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Mensaje del 28 de Noviembre de 2004

Asi que aquellos que están en la vereda del frente todavía, ignorando Mi Misericordia Yo les diría: ¿con qué derecho lo hacen?, no se los digo como reproche, se los digo con mucho dolor.

Mensaje del 28 de Noviembre de 2004

Habla Artemio:

En una actitud de humildad cerramos los ojos, no necesariamente tiene que ser cerrar los ojos, puede que uno lo haga con los ojos abiertos, yo digo algo nomás ¿mmm?, pero a veces cerrando los ojos nos podemos concentrar mejor ¿mmm?, bien.

En este domingo de Adviento, el primero en el calendario litúrgico de la Santa Madre Iglesia, un día después de haber conmemorado una Festividad de la Madre, en la advocación de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción de la Medalla Milagrosa, un nombre muy querido por la Virgen y hay motivos por los cuales es muy querido, como les dije, la redención del hombre empieza ese día y además la Virgen dijo que: “cuando uno habla de la Inmaculada Concepción los Cielos y la Tierra tienen una profunda alegría”, que es justamente la alegría de los que aman, porque si ese día comienza la redención del hombre eso es bienestar para el hombre ¿no?, y en consecuencia es una manifestación del Padre de enviarnos a su Hijo. Pero Señor normalmente tenemos estas cosas no olvidadas pero, demasiado pensadas Señor y en realidad lo que importa no es que pensemos tanto, lo que importa es que amemos mucho Señor y además no se te puede entender Señor si uno no entra en la dimensión del amor. Uno a veces piensa Señor: cuando uno se siente amado por otro ser como nosotros, que bien que uno está y vos nos amás tanto Señor, de una forma tan grande que uno nunca alcanza a entender cómo puede ser tanto, cómo puede ser, entonces repito, que no nos llene de gozo y de alegría, de gozo y de alegría todo el amor que nos tenés Señor, si uno tomara un poquito de conciencia nada más de esto empezaría a los gritos de regocijo.

Señor es tan maravilloso que un Dios de amor se nazca, viva, se entregue, muera, resucite por uno y uno vive como si lo ignorara. Ahora bien, enseñame Señor porque a veces uno llega a la altura de la vida y lamentablemente todavía no sabe las cosas esenciales; sí, es cierto, que uno siempre creyó Señor en vos, pero el problema no está en creer Señor, porque eso es muy fácil, el problema está en que yo eso lo sienta con mi corazón; es decir, sienta que tu mirada está en mí para darme todo, así como el día en que empecé a vivir en la panza de mi mamá, vos me miraste al rostro, a los ojos, me llamaste por mi nombre y también en ese instante me recordaste que ya desde el comienzo de los tiempos ya me amabas Señor, ya en tu mente de amor yo tenía existencia Señor y de repente vos me lo decís, llamándome por el nombre, mirándonos a los ojos, para infundirnos la vida y todo lo que representa ser un proyecto tuyo Señor, porque uno lo reconozca o no, y tal vez ahí esté el problema, uno es tu proyecto Señor, vos apostate con nosotros Señor cuando empezamos en la panza de mamá, apostate a nosotros, dichosos si pudimos continuar viviendo. Señor, yo estoy convencido que al apostar por mí hiciste lo mismo por todos los seres humanos, entonces cómo es posible Señor que en provincias argentinas como Jujuy, de cada mil niños que nacen solamente diez llegan a adultos, normales, el resto queda en el camino, si llega a adulto no es normal.

Señor, esto me hace pensar ahora en vistas de la Navidad ¿mmm?, quiere decir que uno tiene todos los privilegios, ¿y todos los demás qué?, novecientos noventa se mueren antes de tiempo, tu redención fracasa Señor ahí pero no fracasa porque vos querés que fracase Jesús, fracasa porque los hombres tienen tanto desorden que esos niños no pueden llegar a adultos, te digo algo Señor, tomé un ejemplo entre tantos. Por un lado Señor tomo conciencia de todo lo que me amás y por el otro también tomo conciencia de que tengo el privilegio que me amás, entonces esto no puedo desperdiciarlo, tengo que vivir bien porque tengo que responder Señor a todo lo que me amás, pero no como una frase más Señor sino porque en mi corazón veo que eso es así, no tenemos ganas de fallarle a quien nos ama, nunca, y si lo hacemos es porque estamos enfermos, mal o que se yo pero sino no le fallamos, ¿y todo esto Señor tiene algo que ver con mi vida, con mis cosas y con todo?, es una forma de preguntarte Señor porque ya sabemos que sí ¿mmm?. Quien ama a alguien le da todo lo mejor y si vos nos amás Señor con un amor tan enorme tenés para nosotros pensado todo lo mejor, ¿pero qué ocurre?, es como cuando uno está en medio de un río y se muere de sed, el agua nos rodea y casi nos tapa, es decir tu amor y no lo tenemos en cuenta.

