No saber dónde termino Yo y desde dónde comienzan ustedes, es lo más hermoso que puede pasar, entonces ya lo que creen maravilloso del Cielo ya se da aquí en forma concreta.

Mensaje del 28 de Septiembre de 2004

Habla Artemio:

...un buen rato está el Señor aquí, sentado en ese asiento que le regaló un hijo de Él, un hombre que tuvo un accidente cerebro vascular y es posible que lo único que tenía en su casa de valor era este sillón y hace unos días se lo trajo para Jesús, como no va a estar feliz Él de estar en este lugar, cómo no puede estar feliz cuando uno de aquellos que Él tocó con su mano, que se sanó le responde con lo único que tiene, a mi me dio no sé si un poco de vergüenza o qué aceptarlo pero tampoco podía rechazárselo, por eso veo que el Señor está tan feliz en ese asiento, tan feliz, ¿por qué?, porque se lo regaló alguien que está muy cerca de Él, muy cerca de Él.

Dice el Señor:

No habría necesidad del Mensaje de hoy pero como debe ser para todos los hombres porque todo lo que estuviste diciendo Yo te lo fui diciendo.

Vuelvo a corroborar, es decir acentuar, es decir asegurar que los amo, que quiero ser eficaz en la vida de ustedes, que no les pido nada a cambio, solo que me dejen entrar en vuestro corazón y permanecer allí; y para eso dirán: ¿qué es necesario?, y ser humilde, simple, amarme, pero no te preocupes de la cantidad de amor que me tenés, dejame que te ame Yo, dejame que te amo Yo, sos Mi hijo, cada uno de los que escuchan o leen este Mensaje es Mi hijo y en consecuencia con eso todo está dicho. Un padre quiere para su hijo siempre lo mejor y Yo eso es lo que quiero para ustedes pero no hoy solamente sino siempre, porque Mi compromiso con ustedes no es de un día o dos o porque me cumplan alguna vez, no, es desde siempre, desde el comienzo de los tiempos que ya estaban en Mi memoria hasta toda una eternidad donde gozaremos juntos la vida feliz que le espera a cada hombre, sí, del otro lado, pero también feliz aquí porque sería muy cruel de Mi parte si Yo te dijera: sufrí Mi querido porque te espera un Cielo hermoso, no, ya tenés que ser feliz acá, ya, aquí tenés que curar tus enfermedades, sanarte de todo, poner todo al día para que puedas estar bien.

Esta es la vida de un cristiano, cuando ustedes no llegan a comprender hasta dónde llego Yo y desde dónde comienzan ustedes, cuando han comprendido eso, cuando pueden intentar medir eso ya está todo dicho, el resto, los demás hombres en cuanto a lo que pueden opinar siempre son de palo, los demás hombres no son de palo para que nosotros le demos todo el amor del mundo pero sí son de palo cuando quieren desviarnos de esta relación que Yo quiero tener con cada uno de Mis hijos. No saber dónde termino Yo y desde dónde comienzan ustedes, es lo más hermoso que puede pasar, entonces ya lo que creen maravilloso del Cielo ya se da aquí en forma concreta, ya podés esta noche cuando te acostás saborear la dulzura de lo que es que Yo esté junto a vos, te tenga en el hueco de Mi mano o en lo profundo de Mi Corazón, para el caso es lo mismo, porque lo fundamental es que sientas todo lo que te amo.

Vuelvo a repetirte, si quedaron todavía basuritas en el ánimo o alguna cosita por ahí que quedó enredada que no está clara, contámela y decime que lo sane porque es lo que estoy esperando. ¿Verdad Mi querido que están..., que estás sintiendo Mi afecto?, ¿verdad todos ustedes y hombres que me escuchan o leen, verdad que están sintiendo cuánto les amo?.

Puede el hombre pedir algo más en la vida que estar nada menos que en el hueco de la mano de su Creador y esas gotas de agua como dijeron antes, sí, es la asistencia constante del Espíritu Santo que llega hasta ustedes y les da todo lo que necesitan, sepan escucharlo.

Les amo, les amo profundamente, les amo profundamente.

Amén.

Habla Artemio:

La Madre no habló pero ella siempre quiere que les recuerde, siempre quiere que les recuerde lo que hace todas las noches con nosotros, como..., nos transforma como si fuéramos niños chiquititos, inocentes, puros, limpitos, nos toma en los brazos y nos dice...

Dice la Madre:

Arrorró mi niño, arrorró mi sol, arrorró pedazo de mi corazón, arrorró mi niño, arrorró mi sol, arrorró pedazo de mi corazón.

Sí, Mi querido, esto es lo que te digo todas las noches, agudizá tu oído porque Yo siempre te doy Mi protección total y completa en estas palabras acunándote en Mis brazos: arrorró mi niño, arrorró mi sol, arrorró pedazo de mi corazón...

Se corta la grabación.....................