¿Por qué no dejar que hable el Espíritu Santo en vuestros corazones?.

Mensaje del 08 de Mayo de 2006

Habla Artemio:

08 de Mayo.

Dice Jesús:

Hoy es el día dedicado a Mi Mamá como Nuestra Señora de Luján, con todo lo que ello representa para este país en el que viven y mañana Nuestra Señora de los Milagros entre otros, pero volviendo a Nuestra Señora de Luján, los que están cerca, no tan cerca y lejos y concurren en los días festivos, se ve en todos una manifestación de fe muy grande, pero no sé si es aprovechado convenientemente por los Ministros de la palabra para ser lo suficientemente claros en lo que predican, desaprovechan que es posible que algunos solo concurran a un santuario ese día y con las palabras que dicen tal vez muchos estén tocados para siempre de la conciencia de ser amados por Mí, Mi Padre y el Espíritu Santo.

¿Por qué no dejar que hable el Espíritu Santo en vuestros corazones? y en vez de preparar las Homilías, aunque invoquen el Espíritu Santo, pero en vez de preparar esas Homilías ¿por qué no hacen lo que se debe hacer?, aquél que es consciente del alcance del Espíritu Creador debe mirar a todos aquellos que desfilan ante Mi Madre o que duermen en las arcadas, porque han caminado tal vez muchos kilómetros, hay en ellos expectativas conscientes o inconscientes de encontrar una palabra que les haga su vida más vivible.

Yo les puedo asegurar que los corazones están ansiosos, están hambrientos de palabras que les lleguen a su vida como una bendición para clarificar su situación, hacer nacer o renacer la esperanza, encontrar respuestas a sus problemas existenciales, claros, difusos o confusos, pero tengo que decirles que corre agua pero no quita la sed, hay movimiento pero no se cambia de lugar.

Para ello es necesario mirar todos esos rostros ansiosos para recibir de la Madre o de Mí algo, siquiera para su vida, y la vida de sus hijos y descendientes; pero es un verdadero drama pensar que el abuelo no escuchó la palabra adecuada, el padre tampoco, el hijo menos y el nieto que ahora está aquí yendo a la Madre, Mi Madre, sigue en la misma situación. ¿Saben Mis queridos?, el amor no es algo que uno puede dejar de sentir hasta en los actos más íntimos y chiquitos, el amor no puede quedarse allí como apenas insinuado, tiene que sentirse que entra en el corazón del que escucha y del que ve.

Me refiero al amor Misericordioso, aquél que surge del que está diciendo cosas o confiesa o aconseja, ese amor que hasta se puede ver a flor de piel, porque ustedes saben muy bien que aquellos que sustentan algo por lo menos brillan como estrellas en la noche en cualquier ambiente, ahora estamos hablando de todos aquellos que van a ver a Mi Madre en este día, o cualquier día, o ¿hay necesidad que sea un día festivo para permitir que el amor ubique a la persona que está hablando o mostrándose?, ¿hace falta que sea un día determinado?, no, tiene que ser un hábito constante, si es que a esto puede llamársele hábito.

Mis queridos así no. Hay necesidad de cambiar, hay necesidad de que el Espíritu Santo llene vuestros corazones para que puedan después vuestras palabras irradiar la vida.

Amén.