Mensaje del 26 de Julio de 2005
Habla Artemio:
“Te celebro, oh Rey mi Dios,
y bendigo tu nombre para siempre.
deseo bendecirte cada día,
alabaré tu Nombre para siempre.
Grande es Señor, muy digno de alabanza
y no puede medirse su grandeza.
De generación en generación
se celebran tus obras, se cuentan tus proezas.
El esplendor, la gloria de tu Nombre,
tus maravillas, los repetiré.
De tu poder formidable se hablará,
y tus grandezas yo las contaré.
Nos harán recordar tu gran bondad
y se proclamará tu justicia.
El Señor es ternura y compasión,
paciente y lleno de amor.
El Señor es bondad para con todos,
sus ternuras están en sus obras.
Te den gracias, Señor, todas tus obras,
te bendigan tus amigos;
que hablen de la Gloria de tu Reino
y anuncien tus hazañas,
para que vean los hombres tus proezas,
el brillo y la gloria de tu Reino.
Tu Reino es Reino por todos los siglos,
y tu imperio por todas las edades.
Fiel es el Señor en todas sus palabras
y bondadoso en todas sus obras.
Sostiene el Señor a todos los que caen,
a los que están encorvados endereza.
Los ojos de todos de ti esperan
que les des a su tiempo su alimento.
Tu solo abres tu mano, y satisfaces
de lo que quiera a todo ser viviente.
Justo es el Señor en todo su caminos
y bondadoso en todas sus obras.
Cerca está el Señor de los que le invocan,
de todos los que lo invocan de verdad.
Les da en el gusto a todos los que lo temen,
escucha su clamor y los salva.
El Señor guarda a todos los que lo aman,
y a todos los malvados extermina.
¡Que mi boca proclame la alabanza del Señor
y todo ser carnal bendiga su santo nombre,
por siempre y para siempre!”.
“¡Aleluya!.
¡Alaba al Señor, alma mía!.
Mientras viva yo quiero alabar al Señor,
quiero salmodiar para el Señor mientras exista.
¡Alaba al Señor, alma mía!.
Mientras viva yo quiero alabar al Señor,
quiero salmodiar para el Señor mientras exista”.
Dice Jesús:
Yo estoy todos los días con ustedes pero a veces digo palabras para que sean grabadas, otras veces no, pero estoy siempre con ustedes.
Habla Artemio:
Yo te diría Señor que en estos días años que pasaron, pocas veces hablamos en un diálogo donde yo te pregunto y vos me respondes, bueno, yo ahora voy a hacer eso, vos hacé lo que quieras Señor, es decir si respondes o no.
Dice Jesús:
Todo lo que Yo hago diariamente puedo expresarlo en Mensajes pero no necesariamente. Hay que tener en cuenta que el plan de la Creación no se detiene y más allá de lo que los hombres pueden demorar, porque de hecho demoran todas las cosas; pero el ser humano, la persona, puede descansar siempre en esa reserva Mía para todas las cosas, incluso las que no son buenas, todos pueden descansar en Mi Misericordia.
Habla Artemio:
No te entiendo Señor, por qué no aclarás un poquito.
Dice Jesús:
Bueno, tantas cosas pasan todos los días a lo largo y a lo ancho del mundo y todos entienden que un Dios de amor no podría provocarlas, entonces por el juego propio de las libertades de los hombres como lo dije tantísimas veces, ocurre tanto, ocurre tanto dolor en el mundo y parecería que en algunos casos ya todo terminó, que ya no hay esperanza, que..., sin embargo las personas renacen de sus cenizas, renacen de los momentos tan difíciles y siguen adelante. Ahora, debe pensarse que Yo estoy al lado de cada uno de los que sufren y de los que están alegres y de los que tristes y de los que están felices, ocurre que no hace falta aclararlo pero los hombres cuando están tristes me hablan, me invocan, me piden; y cuando están alegres parecería que hasta es una forma de..., de..., una forma de quedar bien conmigo y decir: gracias Señor, pero en general todas las formas de ser del hombre apunta a quejarse mientras le duele o tiene dolor de alguna cosa en especial, me refiero a causas físicas o morales, pero en el momento de la alegría son contados aquellos que dicen: gracias Señor porque tus ojos han mirado mi rostro y lo han llenado de alegría y de paz.
