Mensaje del 27 de Enero de 2004
Habla Artemio:
No va a hablar Jesús, va a hablar el Padre Pío, San Pío de Pietralcina.
Hoy es martes 27 de Enero de 2004.
Dice el Padre Pío:
Bonacera mi filio, no, voy a hablar en castellano porque ustedes no, no entienden y después para desgrabar los cassette tienen problemas, pero me parece bueno atendiendo todo lo que hablaron hoy, yo creo que hay necesidad de una orientación en todo esto y se supone que si yo estoy acá y soy San Pío, el Señor me está autorizando para decir lo que digo.
Y ustedes a lo mejor le parece que, que se les fue un poco la lengua hoy ¿no?, pero no, no, no, se nota muy bien cuando la persona tiene intención de hacer daño a otro o directamente habla para reírse un poco porque sino la vida e molto, es mucho, es muy triste; es decir, siempre que no se haga daño, que no haya mal intención en la palabra no es serio hablar alguna cosa, pero pasa que no todo a veces lo que escucha están en condiciones de oír ciertas cosas porque a veces pueden pensar mal pero si el Espíritu Santo dicen que hablen de algo quiere decir que los que están escuchando son personas que pueden entender.
Ma, yo digo que hay necesidad de decir algunas cosas, ma por ejemplo, y empiezo con aquello de que yo tenía un carácter un poco fuerte, que cuando yo hacía la confesión o…, otra cosa, a veces no tenía tan buen carácter pero yo pregunto: quién dijo como debe ser el buen carácter, decir siempre que sí, hacer siempre sonrisitas, ¿qué es preferible? si yo estoy disgustado o estoy con un dolor muy grande en alguna parte del cuerpo yo no puedo estar haciendo muchas sonrisitas porque el dolor ni me permite respirar casi entonces si yo ando a las sonrisitas pero por dentro tengo un dolor que me hace mucho mal entonces soy falso, ¿quién dijo como es la forma de comportase en todo eso?.
La persona debe ser auténtica ¿eh?, si alguien viene y a lo mejor como decían antes: es un problema muy chiquito al lado de lo demás, decirle con buenos modos, decirle: mirá, tu problema es muy chiquitito, pensá que el tiempo tengo que dedicárselo a este otro acá que se está muriendo, porque ahí también debe conocerse lo que es el amor al prójimo. No podemos medir con el mismo metro una cosa que la otra, esto tienen que entenderlo y a veces uno se puede no enojar pero disgustar un poco como queriendo decir: mas, si no te duele tanto, ma deja primero a este que le duele más.
Ahora, yo pienso que los hombres en general tienen una forma de pensar equivocada con todo esto porque no son auténticos, no son…, es decir dicen por ejemplo: no se puede ser falso y después tienen un dolor terrible y andan sonriendo, ¿qué es eso, una falsedad?. Si uno habla siempre y en un momento no habla, si uno no habla nunca y en algún momento habla, cuando uno hace algo distinto de lo que hace siempre ma conviene aclararlo y decir algo ¿no?.
Yo les digo esto porque la vida en comunidad con todos los demás religiosos, siempre tuve que andar con mucho cuidado porque se ofendían con cualquier cosas algunos, sin motivo y muchos ofenden gravemente y uno a ellos le dice cualquier cosita chica y se sienten ofendidos como si no sé, le hubiera tirado una casa encima.
No se olviden nunca mis queridos que hay que ser humano, no sobrehumano, el que quiere ser sobrehumano está fingiendo algo que no es. Entonces hay que pensar bien todo, hay que partir de la base que ustedes todo lo que hagan en la vida el Señor está mirando, es decir acostumbrarse a hacer todo bajo la mirada del Señor. Cuando uno sabe que el Señor tiene en cuenta todo lo que uno dice, piensa o hace, entonces tienen que quedarse tranquilo porque si hay algo que está mal el Señor sería el primero en decírtelo, o acaso el Señor no te está comunicando a vos y a todos los hombres no te está comunicando que es lo bueno y que es lo malo ¿mmm?.
Entonces, entonces el hombre pierde mucho tiempo en pavadas, en cosas que no vale el tiempo perderlas ¿mmm?. Es decir, uno parte de la base que a todos los seres humanos uno los ama entonces si en un momento determinado te digo una palabra fuerte no por eso dejo de amarte, te digo una palabra fuerte porque a lo mejor la necesitas pero la mayoría se confunde, cree que el aspirante a Santo para llamarlo de alguna forma tiene que ser todo siempre meticuloso, suavecito, nunca decir…, nooo, eso sería un pobrecito que aspira a la Santidad, el hombre tiene que ser auténtico y llamar las cosas bien por su nombre, muy bien por su nombre y si uno está como dije recién delante de la mirada del Señor no tener miedo, ningún tipo de miedo con lo que uno dice o hace ¿eh?. vos personalmente días atrás sufriste…, sufriste un golpe bastante grande respecto a dos personas sobre este tema ¿no?, pero me gusta como relacionaste porque ellos no se dieron cuenta de que vos te había hecho mal pero no dijiste ni una palabra, al contrario, pero en ese momento sufrí un poco por vos.