Pero esto fue hasta hoy Señor, porque vos prometiste que quien llegaba a tus pies en este ligar ya nada sería igual y aunque la persona no quiera ya nada es igual, Señor porque hay algo fundamental que es lo siguiente, así como funciona un virus contagiando, así como funciona la luz que todo lo alumbra, cuando vos entrás en la vida de alguien Señor de repente uno se da cuenta que se transformó todo, ya lo que mirábamos antes de una manera lo miramos de otra, ni siquiera tenemos nostalgia del pasado Señor, cuando uno saborea tu amor ya no se vuelve más atrás, porque Señor nadie es tonto, en el sentido de despreciar o dejar de lado aquello que le hace feliz, sí Señor.

Por eso, en la sanación de mis problemas, en terminar con mis angustias, el terminar con mis cargos de conciencia, el decir basta a todas las broncas y aquellos que a lo mejor me tienen atado al pasado estás vos Señor en medio para decirme: todo esto ya terminó, ¿y por qué?, y necesariamente como un fruto del amor Señor, por ahí alguien dice que el amor es ciego pero es un ciego traslúcido y aunque lo fuera Gloria a Dios de que lo es.

Señor, si es cuestión de decirte cosas uno estaría hoy, todos los días a que alcance la vida, pero Señor por ahí hay necesidad que las cosas se repitan, porque es una buena técnica el repetir, porque a veces el repetir convence, sí Señor. La verdad Jesús si es que miro mi vida, la verdad que tengo poco bueno que contar, no sé si viví o la vida me vivió a mí, no sé a quién tuve cerca ni por qué, tal vez hay toda una sucesión de acontecimientos en la vida de uno, que en última instancia no saben por qué pasaron, pero genuino, genuino, es decir auténtico hay muy poco Señor y si tengo que hacer un balance de quienes son en los que tengo que confiar, por lo menos hasta hoy no son tantos Señor y a veces en los que tengo más cerca peor todavía.

Como algo obvio Señor, como algo que cae por su propio peso, uno llega a la conclusión de que lo único auténtico, genuino, que dura a través del tiempo, que permanece, es el amor que nos tenés Señor. Por eso en este día Señor, humildemente te digo: hacé descender Señor sobre mí toda tu gracia, me parece Señor que hace tiempo que estoy pensando que a mi vida le hace falta un milagro o varios y también es cierto que si alguien dice que no está mintiendo, todos necesitamos y andamos muy necesitados de que haya milagros en nuestra vida, milagros en todos los órdenes. Quiero que mis noches Señor no sean tan solas y tristes, quiero que mi enfermedad deje de minarme el cuerpo y desaparezca. Se entiende Señor que no te estoy pidiendo solamente para mi sino para todos aquellos que amo y que están pasando por mi mente en este momento y que tal vez estén en una cama de Hospital todo conectado con tubos y otras cosas, que en apariencia están muy lejos de una vida feliz, todos Señor en este momento los tengo en cuenta y cada uno de mis hermanos también los tienen en cuenta, sería demasiado simple y egoísta pensar nada más que en uno.

Señor Jesús, si miro hacia atrás y contemplo todo me da un poco de miedo Señor, porque estuve tan desprovisto de todo, los demás creían que no pero yo sé lo que sentí siempre Señor, lleno de temores, miedos, angustias, preocupaciones, no saber qué va a pasar mañana, no saber si alcanza el pan, no saber por qué nadie me ama, nadie me tiene en cuenta, nadie repara en mi ni siquiera aquellos que deberían. Señor, hay necesidad que tengas compasión por eso te lo digo como un grito desesperado: ¡Jesús de la Misericordia ten compasión de mí!, Jesús de la Misericordia ten compasión de mí y te lo repetiré tantas veces como sea necesario Señor: Jesús de la Misericordia ten compasión de mí, y también agrego Señor que tenés que tener compasión de todos aquellos que amo y están tan necesitados de todo.