Y sino miren ustedes, la mayoría de los hombres pone como una meta, en casi toda su vida, en ciertos placeres, por supuesto que en algunos puede ser la comida y en otros los placeres como una consecuencia del afecto que se tienen; pero siempre se ha cargado todo eso de tanta culpabilidad que el hombre ni quiere acordarse de Mí porque en montones de casos si bien no le parece que está en falta pero cree que está transitando un camino que no es bien mirado por el Señor.
Habla Artemio:
¿Y qué remedio hay Señor para todas estas cosas?.
Dice Jesús:
El remedio es que cada uno tome conciencia de esto y viva en plenitud sin ningún temor, nada de temor, en absoluto. Es decir, cuando uno razona así le dicen: estás haciendo un Dios a tu medida, Mis queridos, sin faltar a los principios esenciales que todos saben cuáles son, el Dios de cada uno tiene que ser a medida de cada uno; es decir, si Yo como Dios y como hombre después de haberme encarnado, después de tantos milenios de estar en el Padre, si Yo no soy la medida de cada hombre y entiéndanlo bien esto, no como a ustedes puede gustarle, no estoy hablando de un subjetivismo barato, no, estoy hablando de cómo aquél hijo que está acomodando su vida a los principios de su familia, al amor de su padre y de su madre, esto no quiere decir que haya faltas en ellos ni mucho menos, sino que como el ser es único, inédito e irrepetible, todos conceptos que uso y ustedes ya saben el alcance que tienen pero siempre conviene recordarlo, entonces es más que necesario que cada uno debe dar una respuesta personal... (se interrumpe la grabación) ... .
Sí, es cierto, por supuesto que no es tan simple pero tampoco compliquen las cosas demasiado, la relación de un padre y un hijo o de una madre y un hijo, debe ser lo suficientemente amplia con toda la amplitud que da el amor. Si no hay esa amplitud esto es una forma fría de cumplir con al ley, o con una serie de principios, pero cumplir por obligación.
Ustedes si razonan estos diez años, más ya, de Mensajes verán que hay un denominador común, que hay ciertos principios en los que podría concretarse todo, pero ¿qué ocurre?, también en el Evangelio todo está muy clara, pero ya se los he dicho ya hace muchos años y sigo repitiéndolo, cada uno interpreta la parábola del Buen Samaritano de acuerdo a sus conveniencias, no de acuerdo a lo que realmente debe ser.
Entonces preguntarás vos: ¿no hay un litigio entre lo que debe ser y lo que a mí me pasa como hombre?, ¿yo hombre o cualquier hombre?, no, no hay un litigio, ¿cuándo?, cuando está todo supeditado a un amor muy intenso, sobradamente les he dicho ya que para entender las cosas hay que amar profundamente, con un amor de entrega total y completa, pero no una entrega con reparos, no una entrega con peros, no una entrega que parecería que hay necesidad de cubrirse, de esconderse o algo por el estilo para hacer las cosas, no, no me refiero a eso. Cualquiera diría: pero entonces el Señor está pensando en que ya tendría que darse ese estado hermoso de plenitud para que nadie sufra y todos estén en paz con el Señor, Yo estoy luchando siempre con Mi palabra para todo eso, pero no va a ser tan rápido, ¿por qué?, porque siempre hay una confrontación de libertades donde cada uno cree estar obrando bien y cada uno se adjudica posiblemente..., se adjudica la verdad.
Ahora, mientras no hay un amor profundo el hombre no está en la verdad, por más que recite las cosas verdaderas en forma correcta, pero mientras no la sustente el amor es nada más que un ejercicio de palabras, nada más que un ejercicio de palabras porque puede decir por ejemplo: yo creo en Dios y lo amo, pero no está tal vez diciendo nada porque Yo siempre mido todo con parámetros que aquí muchas veces he citado y que es fácil en todo caso darse cuenta cuando hay una humildad muy grande.
