Mensaje del 30 de Julio de 2003
Habla Artemio:
Hoy es 30 de Julio.
Estuve diciendo que el Señor Jesús, está parado, ahí donde se para siempre la Virgen y al lado está Santa Teresita, claro Jesús es muy alto al lado de Santa Teresita. Y Nuestra Señora está sentada con las manos puestas en los posa brazos, cuando se sienta bien atrás los pies no le tocan el suelo, falta un poquito. Los pies son chicos, rosados, si bien por supuesto el ángulo de la mandíbula y la nariz se nota en ascendencia, uno dice judía pero se supone que es judía ¿no?, pero la nariz aunque es un poquito más grande que la nariz corriente de las personas, muy poquito, pero…, no tiene arrugas su rostro. Y como dije antes, el vestido es amarillito, color de la sabiduría, tiene el cordón como en el cuadro, oscuro pero apenas si se ve un poquito, como toda mujer y hay que decirlo se notan sus pechos, esos que amamantaron a Jesús, sí. Ahora, el manto es el que sobreabunda ¿no?, es como en el cuadro pero me parece un poco más claro, no sé si es porque la ropa es transparente, pero un poco más claro y lo que he notado que el manto según los días tiene más o tiene menos, a veces lo agarra ella para no pisarlo por lo largo que es y otras veces no tanto, hoy por ejemplo llena toda la mecedora pero ¿por qué?, por la ropa, porque se nota que ella no es grande, tampoco es una bebota así tipo Nuestra Señora de Medjugorje, no, no, no, es una Señora ¿mmm?, pero como ella dijo: “Yo tengo tantos rostros y figuras como ojos que me miran”.
Hay algo que nunca dije y que los ojos de Maria se notan que son humanos, mientras que los ojos del Señor hay algo tan especial, que se ve que son más que humanos y la forma de fijar los ojos que tiene Jesús, por muy mansamente que mire, es una mirada que no es fácil de resistirla, porque uno adivina en ello como si fueran mundos y mundos y mundos, mundos. La mirada de María es mas suave, sus ojos no son grandes, ni tampoco pequeños, son medianos y como dije siempre es color miel, un poquito mas oscuro, el cabello aunque se ve poco ¿no? arriba en la frente, arriba de la frente pero se nota que es un poco crespo ¿no?, no tanto pero sí, es un color castaño pero…, pero no tanto ¿eh?.
La imagen de Nuestra Señora hay que decirlo, es como si fuera que el tiempo no deja huellas en su cuerpo y en general es siempre la misma pero…, y como pasa con Jesús a veces es un poquito más alto, a veces un poco más chiquito, según, por ejemplo a ella la veo bastante alta y más grande por el hecho que tiene una…, no es capa, no sé, es túnica, no sé como se llama eso que es color rojo oscuro, la tiene puesta así como al descuido y le sube de un lado.
No se ofenderá si digo que Santa Teresita es un poco regordeta ¿no?, porque no es tanto como está en las estampitas Santa Teresita, tiene una cara más redonda, no es de rostro anguloso como se ven en las estampitas de ella, tiene el hábito por supuesto oscuro ¿no?.
Bueno, yo creo que he descripto bastante, alguna vez Señora tendrás que decirme que tipo de tela es la que tiene tu manto, porque yo no sé si en aquél tiempo hacían ese tipo de telas, sí, la del vestido sí se nota que sí pero…, pero el manto no, es una tela muy fina y en gran parte transparente, por eso decía antes que no es tan azul como en el cuadro sino un poco más clara y nunca es del mismo tamaño, cada día tiene dimensiones diferentes y a veces parecería que son varios metros de manto porque cubre a todos y en la parte de abajo del manto, donde termina, no tiene dobladillo, tiene una vueltita, vieron que a veces las personas, no sé como lo logran ¿no?, hacen esa vueltita en vez de dobladillo; es decir, no se nota deshilachado pero con la vueltita y la última parte parecería como si se abrieran como en abanicos ¿mmm?.
Señora, yo digo como estas vestida y todo porque supongo que a muchos les debe interesar, un día dijiste Señora que nunca ibas a aparecer en minifalda porque a vos no te gustan ¿no?, y es cierto, siempre apareciste con vestido largo, seguramente por el manto, porque el manto con el vestido corto tal vez no quedaría tan bien y vos en general no variás en la forma de vestir, Jesús sí.
Bueno Señora, tu Hijo te ha dado el lugar que ocupa Él, tendrás que decirnos algo supongo ¿mmm?.
Dice la Virgen María:
Yo siempre hablo diciendo lo que Jesús quiere que diga, así como los Santos, pero también a veces tenemos cierta libertad para decir las cosas de acuerdo a nuestra forma de ser, es lógico, Mi Hijo es un hombre, Yo soy una mujer, entonces puedo tener algún punto de vista diferente ¿no?, no tanto pero... .
