Mensaje del 06 de Agosto de 2004

Habla Artemio:

06 de Agosto.

Dice Jesús:

“Bienaventurados todos aquellos que ven y creen, pero más bienaventurados aún aquellos que no ven y creen”.

Ayer comencé con un tema que es muy importante, todos los temas son importantes y son preocupaciones del hombre, ayer les dije por ejemplo en un momento que: decir vida era decir Dios también, entonces ustedes son creaturas del Señor, creados a su imagen y semejanza, en consecuencia son herederos de la Gloria; ahora bien, esa vida que tienen entre manos tienen que cuidarla, y ¿de qué forma?, ¿de qué forma uno puede cuidar la vida?, cualquiera pensará por supuesto: no comer con exceso, no hacer nada con exceso, sí, sí, está muy bien, pero no solamente tienen una vida física sino también una vida espiritual y algo es fundamental, lo primero que debe buscar el ser humano es amar y ser amado, y ¿amar a quién?, a todos pero por supuesto hay amores más cercanos, más fuertes y más comprometidos que otros, pero siempre el amor es comprometido.

No se puede vivir si no se ama y si no se es amado, algunos no lo son porque realmente no, nadie siente nada por ellos pero a veces hay personas, chicas o grandes que, a pesar de ser amados no se dan cuenta, no lo perciben bien, porque hay mucha gente que no es tan comunicativa, es por eso que siempre hay que estar lo suficientemente abierto como para recibir los mensajes de la otra parte, que muchas veces son la mano en el hombro, en la cabeza o en el cuerpo, una sonrisa, un gesto, una palabra buena, hay montones de formas diferentes para manifestar el afecto y por supuesto el afecto es distinto según como se sienta, a quién y el ser humano distingue claramente los distintos tipos de afecto, el afecto de una madre, de un padre, de un hermano, entonces ¿qué ocurre?, cada uno tiene sus características especiales, el amor de una madre es inconfundible como lo es el amor de un padre.

Ahora, no quiero señalar ningún amor en especial pero piensen que una vida sin amor declina, se enferma y muere, si no muere físicamente muere interiormente, por lo tanto la principal enfermedad en los hombres es la falta de amor, ese es el drama que está siempre vigente en montones de personas, hay montones que dicen no tener para quién vivir. Ahora, y eso está hablando de una falla muy grande en los seres humanos porque cuando hay alguien que está solo, enfermo, muy viejo o lo que sea, el hermano se acerca para compartir con él un pedazo de comida o un momento, el beber algo, un poco de agua; es decir, todo aquél conjunto de cosas que acompañan a las relaciones humanas, no son esenciales pero a veces son el vehículo para..., si uno prepara un buen plato y se lo lleva a alguien que no tiene ese plato con comida no es solamente comida, es todo un montón de afecto que se le está manifestando a la persona.

Por eso, tienen los hombres de todas las latitudes que pensar seriamente qué hacer para estar en el mundo amando, que en todo caso es seguir Mi Mensaje y al mismo tiempo dejarse amar, en el sentido de que hay que hacerse acreedor del amor de los otros, uno que es envidioso, celoso, maldito en todo seguramente los demás no podrán quererle, pero si uno tiene humildad, simplicidad, simpatía, etc., entonces cae muy bien en los demás y los seres humanos tienen que convivir y al convivir la convivencia se torna preciosa cuando..., la convivencia se torna preciosa cuando el lazo de unión es el amor. Piensen ustedes que el amor entre Mi Papá y Yo es el Espíritu Santo, Dios también, miren a qué categoría está elevado el amor, tal es así que una persona de la Santísima Trinidad es amor y amor, conviene también decirlo de acuerdo a la palabra ¿mmm?, “a” es una partícula que indica negación y “mor” muerte, entonces es lo contrario de muerte. Pueden darse muchas explicaciones más pero esta es una ¿no?.

