Mensaje del 15 de Febrero de 2003

Habla Artemio:

Hoy es 15 de Febrero de 2003.

Señor estamos contentos porque ya estás entre nosotros con todas las personas que vienen siempre, es un gusto tenerte aquí Señor y es un gusto poder agradecerte todo, toda la riqueza que nos dejaron estas personas del país hermano que vinieron a visitarnos, y también Señor te agradecemos porque la inmensa riqueza que nosotros les dimos; es decir estamos a la recíproca, nos trajeron un montón de cosas y nosotros le devolvemos también toda la que podíamos devolverle, las gracias te sean dadas Señor.

Dice Jesús:

Todo lo que ha pasado en estos días es evidente que ha sido una gracia del Señor, Mi Papá se complace a veces en hacer estas cosas así que parecen tan difíciles y extrañas pero se vuelven tan fáciles y simples como si fuera la cosas más común.

Habla Artemio:

Con la diferencia Señor que en el caso de esta, gente ellos están acostumbrados a escuchar palabras y otras cosas de aquellos que son célebres en el mundo entero. Pero Señor nosotros no nos fijamos en esa celebridad sino nos fijamos en vos Señor, porque cuando vos hablás siempre tenés palabras de vida, palabras de vida eterna y mientras tanto Señor, también tenés todo el poder para que nuestra vida sobre la Tierra sea de la mejor forma posible.

Libéranos de las enfermedades y para esto te la decimos cantando: el Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, déjalo que te saque, déjalo que te toque, déjalo que te toque y recibe su bendición. El Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, déjalo que te sane, déjalo que te sane, déjalo que te sane y recibe su bendición. El Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, déjalo que te sane, déjalo que te sane, déjalo que te sane y recibe su bendición. El Maestro de Galilea fuego mandará, el Maestro de Galilea fuego mandará, déjalo que te queme, déjalo que te queme, déjalo que te queme y recibe su bendición, déjalo que te queme, déjalo que te queme, déjalo que te queme y recibe su bendición.

Bueno.

Dice Jesús:

Estoy muy contento y satisfecho por todo lo que ha ocurrido en estos días, esto que ha pasado son semillas preciosísimas que darán frutos en montones de lugares, que darán frutos en montones de lugares. Mientras sea posible haré llegar de a poco la gente, para que se pueda hacer con ellos muchas cosas, en el sentido de que luego ellos tengan un efecto multiplicador en los lugares en donde residen.

Ven Señor Jesús, dicen todos aquellos que necesitan; ven Señor Jesús dicen aquellos que tienen necesidad de sanación y Yo voy a todos, Yo realmente quiero que todos estén bien, estén en paz, tengan felicidad.

Me gusta mucho que se haga una sanación de todo, teniendo en cuenta ese tema tan hermoso del Maestro de Galilea, tengo mucha simpatía por ese tema porque es una forma de manifestar todo Mi deseo de que el hombre viva bien. Además…, les digo que me ocupo especialmente en este día, de todos los enfermos a quienes ustedes les preocupa, aquellos que están cerca y aquellos que están lejos y ustedes mismos si tienen alguna dolencia, pero hoy me ocupo especialmente, siempre lo hago por supuesto, pero hoy me ocupo especialmente de todos aquellos enfermos que necesitan con urgencia la asistencia de la Divina Providencia que le lleve toda la Misericordia y las gracias de la Trinidad para sanar de sus enfermedades.

Piensen en todos aquellos en los cuales quieren que caiga la inmensa Misericordia que estoy derramando sobre todos, piensen en aquellos para que descienda sobre ellos todas las gracias y todas las bendiciones, piensen…, piensen en todos aquellos que están enfermos, piensen, piensen, familiares o no, amigos, relaciones…, piensen. Yo quedaré un instante en silencio, para que ustedes me vayan presentando todo los enfermos que ustedes conocen, o que les han pedido la intercesión y no solamente los enfermos de enfermedades físicas sino los enfermos de todo tipo de dolencias, porque a veces hay dolencias psíquicas que son muy graves y mucho más peligrosas que las enfermedades físicas, cito algunos por ejemplo: el orgullo, la soberbia, la envidia, la avaricia. Y tengan en cuenta muy especialmente que Yo veo con tanto agrado cuando más allá de esta oración cotidiana, ustedes piensan y quieren que se hagan realidad todas aquellas promesas que Yo a lo largo de los tiempos fui haciendo para con todos los hombres.

Piensen Mis queridos, piensen, piensen, nunca crean que porque alguien ya está en el Cielo, ya tiene todo resuelto, hay mucha gente sí que se salva y se va a ver al Padre, a la Gloria del Padre, pero al mismo tiempo se demora por allí con alguien para pedir oraciones por ellos, o por algunos, por montones de cosas, ustedes deben decirle: déjanos que estemos en paz, nosotros rezaremos, nosotros haremos ayunos y sacrificios para esa persona que no logra la paz en la otra vida, entonces hacemos lo que hacemos diariamente y lo que hacemos en este momento: “Padrenuestro que estás en el Cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad así como en la Tierra como en el Cielo, danos hoy nuestro pan de cada día y perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a quienes nos ofenden y no nos dejes caer en la tentación, más líbranos del mal. Amén”. Para completar esta oración tan maravillosa decimos: “Dios te Salve María, llena eres de gracias el Señor es contigo, bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. Gloria al Padre, gloria al Hijo y Gloria al Espíritu Santo, como era en un principio ahora y siempre por los Siglos de los Siglos. Amén.”

Algunos de los presentes quieren dar algún testimonio o hacer algún pedido público del enfermo o lo que sea, piénsenlo… (se hace una pausa) …

Bueno, ahora piensen que Mi Misericordia les está llegando a todas esas personas para que se sientan felices, porque la salud o lo que sea, siempre es armonía y la armonía es lo que necesita el Señor de que haya entre sus hermanos, lo fundamental y definitivo es como es la relación con tu hermano: ¿le amás o no le amás?.

Bueno, hemos pensado en los lugares donde queremos que realmente todo se solucione y todo tome su lugar adecuado.

Les amo mucho, les amo profundamente, les amo con todo Mi corazón.

Amén.

Habla Artemio:

El Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, el Maestro de Galilea va pasando ya, déjalo que te toque, déjalo que te toque, déjalo que te toque y recibe su bendición. El Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, el Maestro de Galilea va sanando ya, déjalo que te sane, déjalo que te sane, déjalo que te sane y recibe su bendición, déjalo que te sane, déjalo que te sane, déjalo que te sane y recibe su bendición. El Maestro de Galilea liberando está, el Maestro de Galilea liberando está, el Maestro de Galilea liberando está, el Maestro de Galilea liberando está, déjalo que libere, déjalo que libere, déjalo que libere y recibe su bendición, déjalo que libere, déjalo que libere, déjalo que libere y recibe su bendición. El Maestro de Galilea fuego mandará, el Maestro de Galilea fuego mandará, el Maestro de Galilea fuego mandará, el Maestro de Galilea fuego mandará, déjalo que te queme, déjalo que te queme, déjalo que te queme y recibe su bendición, déjalo que te queme, déjalo que te queme, déjalo que te queme y recibe su bendición.

Ahora vamos hacer la ceremonia del bautismo, P. y O. son América, P. y R. son África, N. es Europa, H. es Asia y yo soy Oceanía, pensemos diez nombres para los niños, aunque se repitan no importa… (Se corta la grabación) …