Como Mi Hijo el domingo habló sobre que uno de sus grandes dolores es que tantos cristianos, al menos de nombres, no me tengan en cuenta, para ellos soy la Madre de Jesús, pero ni siquiera así me dan el lugar de una Madre. Yo pienso cómo se arreglarán para ver todo eso referente a la Anunciación del Ángel ¿no?, sabiendo que en esas palabras: “he aquí la esclava del Señor hágase en Mí según tu palabra” y luego con el Magnificat: “Mi alma engrandece al Señor…”, y sigue.
Ahora, no entiendo como se las arreglan para explicar tantas cosas, sin tenerme en cuenta a Mi, claro como en todos los casos, como actúa el Señor ¿no?, es decir Yo no me doy el lugar o no me quiero dar un espacio más que el que tengo, pero resulta medio chocante eso de que a Mi se me venera, a Mi Hijo, al Padre y al Espíritu Santo se los adora, pero no pretendo nada en especial, pero cuando los hombres andan buscando demasiadas vueltas respecto a como tratan a la gente, bueno Yo creo que no está bien, ¿por qué?, bueno cuando alguien me está invocando a Mí Yo veo mucho amor en la persona, así como Yo también manifiesto mucho amor, entonces por qué tanto cuidado en ver como me nombran a mí o lo nombran a Mi Hijo.
Se dan cuenta que ustedes, humanamente hablando, nos transfieren los problemas a nosotros, pero no hay tal problema, cuando Mi Hijo dice que Yo soy Co Redentora con Él y más vale, nunca quieran separar a una madre del hijo, porque eso no lo lograrán jamás, en las venas del hijo corre también sangre de la madre, del padre también claro, pero mucho más de la madre porque el ombligo hace que al niño le vaya toda la nutrición de la mamá a través de la sangre. Por eso, aunque se empeñen en querer separar ahí, en dar menos valor que el que uno tiene, cometen como torpezas y a veces hay gente que se dice muy ilustrada y comete esas torpezas.
Es decir, a lo largo de los tiempos, según cada cultura, según las épocas en que vivieron ¿no? me van viendo o pensando de formas diferentes, a veces un poco regordeta, a veces con la nariz de una forma, o la cara de otra, los ojos de otra ¿mmm?, pero si bien se pueden hacer imágenes Mías con rasgos de todas las razas, no se llamen a engaño tampoco, eso está muy bien, a Mi me gusta pero…, Yo tengo Mis características personales, que es la que estás viendo; ustedes dirán: Nuestra Señora está ocupando el sitial de Jesús y no dice cosas tan importantes, miren Mis queridos, todo lo que diga Mi Hijo y Yo y los Santos, aunque a ustedes les parezca otra cosa siempre es importante, ustedes dirán: pero ya sabemos que los hermanos separados no tienen en cuenta a la Madre de Dios, sí, ya sé, pero qué esperan para rectificar un poco el rumbo.
Ustedes, ya lo dije una vez esto ¿no?: ¿ustedes pueden mirar tan fácilmente a Jesús en la cruz y en la sangre no ver también sangre Mía?, porque Yo soy Redentora junto a Él, Madre de la Santa Madre Iglesia, Reina y Señora de todo lo creado, incluso cuando Yo aquí dije al principio, que me llamaba: Reina del Espíritu Santo, entonces todos o muchos, decían: todo está perfecto pero María no es Reina del Espíritu Santo sino que es Esposa, claro si nos ponemos a pensar: ¿qué es la esposa de un Rey?, ¿no?, pero no, no, no quiero alterar ningún esquema de nadie, ni el problema está en si uno es Reina o no es Reina.
El problema está en el lugar que ocupo en vuestros corazones ¿eh? no está en Reina o no Reina, eso tiene un valor muy relativo, es decir formas en que a Mi me llaman porque, tienen tantas formas de llamarme ¿no? y cada uno, así como los hermanos separados directamente me ignoran, porque lo que hacen no es otra cosa que ignorarme, así también tengo que pensar que a veces los católicos me llaman con todos los nombres posibles, está bien, pero lo que no está bien a veces es que se disputen zonas o lugares como queriendo decir: aquí Nuestra Señora es o se llama de una manera, allá se llama de otra, es decir como si hubiera una competencia entre nombres, pero Yo soy siempre la Madre de Jesús y está bien, en cada lugar me agregan el nombre del lugar, como para quien diría: apropiarse un poco más de Mí ¿mmm?, pero Yo soy la Madre de todos.
Ahora, no sé a veces si los católicos por temor a lo que puedan decir los hermanos separados pero algunos en esto de la palabra es como si quisieran disminuirme delante de los demás, como una forma de quedar bien y hacer méritos para que los hermanos separados piensen de otra manera, no es así que lo van a conseguir, porque no es cuestión de ser porfiado ni tozudo pero lo que es, es. Algún día los hermanos separados estarán todos bajo un mismo pastor ¿verdad?, pero puede que eso se diga también formalmente pero muchos no, ustedes se fijaron que uno de los problemas esenciales es que a Mi Hijo no quiere vérsele la naturaleza humana y a Mí tampoco, entonces al dar una espiritualidad demasiado elevada, es decir desconociendo la parte humana, es decir totalmente humana en Mí, mitad humana en Mi Hijo. Ahora eso trajo como montones de consecuencias, por ahí algunos haciendo a Mi Hijo demasiado humano y por ahí a Mí por ser humana directamente me ignoran.
