Oración del 19 de Enero de 2005
Habla Artemio:
Nos ponemos delante del Señor con todo nuestro fervor, por supuesto que saben que en este lugar a Él le gusta que yo me siente porque como todo esto lo ordenó su Mamá, entonces esta agua que cae, según la Madre, es el Río de Agua Viva que sale del Corazón Misericordioso de Jesús, el Río de Agua Viva significa el Espíritu Santo que siempre está hablando en nosotros, en nuestra conciencia y que si realmente nosotros somos dóciles le podemos escuchar para que nos oriente en todas las cosas. A Jesús le gusta este lugar porque, esta fuente le recuerda el paso del Mar Rojo, le recuerda la peña de Horeb que Moisés tocó para que saliera agua y alimentara, perdón, sacara la sed del pueblo hebreo que caminaba por el desierto, después le recuerda el Bautismo en el Río Jordán y siempre, toda la..., la forma de vida, toda la trayectoria del Señor, los milagros, todo está muy emparentado con el agua, ya esto es histórico, incluso antes de Jesús las personas tenían una especial devoción por el agua y además el agua es el elemento primordial en nuestro cuerpo ¿mmm?, el ochenta o más por ciento de nuestro cuerpo es agua. El primer milagro de Jesús es transformar el agua en vino en las Bodas de Caná de Galilea, a pedido de su Madre, la Virgen. Por eso, el agua siempre está muy relacionada con la salvación del hombre y en este caso la Madre quiso esto porque recuerda el Río de Agua Viva que sale de su Hijo, del Corazón de su Hijo, que es una forma de decir el Espíritu Santo, bien.
Vamos a pensar un poquito en todo lo que nos pasa, en la vida nos ha ido de una manera, nos fue de una manera siempre, hemos nacido en un lugar, en una familia, en un tiempo, hemos tenido familiares, amigos y muchas personas que nos marcaron para siempre, entonces todo esto debe ser especialmente revisado por uno pensando que todo lo que se relacionó, todo lo que influyó en nosotros tiene mucho que ver en nuestra vida, e incluso tiene que ver, yo diría especialmente, en nuestras enfermedades, es por eso la necesidad de hacer una revisión del pasado para ver si no hay algún elemento que nos esté perjudicando ahora.
Todas las enfermedades que tenemos no necesariamente vinieron por el ambiente que nos rodeó pero si no fue por eso seguramente es por herencia porque nosotros traemos dentro del patrón genético un montón de elementos, genes que traen las enfermedades del pasado, a lo mejor de muchas generaciones antes, entonces hay necesidad de pedirle al Señor que corte todo lo que se refiera a nuestro pasado para de esa forma sanarnos rápido de lo que nos pasa. Es decir, mientras no haya la acción del Señor sobre nuestro patrón genético, por más que nosotros creamos que se pueden pasar las enfermedades no se pasan, vuelven, pero cuando el Señor actúa con su Misericordia sobre todas esas bases que nosotros traemos en nuestro organismo entonces allí es cuando uno se sana, porque si así como heredamos el color de los ojos, hasta la forma de caminar, la estatura, la cara o lo que sea de los padres o de los antepasados, piensen ustedes mucho más todo lo que sea enfermedades ¿mmm?, bien.
Entonces la primera consideración que le hacemos a Jesús es que mire nuestro pasado, se fije en el momento en que nosotros nacemos, o más aún, en el momento en que hemos sido engendrados y también que mire a nuestros padres y a los que vivieron antes, todo aquello que hemos heredado, que a partir de este momento quede totalmente destruido, lo malo por supuesto y que nuestra descendencia no tenga que sufrir las consecuencias de una herencia dañina; ustedes dirán: y aquellos que lo hicimos ya varias veces ¿lo seguimos haciendo?, y sí, porque a veces uno no termina de sanarse y por otra parte también uno puede hacerlo para los de nuestra familia o aquellas personas que amamos y que no están aquí, que están lejos o en su casa ¿eh? y necesitamos que para ellos también el Señor le alcance con su Misericordia ¿mmm?.