No puedo entender mi vida si no es en función de los demás Señor, hasta hoy creía que no pero hoy entendí que sí, ¿y qué quiere decir en función de los demás?, y simplemente cuando uno ama cambia de lugar el alma o como alguien decía una vez Señor: que amar es nunca tener que pedir perdón, parecería como si de repente Señor caigo en la cuenta de que todo era más fácil de lo que yo creía, de que mi cáncer, mi problema de corazón, mi artrosis, mi cuerpo deformado, la vejez que se asoma en cada una de mis partes del cuerpo, al último no es nada Señor, porque vos mirás cada una de las enfermedades con el propósito de decir basta. ¿Qué veo yo en este momento?, o mejor dicho: ¿qué me hacés ver que tengo que recalcar?, por lo menos Señor, en los que están aquí, en los que aman y en los que uno tiene que pedir por ellos, por lo menos ciento veinte personas con cáncer, cánceres de los comunes, después están los otros más sofisticados pero que matan también. Los problemas del corazón Señor, que arterias tapadas, que válvulas que no funcionan, que ritmos cardíacos que están desajustados, diría por lo menos ochenta, cuando el Señor pone una cantidad en mí, la pone Él no la pongo yo ¿eh?, bien. Próstatas fuera de foco ¿no?, que se llama hiperplasia dicen los médicos ¿eh?, por lo menos ochenta, artrosis, artritis y todas las enfermedades de los huesos y esas cosas, entre los que están anotados y los presentes y los que aman yo diría seiscientos. Después están otras enfermedades que las alergias, que las asmas, que las enfermedades de la piel, no me refiero a los simples hongos que hay en los pies, me refiero enfermedades en la piel que tienen problemas serios. Riñones ochenta también, si a los riñones le unimos todas las vías urinarias incluida la vejiga entonces son ciento veintiocho.
Todas aquellas mujeres que tienen problemas en sus órganos genitales y en las mamas, en este momento hay cuatrocientas veinticinco, entre ustedes, los que ustedes aman y todos los que yo tengo anotados ¿eh?, bueno habría que hacer algún descuento de esta semana que se han sanado. Ocurre que a veces los que se sanan todavía no tienen conciencia de que están sanos y así otras tantas enfermedades Señor pero, el problema más graves de todos los problemas es la enfermedad que produce la falta de amor, que va a recrudecer en estas Fiestas que se avecinan, parecería que se siente más la falta de afecto.

Señor, como podemos hacer para no pensar tanto en nosotros y pensar en los demás, por lo menos un poco. Señor, cómo podemos hacer para llegar a descubrir plenamente que nuestra felicidad no está tanto en todo lo que podemos armar sino en todo lo que armamos en los otros, que como consecuencia será armarlo en uno. Nosotros procedemos al revés Señor, armamos en uno y después armamos lo de los otros.

Señor Jesús, esta tarde, este día y todos los días a que alcance nuestra vida quiero decirte Señor que te amo, no sé, es en forma precaria, chiquita pero Señor es así, todos los días lo estoy descubriendo Señor y sobre todo Señor lo descubro cuando miro a mis hermanos y veo en ellos tu rostro Señor pero aunque vea tu rostro Señor yo los amo a ellos, porque a nadie le gustaría que lo amen porque ven el rostro de Jesús, los hombres y las mujeres y los niños y los jóvenes tienen que amarse no pensando solamente en que ven tu rostro en ellos Señor sino amándolos con todo lo que ellos tienen de humanos Señor, con todas sus deficiencias, sus errores, sus defectos, porque el amor que querés que uno tenga por todos es no poner nunca peros: si, yo te amo pero cuando cambies esto y lo otro, noo, te tengo que amar como sos sino mi amor no sirve para nada, después eso de si cambiás o no ya es problema tuyo, yo te amo como sos, ¿con qué derecho te digo que cambies?, yo te tengo que amar como sos, aunque estés enfermo, triste, no sepas, ignores, no sé, lo que quieras, te tengo que amar como sos, entonces así, cuando te ame plenamente hermano, así como sos, entonces voy a vislumbrar detrás de tu rostro el rostro de Jesús pero te amaré a vos hermano, porque nadie quiere que lo amen porque están amando a otro.