Ahora bien, no pasen ni un momento de su vida, cada uno piense: sin amar a alguien, pero Yo no me estoy refiriendo solamente a los hermanos, a los hombres, sino también todo aquello que les rodea, todas las cosas, las plantas, los animales, todos tienen cientos de mensajes para uno pero esos mensajes no llegan a destino si uno no está lo suficientemente abierto como para receptarlos. La vida del cristiano es una vida de amor, quien no siente amor está fuera de lo que es ser cristiano, ¿y de qué forma hay que amar?, Yo les digo: “les doy un mandamiento nuevo, que se amen unos a otros como Yo los he amado”, y ¿cómo nos amó el Señor dirán ustedes?, hasta morir muerte de cruz. Bueno, Yo les digo que no les pido tanto pero también saben ustedes por la Sagrada Escritura que nada hay tan grande en la vida como dar la vida por un amigo. La amistad es elevada a una consideración mucho más grande que el matrimonio, es decir cada una de estas formas tiene su propia dimensión, su propia dimensión y su propia altura, pero está bien claro aquello que nada hay más grande que dar la vida por un amigo.

Y ¿cuántos vivirán en esta situación?, dar la vida, hay muchas formas de dar la vida ¿no?, pueden ser gestos, palabras, acciones, de todo, es decir es ese esfuerzo diario, laborioso y penoso de estar siempre disponible para aquellos que son nuestros amigos, siempre disponible, ¿y disponible para qué?, y para lo que los demás necesitan y lo principal que el hombre necesita es afecto de los demás, siempre, siempre, a cada instante.

Ahora, tantas veces hemos dicho que amar es cambiar de casa el alma y también dijimos que uno se da cuenta cuando ama a alguien porque al pensar en ese alguien uno se alegra de que exista. ¿Ustedes han comprobado qué hermoso es alegrarse por la existencia de alguien?, ¿mmm? y pensar: ¿qué sería de mí si no existieras?, no a todos se los puede amar con este cariño así tan profundo pero es hermoso llegar a convencerse de que uno haciendo esto entra en lo más sublime que tiene el ser humano en sus acciones ¿mmm?.

Pensar todas estas cosas, por supuesto que hoy no agoto el tema, pero, pero tienen unos cuántos argumentos para pensar, unos cuántos datos para incorporar a vuestra conciencia y les hago un llamado también como recién les dijo Artemio: a tener un... (se dio vuelta la cinta) ..., una fe cada día más adulta, en el sentido que el hombre no puede dar un paso en su vida si no está convencido de la Divinidad, de cuánto le ama la Divinidad y cuánto él podría amar a los hermanos porque de esa forma está amando a la Divinidad.

Pensar Mis queridos en todas estas cosas, vayan por el camino que Yo les estoy trazando, tengan en cuenta las verdades que les estoy dando, sean dóciles, humildes, amables, caritativos, que el amor sea el juego fundamental de vuestra vida. Cuántas veces dijimos que la humildad es la madre de todas las virtudes, pues bien, tenerla en cuenta, de esta forma cuando despejen vuestra alma de rencores, angustias, tribulaciones, sobre todo rencores, celos, envidia y todas esas cosas terribles entonces pueden considerarse que están dentro de Mi proyecto y como siempre se dice Mi proyecto es de amor y siempre termina bien.

Les pido permiso para consagrar a todos los presentes, a Mi Corazón, a Mi Sagrado Corazón, humildemente les digo: hoy les incorporo plenamente a Mi Sagrado Corazón y también les consagro al Inmaculado Corazón de Mi Mamá, ustedes no me lo pidieron pero Yo lo mismo lo hago porque ustedes están muy necesitados de que sean consagrados, algunos ya lo están pero no todos, en consecuencia conviene repetir a veces las cosas ¿no?, sobre todo cuando son de este tipo. Entonces, cuando se vayan de aquí piensen: qué hermoso, sin que yo pidiera nada el Señor me ha consagrado a su Corazón y también la Virgen María.

Mis queridos, hijos Míos, amados Míos, no olviden nunca esto, cuando les venga el deseo de tener una mueca de tristeza, o desazón o desánimo piensen: si estoy consagrado a Jesús y a María, pues bien yo sé que ellos no me van a abandonar y me van a mandar el auxilio justo en el momento que yo lo necesito.

Amén.