Entonces pensemos en la necesidad de someter todo nuestro pasado a consideración del Señor para que Él los sane de todas las cosas que no están bien y por supuesto también nuestra descendencia. En una Revelación Jesús fue muy claro cuando dijo: “si todos los Sacerdotes desde el púlpito hicieran la sanación de la herencia terminarían con muchas enfermedades y además tantos niños infradotados, es decir mal que nacen ya no nacerían” ¿mmm?. Por ejemplo, ustedes conocen los chicos dawn pobrecitos, bueno, los niños dawn es porque nacen..., todos nacemos con veinticuatro pares de cromosomas, los niños dawn nacen con veinticinco y si nosotros nos encomendamos al Señor para que eso no aparezca, porque es un error de la naturaleza ¿mmm? entonces no habría chicos dawn, lo dijo Jesús en una Revelación, tengamos en cuenta sus palabras porque Él nos ama entonces está siempre como previendo, previniendo todo para que podamos estar en paz, vivir felices, sin dramas, sin problemas y que ninguno de nuestra familia esté cercado por cualquier tipo de enfermedades.
Sí Señor, así estamos en este día y todos los días a que alcance nuestra vida Jesús, además Señor tenemos que revisar en nuestro pasado, porque todos sabemos más o menos cómo fue en nuestra casa, en nuestro hogar, sabemos como se portaba papá con mamá, sabemos si hubo golpes o no hubo golpes, sabemos hasta que punto mamá pudo haber sido como una esclava dentro de la casa a través de los años ¿verdad?. Entonces, todas esas cosas uno las vivió de una forma o de la otra, ya en la panza de mamá o más adelante, si nosotros queremos sanarnos tenemos que ser muy realistas y presentarle al Señor todo aquello que no está bien en nuestra vida, no porque busquemos culpables, nada que ver, sino porque necesitamos encontrar las causas de nuestros problemas. También tenemos que revisar todas aquellas cosas que a lo largo de nuestra vida fueron pasándonos, cuatro cosas son esenciales que parecen ser el origen de montones de enfermedades, son: el odio, el miedo, los complejos, por supuesto que muchas cosas pero estas son fundamentales, el odio, el miedo, todo lo que fue pasándonos en nuestra vida a lo largo del tiempo, todos nuestros complejos ¿mmm?, además la necesidad de perdonar todo aquello que nos hicieron. Cuando uno habla de revisar la vida la mayoría cree que uno está señalando los defectos que cada uno pudo haber tenido, mis queridos, entendámonos, el Señor sabe de nosotros todo e incluso antes, incluso antes de que nosotros obráramos mal Él ya nos había perdonado, porque Él sabe que cuando no obramos bien es por algún motivo: enfermedad, tontería, estupidez, presionados por los demás, acusado por los otros, viviendo una vida tantas veces miserable, bueno, tantísimas cosas.
Entonces, no, aquí no es cuestión de pensar qué hicimos de malo porque no está en nosotros eso, dentro de la Misericordia del Señor piensen: Él ya lo perdonó todo, lo sanó todo pero ocurre que nos falta aún pensar si el odio no nos hizo daño ¿mmm?, el miedo, las broncas, el resentimiento y por supuesto los complejos, quien no se sintió que tenía la nariz larga, cuando se tiene quince años o catorce y se tiene algún defecto en el cuerpo: que la nariz, que las orejas, que si se es gordo, que si se es flaco, que si se lleva lentes, no se lleva lentes, los demás se encargan en señalarnos nuestros problemas y allí se originan montones de cosas que nos hicieron mucho daño, muchísimo daño ¿mmm?, hay gente que se mira al espejo y no se puede mirar porque su figura tal vez sea un poquito gorda o muy flaca ¿mmm?, o porque su cara no es lo ideal según las revistas. No se mira tanto en todo lo que tiene uno interiormente, se mira más en lo que aparece por fuera ¿mmm? y si no díganme sino, cuando se acerca el verano todo el mundo empieza a cuidarse, a mirarse, a tostarse, que se yo para ir de vacaciones y estar a tono con los demás, es un quemo hacerse ver con el cuerpo blanco como un chorro de soda ¿verdad? y así estamos en el mundo ¿no es cierto?, entre todas esas pavadas pero que a veces dominan nuestra vida, entonces