto?, yo acepto, pero mientras haya algo que es básico que es el amor ¿verdad? si no ya falta todo. Incluso cada Diócesis tiene un Sacerdote encargado ¿no? de estudiar los casos de matrimonios así para disolverlos, para que se puedan volver a casar por la Iglesia. (Le hace otra una pregunta) ..., hay montones , cerca nuestro a veces a no la vemos, hoy tuve la visita de gente de Córdoba que me dijo que un Sacerdote que unió a un hijo de él con una persona que no se consumó el matrimonio que dijo que estaba haciendo los trámites en el Arzobispado para disolver su matrimonio. Es decir, se tiene todo el derecho a disolver algo que no está bien, porque a lo mejor uno dijo que sí equivocado, confundido o bajo no sé qué cosas, entonces ¿qué?.
Esto para entenderlo hay que partir de una base, cuando Dios nos crea a nosotros pone en nosotros un proyecto de vida y quiere para nosotros todo lo mejor, cuando rezamos en el Padre Nuestro: “hágase tu voluntad así en la Tierra como en el Cielo...”, la voluntad del Señor es que seamos felices, si nosotros no podemos serlo pues bien, buscaremos en donde podemos la felicidad, pero el Señor tiene un proyecto con nosotros, nosotros no podemos quemar una vida sometiéndonos y decir: y bueno, que pase, total yo lo soporto y ya está, no, cuando nosotros nos presentemos del otro lado, que yo personalmente lo hice dos veces ya, uno el ante año y otro el año pasado, en Marzo, Abril ¿no?, es decir, delante de nosotros aparecen todas las cosas que uno hizo, como si fuera una película donde uno ve todo y a uno tiene que dar cuentas ¿no es cierto?, no porque Dios te esté exigiendo sino porque uno mismo se lo exige de cómo usó el proyecto que Dios tenía con uno ¿verdad?. Entonces, si uno no es feliz tiene que buscar la felicidad, por supuesto tampoco es cuestión de pura joda ¿no es cierto?, hay que ver los hijos, hay que ver, si han nacidos hijos quiere decir que hubo actos de amor, hay muchas cosas que tener en cuenta que son atenuantes ¿no es cierto?, pero a veces los hijos son fruto de una violación y nada más ¿mmm?.
Por eso, si hay algo que hay que tener en cuenta dentro de la Misericordia del Señor que Él nos ama, nos ama tremendamente, en uno de los Mensajes a Santa Faustina como aquí Jesús fue muy claro: Yo no vengo, no quiero revisar tus pecados, las cosas que vos crees que hiciste mal en tu vida, ofreceme todo que mientras más podredumbre hay, dice Jesús, más me va a gustar, dámelo a Mí, dice Jesús, dámelo ¿eh?, y vos pensá, el Señor me ama y el Señor está dispuesto a amarlo todo, comprenderlo todo y perdonarlo todo, son palabras de Jesús de la Misericordia a Santa Faustina, reconocida por el Papa Juan Pablo II y aquí. (Le hace otra pregunta) ..., sí, pero ¿sabés qué ocurre?, a muchos no les conviene que sea tan fácil perdonar, a mucha gente le gusta someternos... (sigue hablando la persona que hizo la pregunta) ..., no, por supuesto, está en el Evangelio: “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”.
Ahora, entonces, como base de la Misericordia el Señor dice que Él está dispuesto a perdonarlo todo, comprenderlo todo porque Él dice que no, la gente o es mala, la gente es ignorante, es despistada, que se yo, cualquier cosa, enferma pero no mala, entonces si la gente no es mala ¿verdad?, si obra de una forma porque está enferma o que se yo entonces la Misericordia tiene o alcanza para sanarlo todo, porque sino qué pasaría con ese que está en la cárcel porque hizo veinte violaciones, ese es un hombre enfermo y por ese hombre también murió Jesús tanto como por cada uno de nosotros, él no tuvo la culpa de estar enfermo, está al resguardo para que no haga daño a nadie, preso, pero el Señor piensa que ese es un hermano por el cual Él estuvo también en la cruz, así como por nosotros.
Es decir, no hay hijos y entenados para Jesús, todos somos sus hijos, por muy mal que nos hayamos portado alguna vez, todos somos sus hijos, que eso tiene que quedar bien claro porque es la base para tratar bien a los demás también ¿eh?, porque aquí no lo notamos tanto pero en otros países todos los problemas raciales, los problemas de sexo, los problemas de todo tipo ¿verdad?, hay que reunir una serie de condiciones, si vos no la reunís entonces estás segregado, estás afuera, noo, del Reino nadie está afuera, Él murió por todos en la cruz, por muy maldito que sea un ser humano ¿mmm?.