Vamos a decir por ejemplo si todos aquellos que están a tu lado y siguen tus principios que son los Míos y están tan ansiosos para que tu mano les toque, porque tus manos están dando la fuerza que Yo te doy para que procuren la sanación o cualquier cosa de los hombres, si esas mismas personas te vieran en todos los momentos de tu vida a lo largo de las veinticuatro horas, en base a los esquemas en los cuales se mueven no sería tan fácil pensar que ya besándote las manos tienen todas las gracias; ¿por qué?, porque cada uno proyecta su vida y la vida de los demás en la medida en que el amor lo esté sustentando y hay muchos que nacen y crecen y mueren sin haber conocido el amor, no lo han conocido y llaman tal vez amor a una serie de ejercitaciones físicas y también espirituales, pero que no es exactamente lo que Yo entiendo por amor.
Yo hago las preguntas en lugar tuyo, entonces quiere decir que la mayoría estamos caminando por senderos que la mayoría de las ocasiones no son los correctos, si en el fondo el hombre cree que está haciendo algo correcto, pues bien, no hay nada objetable; pero el problema aparece cuando el camino correcto de algunos impide a que otro pueda tener su propio camino. Entonces ahí estaría claramente un parámetro para medir aquello que tantas veces repetimos: yo soy libre en la medida quién está delante de mí es tan libre como yo.
Si no, no hay ni explicación ni justificación, si quien está conmigo, lejos o cerca, no es tan libre como yo para tomar cualquier tipo de decisión, hasta de las más simples, esto no sirve, no se da; pero midan ustedes cuándo el ser humano puede decir con total responsabilidad, claridad y entendimiento. Yo tengo que partir siempre de una base, debe decir el hombre: que todos aquellos que están cerca de mí tienen que ser tan libres como yo, suponiendo ¿no? que yo sea libre y no esté condicionado por tantas cosas, pero incluso dentro de esos condicionamientos tengo que ver..., tengo que ver…, que de acuerdo a lo que yo considero posible el otro también lo considere, entiéndase bien todo esto porque cuando se escuchan Mis Mensajes Yo veo que muchos sacan harina para su propio molino o de su propio molino; no es lo aconsejable, ni es lo conveniente, ni se está en la verdad. Tenemos que llegar a ser tan simples y tan humildes como para entenderlo todo, solamente con una mirada, si eso no se da así no se da.
Uno escucha hablar a tantos con diversos argumentos para enseñarle al hombre cómo vivir y recalcan tanto las cosas y le ponen tanto énfasis, hasta en su forma de decirlo, que directamente no convence a nadie y lamentablemente son mayoría, no digo absoluta pero casi.
Ustedes vieron que siempre está en juego, siempre, la mayor o menor posibilidad concreta de que el hombre viva su libertad.
Si tiene hambre no puede ser libre.
Si está amenazado no puede ser libre.
Si está condicionado por factores de los más diversos no puede ser libre.
Entonces ¿quién está obrando bien?, no sé, piénsenlo ustedes, saquen sus propias conclusiones.
¿Entonces quiere decir que nunca el hombre puede tomar o tener una acción o asumir una actitud?.
Como lo conveniente, lo que corresponde, de acuerdo a la cantidad de luces que tenga en ese momento, pero la ingesta de mucho licor o no tanto altera, el comer demasiado altera como el no comer.
Debe el hombre procurar dentro de esa aspiración a la humildad y a la simplicidad tener la menor cantidad de condicionamientos posibles y el hombre sabe cuándo está condicionado y cuándo no, el hombre sabe, hablo en general siempre, el hombre sabe cuando su acción realmente está obedeciendo al dictado de su conciencia, así como sabe por supuesto cuando está obrando mal; ustedes dirán: pero quiere decir que todo tiene que pasar por este tamiz de análisis, y sí, no solamente se los digo Yo, pueden también tomarlo de unos hombres que han vivido realmente o viven realmente.