Hay que partir de la base que nadie puede meterse en el alma de otra persona para saber qué intenciones tiene cuando dice algo o cuando hace algo, entonces ante cada cosa que hacen los demás ¿mmm?, callar, quedarse en silencio ¿eh?, en todo caso decir lo que parece con mucho afecto, con mucha caridad pero, nadie puede juzgar las intenciones de nadie, de nadie.
Si todos pensaran así el mundo sería muy diferente ¿mmm?, ahora, hay otro problema también, hay gente que dice, dice pero nunca escucha lo que dicen los demás, ellos hablan y luego cuando están calladas se siguen escuchando a sí mismos pero no escuchan lo que dicen los otros.
Entonces, hay que terminar con todas estas cosas así que lo único que se consigue es perder tiempo, para hacer otra cosa más importante, no sé si me explico bien pero, el ser humano tiene que ser más práctico, en el sentido de no estar explicando a cada rato por qué hizo esto, por qué hizo lo otro, sino hacerlo todo a conciencia, bien, es decir a conciencia, es decir lo que la conciencia te diga y después adelante, lo que puede pensar otro es problema de él, no es problema tuyo ¿mmm?.
Yo no estoy diciendo nada fuera de lugar, por supuesto que haga uno lo que haga tiene que hacerlo siempre con mucho afecto porque los demás ni se lastimen, ni se enojen ni nada, pero tienen que vivir de una manera ¿eh?. Si vos te golpeas el dedo de un pie y sentís un dolor terrible ¿no?, bueno a mi me gusta mucho decir: alabado seas Señor, me gusta, pero si vos no podes y te duele tanto y decís una palabra, que parece fea, es una descarga por el golpe que te diste y quién va a decir que esa es una palabra mala, si en todo caso sirvió para descarga, fue algo que no insulté a nadie ¿eh?, entonces no.
Es que todas estas cosas tienen que quedar claras, además, además tienen que pensar ustedes que quien les está diciendo todo esto es el Padre Pío, entonces piensen: este hombre no la pasó tan bien en la vida, porque de él creyeron, no creyeron, lo castigaron, mintieron sobre él, le pasó de todo ¿verdad? y lo que hacía yo era sufrir nada más en silencio, pero…, puedo hablar así porque qué no me pasó a mí, pero noo y sí, también tuve dolores por mi salud pero el problema fundamental es que le pasaba a los otros conmigo, ma si me salía sangre de las manos pues bien, le saldrá sangre, no por eso vamos a pensar que se yo que cosas raras porque le sale sangre y bueno le sale ¿eh?.
Es lo mismo con cualquier otra cosa, alguien tiene ganas de ir al baño, pues bien vaya al baño y no por eso porque está nervioso o porque le pasó que se yo, noo, a lo mejor cualquier comida que no le hizo bien y pero por qué yo tengo que pensar necesariamente que el que va al baño va porque está nervioso porque yo le dije una palabra pero, el mundo se volvería una porquería pensando así todo, sepan, aprendan a vivir de una manera ¿mmm?, de una manera que se sienten bajo la mirada del Señor y que cada acto que ustedes hacen en privado o en público, en vuestra conciencia, si vuestra conciencia lo dice, el Señor lo dice y entonces aunque a todo el mundo le parezca malo y la conciencia dijo que es bueno, es bueno.
Porque al mundo le falta mucho tiempo de historia todavía y los hombres, si ustedes se ponen a ver hace siglos atrás pensaban de una forma, fueron cambiando, cambiando, cambiando, ¿verdad? y cuando pase un tiempo cien, doscientos, quinientos, mil años van a pensar de muy distinta manera. Entonces, si alguno tiene ya la palabra del Señor en su conciencia diciéndole que lo que hace, lo que tiene, lo que dice, lo que …, bueno todo, está bien, ma los demás que tienen que meterse ¿eh?.
¿No tiene derecho el Señor decirle a la persona lo que le parece que está bien? ¿eh?. Si alguien tiene algún problema y todavía la sociedad, a la sociedad no le gusta que la persona tenga ese tipo de problema ¿mmm? y el Señor sabe perfectamente que dentro de treinta, cuarenta o cincuenta años eso se va a descubrir plenamente en el sentido de que se va a descubrir el origen, el problema ¿no?, el Señor tiene derecho a decirle en su conciencia a la persona: viví bien, viví tranquilo, porque este no es un problema porque dentro de un tiempo ya van a pensar de otra forma.