Bueno, entonces como base para entender todo esto ¿verdad?, nuestra propia vida, porque nos va de una manera, no, no podemos elegir tan fácilmente, nos va de una manera, nos fue en la vida de una manera, en nuestra niñez, antes en la panza de mamá, hemos nacido de una forma, hemos tenido accidentes, hemos tenido cincuenta mil problemas, nos fue de una manera pero el Señor siempre está allí disponible para darnos todo lo que necesitemos y hacer lo que Él dice en el Padre Nuestro, que seamos felices ¿mmm?, su voluntad es que seamos felices porque si nosotros por ejemplo decimos: y bueno, aguanto, total ¿no es cierto?, tengo que medir las consecuencias del aguante pero Él tuvo y tiene para cada uno de nosotros un proyecto y en consecuencia nosotros no podemos defraudar al Señor diciendo: y, total, a mi no me importa que me vaya como me vaya, yo sufro y ya está, noo, vos tenés que realizarte como hombre, como persona y buscar no sé donde y buscar tu felicidad, a toda costa y a cualquier precio, siempre que no hagas daño a nadie ¿mmm? y a veces como dijimos antes está el problema, suponiendo que sea de la pareja, el problema de los hijos ¿no?, pero que es mejor ¿no es cierto?, toda una vida desgraciada o que los hijos no tengan un ejemplo terrible? y acá dentro hay varias personas que viene muy bien lo que yo estoy diciendo, por eso lo estoy diciendo ¿mmm?.
Bueno, entonces, después de estas palabras hemos llegado a muchas conclusiones, Dios es amor, ese es un amor que alcanza para todo, alcanza para nosotros, alcanza para los más zaparrastroso que uno considera... (se dio vuelta la cinta) ..., sepa encontrar, hay que tener mucho cuidado, aquellos que se creen los primeros en la Tierra no son justamente los primeros a los ojos del Señor ¿mmm?.
Entonces, la venida a este Santuario es como una proposición ¿no es cierto?, para decirles: están en la Casa de un Dios de amor que quiere darles todo lo que necesitan para ser felices, aprovéchenlo ¿verdad? y vos dirás: ¿y es caro el precio?, no, todo te da el Señor a cambio de nada, su amor es gratuito, no te exige nada, absolutamente nada, en todo caso el que exige es uno mismo de sí mismo porque si yo amo a alguien mucho ¿verdad? no le voy a defraudar no le voy a hacer ninguna cosa dañina ni mala, entonces incluso cuando pasamos al otro lado el Señor no nos pregunta qué hiciste, uno mismo se revisa pensando qué es lo que hizo ¿mmm?. Cuidado porque podemos llevarnos serias sorpresas, nosotros a veces podemos pensar en los demás no tan bien, cuidado con eso, nadie puede pensar mal de nadie, en todo caso el que piensa de cada uno es el Señor y el Señor lo que piensa es que para todo hay perdón y para todo alcanza su Misericordia.
Y ahora podemos distinguir esto, cada uno piense en su interior que cerca está Jesús de uno y uno que lo cree tan lejos, Dios Padre parecería un poco lejano porque no tiene forma, es Luz y el Espíritu Santo también es Luz pero sí Jesús tiene la forma humana porque participa de la naturaleza humana, es mitad hombre y mitad Dios, por eso le decimos aquí: tan cerca de mí, tan cerca de mí, que hasta lo puedo tocar, Jesús está aquí. Ni lo busque a Cristo en lo alto, ni lo busque en la oscuridad, muy cerca de ti, en tu corazón, puedes adorar a tu Señor. Tan cerca de mí, tan cerca de mí, que hasta lo puedo tocar, Jesús está aquí. Yo pienso, el que tengo sentado a mi lado, además de ser pariente o esposo o lo que sea, ¿quién es?, mi hermano ¿no es cierto?, y yo tengo que ver en cada hermano el rostro de Jesús, entonces toquen a Jesús que tienen a su lado, tóquenlo, tóquenlo seriamente porque Jesús está sentado a vuestro lado, atrás, adelante, en todos lados ¿eh?... (le hace otra pregunta)…, bueno. Entonces: le hablaré sin miedo al oído, le contaré las cosas que hay en mí, y que solo a Él le interesarán, Él es más amigo para mi. Tan cerca de mí, tan cerca de mí, que hasta lo puedo tocar, Jesús está aquí. Míralo a tu lado por la calle, caminando entre la multitud, muchos ciegos van, sin quererlo ver, lleno de ceguera espiritual. Tan cerca de mí, tan cerca de mí, que hasta lo puedo tocar, Jesús está aquí.
