¿Y qué produjo eso?, en algunos corazones ofensas, agravios, todo desagradable, pero en otros una mirada comprensiva, una sonrisa de piedad.

Mensaje del 14 de Agosto de 2006

Habla Artemio:

14 de Agosto. La Madre dice

Dice la Madre:

Primero la risa torpe, luego la palabrota grosera y maligna, después gestos indecentes, luego una carcajada burlona y se fue pedaleando su bicicleta vieja y desvencijada. ¿Y qué produjo eso?, en algunos corazones ofensas, agravios, todo desagradable, pero en otros una mirada comprensiva, una sonrisa de piedad, los ojos brillosos por las injurias, pero allá en el fondo la explicación no sabe, no entiende, ignora, nadie le enseñó y la mirada del Padre cubriendo todo con su Misericordia. Él no podría hacer otra cosa sino llenar el alma del agraviado con un néctar dulce de comprensión y espera porque todo gira como las ruedas y el de apariencias malditas volverá seguramente a remediar la ofensa.

Para la mente común hay necesidad de un castigo, venga de donde venga, para la mentalidad del cristiano hay necesidad de explicar, comprender y perdonar, ya sé, también está el cansancio de ver repetir todas esas cosas, es que el cristiano no debe cansarse porque quien obra mal es porque no sabe obrar de otra manera, alguien dirá: o no quiere obrar de otra manera y quién le enseñó a obrar de otra manera.

A veces pienso que hay necesidad de que la generación siguiente ya no tenga esos exabruptos, porque el tiempo pasa rápido y los hombres también.