Y como ven todo viene de una fe de bebé de pecho, porque si ustedes tienen una fe adulta confían plenamente en que en vuestra conciencia el Señor se manifiesta a través del Espíritu Santo que es Dios también y le va aclarando todas las cosas, le va diciendo todo y si alguno se adelanta a su tiempo no será porque el Espíritu Santo lo hizo adelantar a su tiempo ¿mmm? y si alguno tiene un dolor, una enfermedad o lo que sea determinada ¿no? y pero todavía la gente cree que es mala esa enfermedad y el Señor sabe que no, pues bien se lo dice en su conciencia y esa persona vive en base a lo que el Señor le dice y tiene derecho y los demás tienen también el deber ante todo lo que puede manifestar la otra persona de guardar silencio, porque no dicen acaso que el Espíritu sopla donde quiere, bueno piensen: en esta persona ya el Espíritu habrá soplado estas cosas entonces qué tengo yo que opinar, o escandalizarme, o hacer esto o lo otro.
Mis queridos, mis queridos, si ustedes vieran todas las cosas que van a ocurrir dentro de cien, doscientos, trescientos, cuatrocientos años se va a agarrar bien la cabeza, de una forma que no sé. Ahora, si hay alguno que puede adelantarse a su tiempo porque el Señor se lo adelanta, ¿ustedes que tienen que decir?.
Aprendan que hay que vivir y dejar vivir a los demás bajo la mirada del Señor, porque cuando uno abre los ojos de este lado no tiene que dar cuenta de lo que hacía el vecino, el otro, el otro, tiene que dar cuenta de sus propios actos ¿eh?. Entonces, que cada uno se guíe por lo que su conciencia le dice, que es la voz de Dios hablando dentro de él, y el resto…, el resto no hay que hacerle cinco de caso, porque…, mas es tan cortita la vida que si la pasan mal después la desaprovechan porque si van a conformar a todo el mundo con las cosas que ustedes tienen, hacen o dicen no lo van a hacer, no van a conformar nunca a nadie.
Vivan bien como Dios manda, hagan todo lo que el Señor les dice, el resto no lo escuchen, sean razonables los seres humanos, sean razonables, no sean injustos con los otros, lo peor que puede pasar son las injusticias, es decir querer que el otro piense igual, que el otro obre igual, que el otro ame igual, que el otro…, ¡nooo!, en cada uno las cosas son distintas, entonces ante un ser humano hay que pensar: este hombre es creado a imagen y semejanza del Señor entonces yo tengo que respetarlo por eso, sea como sea, haga lo que haga y que se yo, y si vos me decís: ¿y si es un asaltante que te quiere matar?, hablale con las palabras del Señor, en todo caso es preferible que te mate sin que vos tengas culpa ante que pase otra cosa. Pero hay que partir también siempre de esto de que el Señor te va a proteger ¿mmm?.
Yo creo que todo lo que hablamos hoy es necesario para ustedes, es necesario, porque si dicen una mala palabra están buscando a ver si algún Santo la dijo; si hacen algo que no les gusta a los demás están buscando a ver si algún Santo lo hizo; si se portan de una forma están buscando a ver si algún Santo lo hizo, porque con esa manera... , la Santa Madre Iglesia dijo: está bien. Tengan una fe adulta, no sean bebé de pecho, tengan criterio para razonar, tengan la mente clara, fresca para ver las cosas realmente como son ¿mmm?, dejen de lado todo lo demás. Dicen una cosa los hombres y hacen otra, dicen que aman y odian, dicen que respetan y atropellan, dicen que toleran y no pueden escuchar una palabra distinta a la que ellos dicen y en todo es igual mis queridos, todo es igual, se hacen daño a ustedes y le hacen daño a todos los otros, basta che ¿mmm?.
Ya que estas palabras llegan a todos los hombre del mundo, que todos entiendan lo que yo termino de decir y ustedes que me están oyendo aquí ya en este día vivamos bien de acuerdo a vuestra conciencia, el resto…, el resto no importa.
Bueno, yo los quiero mucho, siempre los quise mucho y creo que fui muy auténtico hoy en decirle esto porque yo venía sintiendo todo lo que hablaban lo había provocado el Señor que hablaran todo eso para que yo pudiera decir estas cosas que estoy diciendo.
Una última, entonces ¿para el Señor vale todo?, noo, ¿quién dijo eso?, eso cincuenta mil veces lo aclaró, el amor es muy exigente, el amor tiene un montón de parámetros, medidas ¿mmm?, pero hay una realidad mis queridos: quien ama no se equivoca, quien ama no se equivoca, yo digo ama en el sentido total de la palabra, no lo que puede decir cada uno lo que es el amor, en el sentido total de la palabra. Entonces, eso que se básico che, quien ama no comete nada mal, quien ama no hace ninguna cosa mala, no la hace, ma estas palabras son del Padre Pío, ahora por Gloria de Dios San Pío de Pietralcina.
Que Dios los bendiga mucho a todos ¿eh?.
Amén.
Mensaje del 27 de Enero de 2004
Yo creo que hay necesidad de una orientación en todo esto y se supone que si yo estoy acá y soy San Pío, el Señor me está autorizando para decir lo que digo.