Mensaje del 24 de Septiembre de 2004

Habla Artemio:

A un lado de Nuestra Señora está Jesús y al otro lado Santa Teresita y todos los Santos como siempre.

Dice la Virgen María:

Hoy es un día de regocijo para Mí porque muchos hombres de tantos lugares vienen a visitarme en el Santuario que está a la vera del Río Saladillo.

Todos los años se vuelve a repetir este gran acontecimiento y Yo veo como los hombres de lejos y de cerca, llegan hasta Mis pies para contarme sus dolores, para pedirme favores, para que Yo les de lo que necesitan para ser felices. En este lugar va a pasar lo mismo pero con otras dimensiones mucho más grandes porque aquí como Nuestra Señora de Justiniano Posse soy Patrona Universal de la Humanidad en el Tercer Milenio , es decir bajo esa advocación que Yo elegí pero siempre soy la Virgen María, siempre la Madre del Señor.

Estoy muy gustosa estar en esta Nueva Casa, que es la misma que tenía antes nada más que este es un lugar especial, dedicado quiero decir especialmente ¿mmm? donde siguiendo Mis directivas todos con mucho amor han construido, además estoy muy contenta porque la cascada de agua simboliza el Río de Agua Viva, es decir el Espíritu Santo que llega a todos los hombres, representado por una corriente de agua y por una fuente, justamente Yo como Misionera del Espíritu Santo, como Mensajera del Espíritu Santo para que se entienda la Misericordia de Mi Hijo estoy muy gustosa de estar en este lugar, que ya desde los cuatro puntos cardinales miran hacia acá con la esperanza de un mundo nuevo, de un mundo mejor lleno de todas las cosas que el hombre necesita para estar bien, en paz, alegre y ser feliz.

Lo simbólico de esta cascada y esta fuente es que no solo está haciendo descender agua para los que vienen acá sino es un símbolo para la humanidad entera, porque Yo dije: hagan estas cosas, Yo les dije: construyan esto. Algunas cosas no están igual de como Yo las pedí pero lo hicieron con mucho amor, lo hicieron realmente con toda la buena voluntad y con todo el amor, por eso tantas bendiciones descenderán sobre todos aquellos que apilaron ladrillo por ladrillo y fueron haciendo todo y no solamente los que trabajaron en esas cosas materiales sino los que han contribuido también con acciones espirituales o de ayuda en todos los órdenes.

Por eso, estoy muy feliz y desde este lugar estoy mandando a todos los hombres de la Tierra Mis Mensajes de Madre de Dios y Madre de los hombres. Todo esto que es simbólico tiene un sentido muy grande y a medida que pasen los días ustedes irán viendo como las gracias y los milagros del Señor se multiplican, mucho más de lo que ocurrió hasta este momento, mucho más, por todo y porque estamos en el Año Santo y entonces Yo ya dije el primero de Enero de todo lo que iba a pasar en este año.

Por eso, del Norte y del Sur, del Este y del Oeste, las personas se sanan, los ciegos ven, los sordos oyen, los tullidos caminan, los cancerosos empiezan a vivir de nuevo y la palabra de Mi Hijo es transmitida a todos los hombres y dentro de no mucho en un medio de comunicación masiva se trasmitirán estos Mensajes de Mi Hijo, Míos y de los Santos, así como ya se está haciendo todo a través de Internet en todo el mundo, Mis bendiciones a todos aquellos que están tan fervorosos llevando la palabra de Mi Hijo hacia todos lados.

No intenten medir todas las gracias que Mi Hijo derrama sobre este lugar, sobre todos los que aquí vienen, no, ni lo analicen ni lo razonen porque no puede entenderse tanto dado así en forma tan generosa por el Señor. El Señor cuida y bendice la obra de sus manos por eso todo pasa como debe pasar y cada día tendrán más elementos y más pruebas para ver la Misericordia de Mi Hijo.

Nunca olviden que todos los Mensajes de Mi Hijo Jesús apuntan hacia la Misericordia porque es su principal atributo y además lo único que puede salvar al mundo, ninguna otra cosa podrá salvarlo. Salvarlo de que el hombre sea el que esté exterminando a sus hermanos por motivos políticos, sociales, económicos y de todo tipo, siempre tienen argumentos para destruir pero detrás de que..., del que destruye vienen los que construyen y la palabra será más fuerte que todo, mucho más fuerte.

El día domingo Mi Hijo mostró con palabras fuertes sus cansancios sobre las diversas conductas de los hombres en las más diversas esferas y Yo por supuesto avalo todas esas palabras haciendo de cuenta que Yo también las he pronunciado y ya que estamos en este día de Nuestra Señora de la Merced, es decir Yo, Virgen María con esa advocación de las Mercedes. Quiero decirles que Yo estoy en todos lados, así como lo está Mi Hijo y los Santos.

Me parece muy bien peregrinar a los Santuarios, pero lo fundamental es cuánto los hombres se aman entre ellos, para que Mi Hijo vea bien todo lo que hacen; porque no vale mucho cuando el hombre hace kilómetros a pie para llegar a un Santuario y a lo mejor pasa al lado de su hermano sin saludarlo y sin tenerle ningún respeto, entonces esa conducta no condice con lo que está creyendo. Yo soy una Madre de amor, todos son Mis hijos y en consecuencia no tiene sentido estar diciendo: “Dios te Salve María llena eres de Gracia”, cuando al lado pasa un hermano y ni siquiera lo tienen en cuenta, mientras que todos deberían amarse.

Tienen que entenderlo de una vez, como leyeron hoy en la palabra de cómo Jonás le reprocha al Padre qué es complaciente y misericordioso con los Ninivitas, como si muchos estuvieran representados en Jonás al no querer el bien del hombre sino velar por sus propios intereses.

Como dice Mi Hijo: en esta tarde y todas las tardes a que alcance la vida tienen que amarse unos a otros, tienen que respetarse, tienen que ayudarse, comprenderse, tolerarse, el hombre debe vivir más allá de las cuestiones simples y elementales de las luchas que no llevan nunca a buen fin, Mi Corazón de Madre se siente muy herido, muy dolorido, sobre todo porque estos días estuve viendo como en organismos internacionales no entusiasma mucho el hablar de la pobreza, el hablar de los que no tienen, no pueden, no saben, nada, más aún, son mirados como retardatarios aquellos que se preocupan por los que sufren, por los que menos tienen, menos pueden, menos todo; es decir, tanto el hambre de pan como el hambre de amor para decirlo con palabras de estos días no tiene raiting ni a nivel personal ni a nivel mundial, salvo contadas excepciones y cuando por allí muestran algún ejemplo de comprensión y de amor lo hacen como una rareza, como algo que a lo cual no se está acostumbrado, una rareza como si fuera de otro tiempo y de otra galaxia.

Mis queridos, hay que luchar... (se corta la grabación). .. .

Es muy lindo saber que les guste o no, les parezca bien o no, transformarlo todo.

Les amo.

Amén.