Mensaje del 02 de Noviembre de 2005

Dice Jesús:

Así dialogábamos con Artemio hace muchos años, muchos años, eran días alegres y tristes, eran días, Yo le dictaba esto a él, escuchen, y él me lo decía gustoso.

Amigo para siempre, que día largo tuvimos. Y ahora antes de acostarme, casi sin querer estoy repasando todo lo que nos ocupó y de esta forma fuimos haciendo este largo día. Gracias hermano fiel porque veo otra vez la luz.
Gracias por el sol y por la lluvia que anoche cayó.
Gracias porque siento la vida correr por mis venas y en la piel el aire tibio.
Gracias por todo y por cada parte de ese todo y por el todo junto otra vez.

Interrumpo Mi querido para decir: no podría llamarse esto: Salmo del hombre en comunión con todas las cosas. Sigue así lo que le dicté.

¿Sabés hermano del alma?, tengo suerte porque esté o no rayado, triste, amargado, alegre o feliz, eufórico o no, con los amigos o enemigos, de cualquier forma o no vos siempre estás conmigo.
Padre común, yo sé que a vos te duelen como a mí los campesinos bolivianos, el aire viciado, el Canal de Panamá, los hombres de mi tierra, los analfabetos y también que millones de hombres aún no sepan el gusto del pan ni de la carne. Me duelen los indios y sus descendientes y me duele que podría ser cierto que entierren en la Antártida las sobras del material radioactivo porque los témpanos que vienen flotando traerán la contaminación. Y me duele pensar en los chicos y en los viejos y todos enfermándose y el paraíso patagónico agonizando y los amancay y las mutuicias achicharrándose y todos los animales sin poder oír. Me duele el estómago de tanto descargar sobre Él mi sensibilidad y también me duele no poder enumerar todas las cosas que me duelen.
Amigo de cada momento, vos sabés que me dan pena los norteamericanos y los rusos, los del mercado común europeo, los árabes con su petróleo y los que no saben que existe el petróleo. Me duele el MERCOSUR, por tantos avances y retrocesos sin encontrar la medida.
Me da pena pensar que la muerte podría llamar a mi puerta y hay muchos hombres todavía sin consuelo y muchos niños tristes, en Escuelas tristes, con futuro triste y muchas mujeres siguen abortando y muchos hombres quedaron estériles por trabajar con calor excesivo en una fábrica que no es de ellos ni será nunca de ellos.
Sabés Señor que lindo que con vos pueda ser simple, con los demás cuesta ser simple, vos me sentís vivir, yo te siento vivir, los dos nos respiramos y simplemente miramos el almácigo que nace, el chico que gatea, la gallina renga o la hormiga que aplasté sin querer.
¿Y por quién te pido hoy?, ¿por quién?, larga es la lista y voy a empezar.
Te pido por los que se broncean al sol, pero no los que se ganan el pan a cuero limpio sino por “la gente bien” entre comillas, la que en verano tiene estatus según la intensidad de su bronceado.
Te pido por los deportistas de alta montaña ya que un solo equipo de esos que usan alimentaría a varios leprosos toda la vida.
Pero este es un problema nuestro Señor, ellos son buenos, pero en su dimensión no hay leprosos.
Habrá que hacer algo Jesús por los matrimonios rotos y estudiar mejor todo lo que vos dijiste porque hay tantos en el mundo y no los vas a dejar así porque sí, entonces te pido por los que se casaron y les fue bien y juzgan a los otros, por los que no se casaron y juzgan a los otros.
Te pido por todos los que no necesitan y también, por los que necesitan un sacudón.
Y te pido por los que siempre triunfan y creen que van a seguir triunfando pisoteando a los otros en forma consciente o inconsciente.
Te pido porque vos y yo sabemos que no le va a durar, porque en lo íntimo se dan cuenta que edificar sobre sangre es resbaloso.
Señor Jesús, acordate también de los locos, tal vez tengan suerte de no ser cuerdos en este mundo de sanos, esperanza de un mundo habitable.
Te pido por el que ríe del gordo y del flaco, del pelado, del barbudo y no sabe que es gordo o es flaco, pelado o barbudo el que descubrió una vacuna para que no se muera su hijo.
Te ruego por Juan Pérez, no sé quién es, pero hay tantos necesitados.
Te pido por los que al observar la ley se olvidan del hombre y ni cumplen la ley ni aman al hombre.
Dirigente que nunca quiso acomodarse, te pido por los dirigentes, por los que de una u otra forma manejan la vida de las pequeñas o grandes comunidades y deciden la vida de los otros, en el orden social, económico, jurídico, político, religioso.
Uno se pregunta: ¿cómo será la noche de ellos cuando hunden la cabeza en la almohada?. Yo me acuerdo porque el cuerpo me arde, acordate también vos de los que asesinan con palabras, sería bueno que no den tanto olor esos muertos sin sepultura.
Y es bueno que le des paciencia a los que ven crecer la cizaña junto al trigo, dales mucha paciencia porque podrían estallar.
Y por último, no me hagas proceder como el que estaba en la primera fila del Templo.
Y esto que hablamos sea un maravilloso acto de amor, pero que yo no lo considere tan maravilloso.
Y ahora dormiré, espero que sea en paz, di todo lo que pude pero sobre todo estuve disponible, pido perdón a los hombres por no haber estado aún más disponible y me duermo en tu seno con la alegría y la esperanza de ir haciendo el camino hacia la Luz.

Amén.