Yo creo que se piensa poco en la grandeza de Mi Mamá.

Mensaje del 17 de Agosto de 2006

Habla Artemio:

17 de Agosto de 2006.

Dice Jesús:

Que nítidas suenan en Mis oídos a pesar de todo el ruido que hacía la gente en el camino del calvario, que nítida suenan aquellas palabras: “bendito el vientre que te llevó y los pechos que te amamantaron”, esos pechos que me amamantaron y el vientre que me llevó me nutrió humanamente todo lo que había previsto Mi Padre.

Muchas veces me puse a pensar en la grandeza de Mi Mamá, si bien Yo tengo naturaleza humana pero también tengo naturaleza divina, pero Mi Mamá no, solamente humana, sin embargo lo que podían ver Mis ojos, lo poco que podían ver Mis ojos en esos momentos tan tremendos, era justamente la expresión de una Madre que si bien sufre por lo que le está pasando a su Hijo en lo profundo de su Corazón sabía que todo aquello tenía que darse para la Nueva Alianza.
Yo creo que se piensa poco en la grandeza de Mi Mamá, sí, por supuesto, a lo largo y ancho del mundo y en toda esta América Latina hay Santuarios que veneran a Mi Mamá diseminados por todos lados, dándole a Mi Mamá cientos y cientos de nombres diferentes según el lugar en donde se la venera, pero no creo que muchos al venerar a Mi Madre piensen en aquellas palabras que ella dijo: “he aquí la esclava del Señor, hágase en Mi según tu palabra”, y mucho menos aquello de: “Mi alma engrandece al Señor y se alegra Mi Espíritu en Dios Mi Salvador, porque ha fijado los ojos en la pequeñez de su esclava”.

Si la humanidad entendiera, así como veneran tanto a Mi Mamá, entendieron el alcance de las palabras que dije, todo sería diferente, Yo no digo que no se la quiera mucho y se la ame tremendamente; pero lo dicho por Mi Madre tendría que ser la expresión diaria o de cada instante de todos los cristianos. Quiero que piensen en esa aceptación de lo que se le encomendaba, Mi Madre pudo haber sabido e intuido mucho pero partamos de la base de su mente humana, de su corazón humano.

Por eso, me parece hermoso la cantidad de Santuarios donde se la venera pero Yo les pediría Mis queridos que hagan vuestras las palabras de ella cuando el Ángel la visita y todo lo que dice el Magníficat, ese himno tan hermoso que nada puede igualarlo.
Cómo es posible que Mi Madre entendiera tanto sobre Mi Misericordia que al pronunciar esas palabras se identifica plenamente con la Misericordia que Yo vengo a traer al mundo.
Si algunos dicen así muy rápidamente: obra del Señor, inspiración del Espíritu y muchas cosas por el estilo, es decir porque hay muchos que para no pensar con la mente y el corazón nuevamente en algo, lo dan como ya por sabido, como entendido, como discernido, como algo que ya está incorporado y punto, no, en las cosas del Señor y por supuesto de su Madre todo tiene que volver a vivenciarse en el corazón diariamente y tal vez a cada instante porque cada uno es hoy, no el de ayer, es el de ayer en la medida que tiene su fisonomía y sus condiciones y todo lo que trae pero la vigencia de este día no es la vigencia del día de ayer, entonces en estos temas no hay sabios que ya lo tengan todo explicado, no; hay necesidad, como dije, de volver a vivir estas expresiones y cuando se hace con una actitud así como les propongo van a ver que vuestro ser, en todos los órdenes se enriquece.

Nada hay sabido desde siempre, sí, por supuesto que tenemos todo un bagaje de experiencias y sabiduría acumulada, está bien, pero repito en las cosas del Señor nadie llega a un lugar y puede establecerse allí, sino que es un camino por donde se transita; dirán algunos: ¿cómo es que nos pide esto el Señor?, ¿no alcanza con el amor que tenemos a la Madre?, todo el amor que se le tiene a la Madre diariamente y a cada instante tiene que renovarse porque está siempre soplando sobre el hombre el Espíritu Santo que dará vivencias nuevas a lo que ya se repitió montones de veces, recuerden: no un lugar adonde se llega sino un camino por donde se transita.

Entonces, no es que esté diciendo que están obrando mal, no, les estoy diciendo que vuestra fe debe hacerse cada día más grande con el enriquecimiento cotidiano.