Ahora el problema no se soluciona así tan sencillamente, es todo un problema de concepción que hay detrás, pero a veces estoy convencida de una cosa, que es más claro el concepto que tienen de Mi cualquier persona, aunque sea analfabeta, que muchos teólogos que hablan sobre Mi pero me racionalizan tanto que al último ya no soy la Madre que debería ser, ¿ustedes creen que se puede abordar con éxito a la Madre incluso a la madre humana racionalizando las cosas?.
Claro, ahí esta el problema tantas veces de cómo tratan los hijos a sus madres, muchas veces hasta olvidándose de ella, como si la madre representara para muchos la idea de vejez que va terminando ¿eh?, es decir terminando la vida ¿verdad?. Pero…, Yo les hago esta comparación, así como a veces son injustos conmigo, también los hombres son injustos con sus madres, con sus esposas, con sus novias, con sus hijas, etc., pero el problema es cultural, viene de tanto tiempo atrás ¿mmm?. Ahora, todo lo cultural que ustedes quieran pero no se fijan ustedes en todas las cosas que dijo Mi Hijo de Mí, o las que dije Yo y recoge el Evangelio, quien no se da cuenta, y algunos incluso escribieron tratados sobre esto pero no como corresponde y me dan un perfil bajo ¿verdad?, pero ¿por qué?, porque culturalmente a la mujer no se la consideraba en todos los tiempos como corresponde, incluso a veces hasta sabios dentro de la Iglesia, que en eso me parecen que tocan de oído ¿no?. Es decir, consideran a la mujer de una forma entonces la Madre de Jesús si es mujer pues bien por analogía se da así.
Yo les propondría replantear muchas cosas y volver a descubrir el papel Mío en la redención del hombre ¿mmm?, Yo les propongo repito, volver a considerar todo lo referente a Mi, porque los que simpatizaron conmigo en los primeros Siglos del cristianismo y que tenían las cosas más claras, algunas ¿no?, me daban un lugar, no porque Yo quiera más destacado sino que entendieron el Mensaje de Jesús y en consecuencia, es decir después Jesús a la mujer hay que pensarla de otra forma no como antes ¿no?, sí, porque el Padre elige la humana naturaleza de la mujer para que nazca su Hijo, ¿eso qué les está diciendo?, que todas las segregaciones culturales a través de todas las épocas están fallando totalmente y Mi bajo perfil en la Sagrada Escritura también tengan en cuenta que es para no irritar los ojos judíos o de otras nacionalidades.
Entonces, aquí podría citar lo que dijo Mi Hijo el domingo: “media verdad es casi una mentira”, y Yo a ustedes les digo: cuidado con todo esto porque Yo pienso que en un tiempo puede ser, otro tiempo también, pero llega un momento en que hay una madurez suficiente como para decir las cosas como son y no solamente pensando en Mí como la Virgen María sino toda la problemática con o junto a la problemática a la mujer también a otras personas que siempre vivieron segregadas.
Mis queridos, todas esas cosas deben terminar, es decir ustedes piensen y ya termino, que no hace falta que alguien les diga: hagan esto o hagan lo otro, si Mi Hijo les dijo: “ámense unos a otros como Yo los he amado”, está clarito, ámense, pero ¿a todos?, ahí esta le problema, el mundo andaría de otra forma si fuera para todos, pero si ustedes se ponen a contar todos los segregados que hay así como las mujeres ¿no?, son innumerables. Es como si la mente del hombre avanzara poco en algunas cosas, en algunas mucho y en otras muy poco y en algunos temas están perdidos en la historia, a Mi me da pena todo eso ¿eh?, porque pena que los hombres razonen tanto algunas cosas y no abran los ojos de su corazón para ver la realidad.
Y vamos a continuar con esto ¿eh?, pero es lógico que les diga que detesto todas las segregaciones, las detesto por una razón muy simple, porque Yo también escucho en Mis oídos las palabras de Mi Hijo que dicen: ”ámense unos a otros como Yo los he amado”.
Bueno, ustedes saben que los quiero mucho, pero vuelvo a las palabras de hace muchos años atrás, soy un poco áspera a veces, tal vez un poco dura y como dijo alguien: nunca oímos a la Virgen hablar de esta forma, no Mis queridos, Yo hablé algunas veces de otra forma más fuerte que los que me presentaron en las Revelaciones de otros tiempos, pero ¿qué pasa?, siempre estaba el tamiz de la cultura determinada y de los hombres que montones de veces modificaron las cosas para que nada cambiara. Ahora, Yo fui muy clara aquí desde el comienzo: no se animen a podar nada de las cosas que decimos porque se está haciendo mucho daño.
La vamos a seguir ¿eh?.
Amén.
Mensaje del 30 de Julio de 2003 (1º)
Entonces, aquí podría citar lo que dijo Mi Hijo el domingo: “media verdad es casi una mentira”.