conviene revisar a quienes odiamos para perdonar..., para aquellos que nos odiaron para perdonarlos ¿mmm?, aquellos que nos hicieron sentir miedo ¿mmm?, detrás de los miedos de hoy hay miedos en la niñez ¿verdad?, hay miedos en la niñez, miedos en la adolescencia ¿verdad?, entonces todo tiene una explicación en nuestra vida, nada es porque sí, tengámoslo en cuenta ¿mmm?. Yo supe decirles alguna vez de una señora que me visitó y entonces yo le dije: querida, para sanarte de tu problema vas a tener que, bueno, sacar de tu vida todo el odio que tenés, y a quién me dice, y a tu nuera, porque se casó con tu hijo esta chica y era hijo único y vos confundiste los tantos y la odiaste siempre porque creés que te arrebató tu hijo y al rato terminó por reconocerme que era así, todo eso ¿en que había terminado?, se fue a su cuerpo y tenía una artritis deformante que le estaba minando todo su cuerpo ¿verdad?. Es decir, la mayoría de nuestras enfermedades, no todas, tienen origen psíquico y sino piensen en las úlceras, piensen en todos esos problemas que ¿mmm? vienen a consecuencia de no dormir bien, de estar lleno de estrés, etc., etc.
Entonces, el Señor quiere que haya orden en nuestra vida y para que haya orden tenemos que nosotros destapar todas aquellas cosas del pasado ¿mmm?, por ejemplo recién dije además del odio, el miedo, cuántas veces los chicos se asustan entre sí, se esconden para salir detrás de algo y asustar a sus compañeros, o bien por ejemplo, también sucede que a veces en los pueblos aparecen ciertos personajes disfrazados que también generan miedo ¿eh? y no solamente eso sino hasta en el mismo parto, a veces un parto muy riesgoso, etc., que la mamá tenía mucho miedo la criatura recibió todo eso ¿verdad? y no hablemos si el parto fue hecho con fórceps, ustedes dirán: eso ya no existe, cómo que no existe, o bien fueron partos difíciles, partos secos, a mi no se me pasa el dolor de columna dice alguien, bueno, perfecto, hay que ver si tu parto fue seco o no, porque todo eso de salir de esa forma así tan dificultosa de la panza de mamá dejó como consecuencia todo un montón de heridas. Una señora del grupo de oración cuando llegó aquí tenía un asma muy grande y ustedes dirán: y cómo tenía eso, bueno, porque a ella la abandonaron en una obra en construcción cuando tenía un día o dos y se pasó todo un día ahí, no le hizo mal el frío sino le hizo mal el polvillo de la obra en construcción, ese era el origen de su asma ¿verdad?, bueno.
Entonces seamos conscientes, además dije recién: el tener odios, rencores con el pasado, personas que nos hirieron y nosotros decimos: ah, no, yo no le perdono, eso va en contra de nuestra salud. Tengamos en cuenta estas cosas, y los complejos, quien no tuvo o tiene algún complejo: de alto, de bajo, de gordo, de flaco, de buena presencia, de mala presencia, que no tiene lola, que le sobran las lolas, todo un montón de problemas, de complejos ¿eh? y cada uno quiere estar a tono como las revistas dicen, a veces están de moda un tipo de cuerpo o a veces otro ¿eh?, todo revela una falta de vida espiritual, no puede ser que uno se destaque por ser delgado o más gordito o rellenito, en todo caso uno tendrá que destacarse si es bueno, si es honesto, si es honrado ¿verdad?, bueno.
Entonces, pongamos a consideración del Señor, incluso sigámoslo en nuestra casa ¿no?, enumeremos todas aquellas personas que nos hicieron daño, incluso incluyendo a nuestros padres, pobrecitos ellos hicieron todo lo mejor pero a veces lo mejor para ellos no fue lo mejor para nosotros ¿eh?, entonces hagamos una lista para no dejarnos nada afuera ¿verdad?, y decir: bueno vamos a perdonar este, pobre, busquémosle la causa, no sabía por eso me hizo esto, este otro..., estaba tan envidioso de mí que me amargó de esta forma, este otro era tan celoso de mis otros hermanos que me trajo todos estos problemas. Mirá, las personas en un instante cuando se ponen delante de uno vos podrías enumerarle, porque tienen, parecería pintado en el rostro todos los dramas que vivieron a lo largo de toda su vida, eso es lo que nos pasa ¿mmm?.