Permitime Señor que hable demasiado sobre esto pero es que no lo tengo tan claro Señor, no lo tengo claro, porque vos me estás diciendo de un amor que yo no conocía Señor, un amor que está comprometiendo toda mi vida, un amor que ya no me deja margen para ninguna otra cosa. Pasa sanando Señor.

Dice Jesús:

Sí Mi querido, Yo paso sanando pero también quiero que sepan que la razón fundamental, la razón fundamental de Mi existencia es todo el amor disponible para cada uno de los hombres.

Hace diez años que estoy acampando especialmente en este lugar junto a Mi Madre y otros Santos, estando en todo el universo por supuesto, para volver a recalcar y dar conceptos nuevos aunque no tanto que le di a Faustina lo sigo acá, diez años es toda una vida, “dichosos aquellos que entendieron el Mensaje de la Misericordia, pobre de aquellos que han permanecido al margen”, ¿por qué, porque serán castigados?, no, porque todavía no viven, están en el mundo como muertos sin sepultura, quien no descubrió Mi Misericordia es un muerto sin sepultura, pero Mi Misericordia puede hacerlos resucitar a cada instante, diez años es toda una vida. Es una pena para aquellos que no escuchan porque no solamente que ellos se privan del amor sino que son los que impiden… (se dio vuelta la cinta) … . En este tiempo de Adviento, de preparación, les llamo a todos los hombres, que conocen Mis Mensajes o no para que ya no pongan piedras en el camino de aquellos que deben conocer estas palabras, porque aunque hablen de conversión están lejos años luz de convertirse si no permiten que Mi amor llegue a todos los hombres, porque uno puede impedir muchas cosas pero nunca impedir que algo bueno llegue a los hermanos.

Asi que aquellos que están en la vereda del frente todavía, ignorando Mi Misericordia Yo les diría: ¿con qué derecho lo hacen?, no se los digo como reproche, se los digo con mucho dolor. ¿Ustedes entienden Mis queridos lo que es pasar a la otra vida y pensar que la Visión Beatífica no será tanta, no solamente en uno sino en todos aquellos a los que se le impidió conocer Mi Misericordia?, es realmente una situación terrible, horrorosa, porque nunca podemos hacer que los demás estén impedidos por nosotros de ver lo esencial, lo verdadero. ¿Esto suena a amenaza?, nunca en la Misericordia del Señor existen amenazas, en esto lo que hay es mucho dolor, no por el mal que hacen sino por el bien del que se privan.

Téngalo en cuenta. Habla ahora San Pío de Pietralcina.

Dice San Pío de Pietralcina:

Yo no quiero hablar demasiado porque ya mi Dios y mi Señor dijo lo suficiente, solamente que le pido todos los días a la Mama Nostra para que ablande el corazón de los hombres a la Misericordia del Señor, yo no sé por qué pero los hombres tienen miedo de la Misericordia, tienen miedo que se perdone demasiado, tienen miedo que no paguen las cuentas como deben, es que la Misericordia queridos hermanos, no tiene en cuenta las faltas, ma el Señor lo dijo tantas veces eso.

Otra vez le pido a la Mama Nostra ayudada por toda las ánimas que están en las oscuridad, ayudada por todos los Santos para que ablande el corazón de los hombres y dejen llegar la Misericordia del Señor hasta todos, ma ustedes saben bien cuanto yo amé siempre a la Mama Nostra, por eso no solamente yo solo sino todos los que venimos acá desde hace tanto estamos siempre trabajando para que los Mensajes de la Misericordia lleguen a todos los hombres.

Amén.

Habla Artemio:

Cantemos al amor de los amores, cantemos al Señor, Dios está aquí, venid adoradores adoremos…

Fundación Jesús de la Misericordia y Corazón Inmaculado de María  |  Aprobada por Res. 139 A - Gob.de Córdoba – Sec. De Justicia – Dir.de Ins.de Pers.Jur.  |  Dirección: 9 de Julio 1162  |  Teléfono: 03537 – 431197 - 2553  |  Justiniano Posse – (Cba.)

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