Mensaje del 04 de Octubre de 2003

Habla Artemio:

Casi diez años, hoy es 04 de Octubre de 2003, día de San Francisco de Asís.

Jesús ya está con nosotros, así como están todos los Santos y por supuesto la Virgen, hay familiares de todos acá.

Dice Jesús:

Nadie enciende una lámpara para ponerla debajo de la mesa u ocultarla en algún lugar, las lámparas son para que se vean y para que su Luz guíe el camino de los hombres.

Digo esto a propósito de tu preocupación por esa imagen del diario, primero vos no la provocaste, otros la hicieron y según las leyes de donde se mire puede hacer algo o no, pero Yo me encargaré que no impacte a nadie en forma negativa, por supuesto que para aquellos ojos que les molestan las cosas del Señor será algo muy irritativo, pero eso es problema de ellos, no tuyo.

Hay que aceptar que de acuerdo a la forma de ser de cada persona busque impactar con lo que dicen, por eso no debe ser mirado mal todo eso sino una forma de decir, de por sí ya esa imagen al entrar dentro de un hogar lleva un montón de bendiciones, además hay que pensar que Yo traje fuego al mundo para que arda, entonces esto contribuye para que arda, en el buen sentido de la palabra.

En todo un ambiente convulsionado, por las más diversas cosas, es un golpe fuerte la mano con un clavo, de por sí, por el solo hecho de verse aunque sea hasta de lejos eso trae bendiciones y por supuesto que más de uno al ver esa imagen se acordará seguramente de Mi crucifixión y ya eso es mucho, por eso hay que adaptarse a vivir en un mundo en el cual cada uno dice las cosas como le parece, porque es libre de hacerlo. Lo fundamental es que cada hombre en su conciencia esté tranquilo porque hizo las cosas bien, además Mi querido, te guste o no, vos ya no te perteneces a vos, perteneces a los demás, aunque eso puede traerte muchos problemas pero cuando los hombres se ofrecen y están en disponibilidad tienen que afrontar todas las cosas que puedan venir.

Esto no hace más que corroborar, repito, las cosas que te dije a comienzo de año, en Santiago de Chile y como a vos ni te interesa, ni te preocupa, ni le das importancia que es lo que Yo quiero, quedate en paz y seguí con todo lo tuyo.

Mis queridos, en este día tan especial, en que todos recuerdan a este hombre maravilloso, Santo de la Iglesia y ejemplo para la humanidad como es San Francisco de Asís, por su intercesión y la de Mi Mamá, escucharé todos los ruegos que han tenido para conmigo.

Me gusta concederles cosas a todos, pero especialmente a los que me aman y sépanlo una vez más, aunque voy a repetirlo con frecuencia, el lenguaje que uso en estas Revelaciones es posible que no sea igual a otros, pero tendrán que acostumbrarse y aceptarlo así como se los digo Yo. Sobradamente saben que Mi especial preocupación es para que los que menos tienen, menos pueden, menos saben y en apariencia menos son, puedan tener todo aquello que los haga felices.
Por supuesto, ustedes saben que Yo los amo tiernamente, hoy y siempre y aquellos que no me quieren o me detestan trato de amarlos muchos más.

Amén.