Es cierto que a las personas les gusta que uno les de cómo anticipos de la otra vida, de la seguridad en la otra vida, cuando Yo dije por ejemplo que no habría que hablar de la muerte sino de un cambio de estado, de otra forma de vivir, otra forma de vida. No sé si se me entendió, ocurre que muchas veces a uno le parece que comprende pero esa comprensión está sumamente limitada ¿mmm?. Yo preguntaría: todas las Revelaciones que se hacen de la otra vida, sea de las almas que están todavía en la oscuridad o de las que ya no están o de los Santos, ¿cuántos son los que realmente creen en eso?, ¿cuántos realmente no piensan que son historias lindas como para que el hombre pueda seguir luchando a pesar de todo?, y sí, está muy lindo pero son como cuentitos que se le hace a los niños, mientras que no deberían pensar así por la simple razón que es el Hijo de Dios y Dios mismo que se los está diciendo.
Por ejemplo, la palabra del Señor es una pero la palabra del Señor puede ser oída o bien directamente por las Sagradas Escrituras o bien a través de Revelaciones, por qué tanta prudencia, vamos a llamarlo de alguna manera, para recibir la palabra del Señor. Díganme, cualquiera de los que leen o escuchan estos Mensajes, si tienen un poquito de entendimiento, de discernimiento, se dan perfectamente cuenta la coherencia, lógica, psicológica, moral, teológica y más aún que todo esto tiene, pero se apela a las actitudes demasiado humanas, y al decir así digo, demasiado racionales para querer explicar tantas cosas.
La verdad se ve decían en la antigüedad y no tan en la antigüedad, la verdad es evidente pero ¿por qué uno no alcanza a verla?, porque no está sustentado por una actitud noble, pensando que en el prójimo puede darse la excelencia en las formas de pensar, de decir, de hablar y más aún, por qué no pensar que si se está diciendo que el Espíritu Santo sopla donde quiere ¿por qué no pensar que en cualquier humano puede estar la palabra Mía?.
Es muy grave esto y a veces esperan de Mí grandes palabras pero no se pueden decir tantas palabras o grandes, ¿verdad?; si no se entiende esto que es esencial, y ustedes van viendo que a medida que pasan los años, de acuerdo a los objetivos que Yo me impuse fueron diciéndose las cosas con un alcance cada vez más profundo y cada vez más concreto, respecto a como dije los objetivos que se persiguen.
Los seres humanos lamentablemente están como sujetos a escuchar palabras grandilocuentes, todos o muchos quisieran que Yo diera seguridades respecto a si va alcanzar toda la Tierra para cuando haya muchos más habitantes, o también por qué no, cómo es posible que haya tantos en la Bienaventuranza Eterna, ¿no se llena el espacio?. Algunos están ansiosos por las respuestas a esos interrogantes, así como eso tantísimas cosas más, pero ¿qué ocurre?, desde la perspectiva en que se razona y se mira, no puede haber una respuestas así coherente con la realidad, ¿por qué?, porque se están manejando realidades distintas a las que el hombre puede acceder tan fácilmente, por eso leen expresiones Mías de años atrás y dicen: mirá, el Señor dijo esto y se cumplió; pero Mis queridos, es más que sabido que el Señor sabe todo lo que va a pasar en el mundo, está midiendo incluso como va a evolucionar la libertad del hombre o las consideraciones que el hombre haga sobre la libertad o como viva esa libertad.
Por eso este tema de la libertad en la mayoría de los ambientes, a veces muy culto, a veces no tanto, a veces “ambientes iluminados” entre comillas o no tanto; se escapa a la consideración de la libertad del hombre y hay siempre un temor muy grande a dar libertades al hombre. Por eso cada uno desde el lugar que detenta, un poco o mucho poder se vuelve hasta tirano cuando llega el momento de concederle al otro libertad.