Entonces, el Señor nos creó con orden, orden y si nosotros hacemos que haya orden en nuestro cuerpo y en nuestro espíritu todo será diferente, todo será distinto, tanto que Jesús dice: “aquél que puede lograr un orden dentro de su ser es alguien que se morirá de viejo, no por enfermedad, como lo que corresponde, la enfermedad es desorden dentro de la naturaleza, pensémoslo eso, que viene de los antepasados, que viene por las cosas que nos ocurrieron, que viene por esto, que viene por lo otro, sí ¿mmm?, pero entonces habrá que liberarse, pedirle al Señor que aplique su Misericordia sobre todas las cosas que nos pasaron, ¿quién no tiene problemas en la columna vertebral?, bueno, yo he encontrado a tantísima gente que su odio, su resentimiento, los problemas que pasó somatizaron, es decir se metieron en el cuerpo ¿eh? y quedan allí como dolores ¿mmm?.
Bueno, ¿tanto dirán ustedes?, incluso uno ve a veces por la calle personas que se van encorvando ¿no?, y uno se da cuenta perfectamente que tantas responsabilidades en su vida, que tanto sufrimiento termina por encorvarlos ¿mmm?, eso le pasa incluso a los hombres de estado a lo que tienen tantos problemas que resolver y no es nada más que ver que la historia se repite, porque ya en la antigüedad, Atlas, ese personaje mítico ¿no? estaba encorvado porque tenía el mundo sobre sus espaldas, ¿ven?, todo está en todo, todo se relaciona con todo y si le buscamos la vuelta a las cosas las encontramos ¿eh?.
Entonces pongamos delante del Señor todas las cosas que nos ocurrieron a lo largo de los años, lo que nos pasa actualmente, a veces amores a contramano o bien estafas en el amor, en la pareja, en todo ¿mmm?, evidentemente no se puede vivir de esa forma, hay que poner un límite a las ofensas que nos hacen, a las estafas que a veces nos hacen sufrir, sobre todo a las estafas en los afectos, no se puede vivir cuando uno es traicionado, no se puede vivir así, las cosas tienen que blanquearse porque terminan con nuestra salud.
Tengamos en cuenta todo esto y mucho más todavía ¿eh?, habría que pasarse días enteros pensando hasta qué punto ¿no es cierto?, somos la suma de toda la forma de irnos en nuestra vida, pensémoslo seriamente. Entonces le decimos a Jesús con toda nuestra fuerza, con todo nuestro amor: Padre Nuestro, ven a mi vida Señor y pasa sanando todas aquellas cosas que no están en orden dentro de uno Señor, haceme ver Jesús aquello que necesito ver para arrepentirme, para perdonar, mostrame las personas que me hicieron daño, aquellos que se acercaron a mi vida y me hicieron tanto mal, quiero perdonarlos Señor y además quiero poner en orden todas estas cosas, por supuesto que no solo estoy pensando en ustedes sino estoy pensando en aquellos que dejaron en casa, o en parientes o en personas que ustedes aman ¿eh?. Cuántos dramas traen en una persona una violación en la niñez ¿verdad?, es terrible todo lo que trae pero también es terrible pensar que no hubo cerca alguien que espiritualmente haya aconsejado a esa persona que tiene que llegar un momento en que hay que perdonar al que nos hizo daño porque sino eso va a terminar con nuestra vida, no hay vueltas ¿mmm?. Claro, pero el perdón no, ya sé que no es fácil sobre todo cuando son cosas muy gordas ¿no?, pero hay que hacer esto: Señor, yo quiero perdonar, ayudame a perdonar porque no me es fácil Señor perdonar, sobre todo cuando tanto daño hicieron los demás, con la lengua, con palabras, con acciones, con todo tipo de cosas ¿mmm?. Hay personas que de repente se dan cuenta que parece que... (se dio vuelta la cinta) ...
Se corta la grabación..........