Entonces si el Señor está aquí, está a mi lado, está en mi, está entre nosotros, pensemos cada uno en nuestra propia vida, en cómo nos fue, pensemos en antes de nacer, durante los nueve meses o menos, pensemos en la niñez y a lo largo de toda la vida como nos fue, cuánto necesitamos que el Señor pase sanando todos los dolores que hay en nuestra vida, son tantos, tantos y tan grandes algunos que parecería que ya no cabe más en la pila que llevamos sobre la espalda, entonces que nuestra mente ubique todas aquellas cosas que son terribles en nuestra vida, incluso nuestras enfermedades, todos los que están acá dentro tienen algo y algunos un montón, entonces habrá que pedirle a Jesús que rompa nuestra vida y la haga de nuevo, solamente Él puede hacer eso, el Señor puede poner orden en nuestra vida, Él se mete en nuestro corazón con su Misericordia, entra en nuestra sangre por venas y arterias, pasa a todo nuestro organismo para llevar la sanidad a todas las partes de él, pensar que nuestro cerebro hay capilares que son cien veces más finos que un cabello, solamente Jesús puede pasar por ahí para sanarlo. Ven Señor, ven, te lo decimos de esta forma: tu eres el alfarero, que con tus manos me has transformado, mientras pasan los días, pasan los años más te venero. Rompe mi cántaro, rompe mi copa, rompe mi vida y hazla de nuevo. Rompe mi cántaro, rompe mi copa, rompe mi vida y hazla de nuevo.
Entonces pensamos no solamente en nuestras enfermedades, dolores, problemas sino también en el de nuestros familiares, a todos los que amamos y a los que no amamos tanto también, pensamos en todo eso y pensamos en un acto de Misericordia del Señor tremendo que puede hacer con nosotros para realmente hacernos de nuevo y se lo decimos con más fuerza que recién: tu eres el alfarero, que con tus manos me has transformado, mientras pasan los días, pasan los años más te venero. Rompe mi cántaro, rompe mi copa, rompe mi vida y hazla de nuevo. Rompe mi cántaro, rompe mi copa, rompe mi vida y hazla de nuevo.
Te sentimos Señor tan profundamente dentro de nuestro corazón, te sentimos a nuestro lado con nuestro hermano delante y detrás, a derecha y a izquierda, pero no estamos solamente con vos Jesús, estamos con la Virgen María, tu Mamá, que sabemos es la Mediadora de todas las Gracias, por eso también a ella vamos a invocar, también a ella le vamos a decir lo que a ella le gusta porque es Nuestra Madre, la Madre del Cielo, porque tenemos dos madres, aquí en la Tierra y la del Cielo, entonces: la Virgen se está peinando, entre cortina y cortina, sus cabellos son de oro y el peine de plata fina. Pero mira como beben los peces en el río, pero mira como beben por ver al Dios nacido. Beben y beben y vuelven a beber, los peces en el río al ver al Dios nacer. La Virgen lava pañales y los tiende en el romero, los pajaritos cantando y el romero floreciendo. Pero mira como beben los peces en el río, pero mira como beben por ver al Dios nacido. Beben y beben y vuelven a beber, los peces en el río al ver al Dios nacer. La Virgen se está lavando con un poco de jabón, se le han picado las manos, manos de mi corazón. Pero mira como beben los peces en el río, pero mira como beben por ver al Dios nacido. Beben y beben y vuelven a beber, los peces en el río al ver al Dios nacer.
Sí Señor, queremos tanto a tu Mamá Jesús, cuánto amamos a tu Madre Señor, así como te amamos a vos Señor, por eso venimos de lejos Señor y no tan lejos y de cerca para que pongas una mano sobre nosotros y pases sanando todos nuestros problemas, todas nuestras angustias, todas nuestras enfermedades. Ven Señor Jesús, ven, entra en mi corazón y llénalo de tu amor para que la sangre que bombea ese corazón vaya a todas las partes del cuerpo, por venas y arterias Señor, para que lleve la sanación, vos dijiste Señor: Yo no traigo la gente a este lugar para que se vaya como vino, cumplí Señor con tu promesa, que cada uno que pise este lugar pueda irse diciendo otra cosa que su problema, su enfermedad, su angustia, sus dramas, sus preocupaciones, todo se fue diluyendo, algunos inmediatamente, otros a través del tiempo porque tu tiempo Señor es distinto al nuestro ¿mmm?.