¿Por qué ese miedo a la libertad? si es la esencia de todo, ¿por qué necesariamente tenemos que pensar que al ser libre el hombre va a cometer acciones que no convienen?, ¿por qué ese miedo a la libertad?, es que todavía no se ha entendido todo esto y mientras esto no se entienda, no se avanza y sino miren el mundo como está, todos quieren poner el pie sobre todos los que integran la parcela de personas o tierra a la que tienen acceso. Es decir, se vuelven como “guardianes”, entre comillas, de la verdad; por supuesto que tampoco es tan simple esto pero terriblemente mas simple de lo que lo presentan todos y además es preferible que alguien cometa cosas tal vez no adecuadas por ejercer su libertad que no haga nada o se reprima, ¿mmm?..., por quedar bien o no salirse de ciertos moldes o parámetros, no. Tiene que llegar el momento en que lo que decíamos antes: quien tengo delante tiene que ser libre, en consecuencia yo soy libre en la medida que el otro es tan libre como yo, sino no se puede decir: pertenezco al Señor, porque de una u otra forma me estoy poniendo en censor del otro, el gran drama de la humanidad a través de los tiempos, siempre, sometedores y sometidos, a veces adornados con todas las cosas posibles, los lujos posibles, pero siempre exactamente lo mismo, siempre lo mismo, hay una opresión. Ustedes dirán: pero volvemos a hacernos la pregunta: ¿estamos ante un Señor que todo lo permite?, si uno está basado en el amor pero no como factor condicionante y uno entiende estos problemas no se equivoca, porque nunca nada se echó a perder por exceso de libertad, sin caer en ninguna otra forma en la que puede degenerar la libertad, no, ¿por qué?, porque en primera y última instancia los hombres manejan leyes y se manejan con un tipo de justicia, claro, pero en primera y última instancia el autor de todo es el que maneja.
Por eso, cuántas veces dijimos: cuando lleguen a la Bienaventuranza Eterna no se extrañen si en los primeros lugares contemplando el Señor están aquellos que tal vez ustedes menospreciaron y creyeron que eran los últimos en la consideración del Señor y no. Díganme, de qué valdría hablar en profundidad sobre la multiplicación de las dimensiones, el ordenamiento cada día mas perfecto de todo lo que ocurre en la Tierra, el ordenamiento en cuanto a como se logrará para que no se termine el agua o el petróleo o los bosques que purifican el aire, ¿de qué valdría dicho en este momento?, aunque algo puede a veces adelantarse, pero ¿de qué valdría esto como tantos otros problemas?, si como la libertad no se usa en forma adecuada; entonces se estaría aprovechando lo que Yo estoy diciendo para oprimir de otra manera, tal vez más sutilmente pero opresión al fin y quien obra oprimido su conducta no tiene valor, no hay mérito, porque está condicionado por la opresión de alguien, cada uno tendrá que preguntarse en su interior ¿no?: ¿por quién estoy oprimido?, y más aún: ¿a quién estoy oprimiendo?.
No es cuestión tampoco de buscar cosas químicamente puras, porque el ser humano tiene tantos matices diferentes, no hay una normalidad común, hay normalidades individuales; entiéndanlo bien eso, no hay una normalidad común sino normalidades individuales, mientras no se parta de esta base todas las ciencias, al aplicar sus objetivos, no pueden ser completas ni adecuadas; porque están suponiendo un patrón común de reacciones de los hombres y nunca eso existe, puede haber algunas cosas de patrones comunes pero son contadas; y además siempre tendrán los matices de cada individualidad. ¿Por qué no se entenderán todas estas cosas?, se convertiría todo en algo tan simple, tan fácil, vivir sería tan armonioso, la felicidad sería tan posible.
Preguntarse sobre todas estas cosas y responderse, no estén todavía con aquellos principios elementales; que haciendo esto o lo otro conseguirán esto o lo otro, calen hondo en todo porque no sea cosa que lleguen a la conclusión de que han vivido de una forma equivocada, por supuesto que a pesar de eso Mi Misericordia alcanza para todo, claro que sí, pero despacio porque el que uno viva de manera equivocada hace posible, poco, mucho o un tremendo dolor en los otros, no se olviden nunca de esto. Cuando uno logra analizarse y analizar las cosas que hace, está atendiendo a terminar con las propias opresiones y también, y especialmente, las opresiones de los otros.
Reflexionen sobre todo esto, no lo hagan caer en saco roto, por supuesto dije esto tantas veces desde distinto ángulos, y seguiré diciéndolo porque es esencial, ¿por qué no terminamos repitiendo lo que ya dijimos dos veces?: yo soy libre en la medida que el que está delante de mí es tan libre como yo sino yo no lo soy.
Amén.