Jesús cuanto te amo y estoy convencido de que pasás entre nosotros Señor, pasás sanando todos nuestros problemas y nuestras cosas, yo quiero que vengas a mi Señor, no solamente hoy sino siempre Jesús, ven Señor a mi corazón, ven a sanar mi corazón y no solamente el mío sino de la comunidad done vivo, de las autoridades civiles, religiosas, del Sacerdote o los Sacerdotes de nuestra Parroquia, de nuestro Obispo, de todas las personas que necesitan, de nuestra provincia, nuestra nación, el mundo, Señor, mi mirada debe alcanzar para todo Jesús porque yo te amo y quiero que este amor llegue a todos los hombres Señor y ahora estoy pensando Señor pero con seguridad hasta que punto estás pasando entre nosotros y sanándonos Señor. El Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya. Déjalo que te toque, déjalo que te toque, déjalo que te toque y recibe su bendición. Déjalo que te toque, déjalo que te toque, déjalo que te toque y recibe su bendición. Ahora el Señor pasa sanando, cierren los ojos y véanlo pasar entre ustedes porque Él pasa sanando, acuérdense lo primero que decía: “¿dónde están los enfermos que quiero sanarlos?”, y yo les digo: aquí estamos Señor, somos todos los enfermos que queremos que vos derrames tu Gracia sobre nosotros, nos mires al rostro, infundas toda tu Misericordia Señor, que hoy sea el día del comienzo de mi sanación Señor o la prolongación de la sanación que ya comencé. El Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya. Déjalo que te sane, déjalo que te sane, déjalo que te sane y recibe su bendición. Déjalo que te sane, déjalo que te sane, déjalo que te sane y recibe su bendición. Ahora el Señor va a pasar liberando, piensen en toda la familia, piensen en los seres que aman, piensen en todos aquellos que ustedes quieren que se liberen de malas compañías, malos hábitos, que son borrachos o drogadictos o lo que sea, que el Señor los libere a todos y que también libere a vuestras propiedades, vuestros vehículos, vuestros elementos de trabajo, que cada uno de los elementos de trabajo de ustedes esté bendecido especialmente por el Señor. Sí, que el Señor libere todo, Él quiere liberar, quiere dejarnos limpitos, no pensar más en las cosas malas que pueden hacernos porque estamos libres de todo eso si estamos con el Señor y si a veces perdemos algo pensemos: el Señor lo va a restituir multiplicado siempre. El Maestro de Galilea liberando está, el Maestro de Galilea liberando está, el Maestro de Galilea liberando está, el Maestro de Galilea liberando está. Déjalo que libere, déjalo que libere y recibe su bendición. Déjalo que libere, déjalo que libere, déjalo que libere y recibe su bendición. Ahora pensamos allá en Pentecostés cuando el Espíritu Santo en forma de lenguas de fuego desciende sobre María Santísima y los Apóstoles, pensemos que el Espíritu descienda sobre nosotros, inunde nuestra conciencia, nos haga tomar decisiones siempre en base a lo que el Señor quiere, que cada uno de los actos de nuestra vida esté guiado por Él, que todos aquellos médicos o de alguna forma sanadores que están cerca de nosotros al tocarnos que sea la mano del Señor que nos toca por ellos, que cada uno de aquellos que nos atienden que sea la mano del Señor que nos atiende, lo mismo convirtamos nuestras manos en las manos del Señor para atender a los que necesitan, pidamos el Espíritu Santo con la fuerza que el Señor quiere. El Maestro de Galilea fuego mandará, el Maestro de Galilea fuego mandará, el Maestro de Galilea fuego mandará, el Maestro de Galilea fuego mandará. Déjalo que te queme, déjalo que te queme, déjalo que te queme y recibe su bendición. Déjalo que te queme, déjalo que te queme, déjalo que te queme y recibe su bendición.
Si Señor, estamos ansiosos de recibir tu bendición Señor y te lo decimos una vez más, cuánto te amamos Señor, qué sería nuestra vida si no estuvieras con nosotros, que pasaría con nuestra vida si no tuviéramos el consuelo constante de tu amor que se desparrama con nosotros, que seria Señor nuestra soledad terrible si no estuviera llena de vos Señor. Por eso ven Señor Jesús, ven, ven. ¿Algunos de los presentes quiere decir algo antes de que empecemos la sanación?, no sé, digo, bueno.