Mensaje del 19 de Julio de 2003

Habla Artemio:

… Santa Teresita, Santa Faustina, el Padre Guillén, Emiliano Tardiff, Pironio, La Madre Teresa, ¡uy, cuántos que hay!, tantas familias de todos ustedes, bueno, muy bien.

Entonces decimos, porque el Señor quiere que se diga, estamos reunidos para que después salga por Internet en todo el mundo: Orelio, Nelly, Carmen, Patricia, José, Lucas, Porota, Rosa, ¿el nombre tuyo?, Rosa y Artemio, estamos reunidos acá en este día, que es exactamente 19 de Julio.

Bueno Señor estamos ansiosos por…, ¿eh?, estamos ansiosos por conocer que nos vas a decir Señor hoy. Estos Mensajes que da el Señor, cuando los que desgravan los cassette escuchan la voz de Jesús que me dicta , o de la Virgen o de los Santos ¿eh?.

Dice Jesús:

Bienaventurados los simples, los de corazón sencillo, los de costumbres comunes porque en ellos será el Reino de los Cielos. Bienaventurados aquellos que piensan que deben amarme mucho, lo mismo que al Padre y al Espíritu Santo, a la Virgen y a todos los Santos, porque de esa forma están siempre en contacto con nosotros. Bienaventurados o felices todos aquellos que hacen de su vida un canto de amor y esperanza al Creador. Bienaventurados o felices aquellos que entienden las cosas simples y no son ni orgullosos, ni soberbios, ni pedantes y viven una vida sencilla y armoniosa para ofrecerla al Señor. Bienaventurados o felices todos aquellos que se acuerdan de sus hermanos, porque no me pueden hacer creer a Mí si dicen que me aman y no aman a vuestros hermanos, como dice el Evangelio: si dicen que me aman a Mí que no ven ¿eh? a nuestros hermanos que ven…, o mejor dicho al revés, “si no aman a los que ven tampoco me aman a Mí”.

Es decir, ustedes siempre tienen que tomar conciencia de que han sido creados a imagen y semejanza de Dios, entonces ustedes son Mis hijos y Yo soy vuestro padre, no por un día o dos sino por toda una eternidad ¿mmm?, en consecuencia si Yo soy el Padre de ustedes todos los que tienen cerca o lejos son vuestros hermanos y que Yo sepa los hermanos deben amarse ¿mmm?.

Por eso, bienaventurados los que aman a sus hermanos porque están cumpliendo con aquello que dije: “un mandamiento nuevo les doy, que se amen unos a otros como Yo los he amado”. Bienaventurados y muy felices aquellos que tienen una vida simple, sencilla, que no tienen ostentación ni lujo, ni ninguna de esas cosas que alteran tanto la vida del hombre, felices porque han entendido lo esencial, que es vivir de esa forma. Felices aquellos que no son ni glotones, ni toman en exceso, ni tienen ninguna de esas costumbres que les perjudica la salud, bienaventurados porque van a gozar de una vida muy profunda y muy buena.

Mis queridos, compréndanlo y entiéndanlo de una vez para siempre aunque Yo se los voy a ir recordando, que todos aquellos que me aman son felices, a pesar de que las cosas no vayan tantas veces como deberían ir, a pesar de todos los dolores e incertidumbres que haya en la vida, pero aquellos que me aman y que permiten que Yo los ame ¿mmm?, de alguna manera son felices.

Aquellos que quieren huir de Mí, no saben que Yo los sigo siempre hasta el último día para que me abran su corazón, porque Yo quiero amarlos, Mi tarea, Mi oficio, Mi preocupación es amarlos a todos, sin distinción, ni raza, ni religión, ni color, ni sexo, Yo quiero amarlos a todos siempre, si alguno no me quiere a Mí, si alguno no me ama, bueno Yo lo respeto y espero, espero hasta que me abra su corazón y me deje entrar, entonces como dice el Evangelio: “entraré y cenaré junto con él”, que quiere decir: compartiré todas sus cosas.

Tengan compasión Mis queridos, por aquellos que han hecho de la vida un jolgorio, es decir una fiesta constante, pero no fiesta buena ¿mmm?; tengan compasión Mis queridos de todos aquellos que son orgullosos, vanidosos, pedantes, es decir puentes rotos que nadie los puede tragar ni pasar ¿eh?; tengan compasión de todos aquellos que andan por los caminos torcidos y no entendieron lo esencial, tengan compasión por aquellos que se han olvidado de que soy su Padre y viven de cualquier forma.

Ahora, tengan compasión de todos, porque antes que ustedes tengan compasión Yo también la tengo con todos ¿eh?, y Yo los estoy amando y siguiendo siempre hasta que un buen día decidan a abrirme su corazón, ¿y si no me lo abren? y bueno, a lo mejor les alcance Mi Misericordia lo mismo, pero siempre están en mejores condiciones aquellos que me aman, pero tengan en cuenta esto, que Mi Misericordia alcanza para todo, porque a veces el que no me ama es porque nadie les enseñó a que me amen, o bien se criaron en un hogar donde Dios no existía, o bien no sé qué bichos los habrá picado, pero, entonces uno no puede hacerles daño a aquellos que no tienen la culpa.

Por eso, ustedes no se preocupen de la vida de los otros en cuanto a qué futuro van a tener, ustedes recen por todos y tengan compasión de todos, eso es fundamental, compasión de todo. ¿Qué quiere decir la palabra compasión?, ustedes ya lo saben, pero se las repito porque siempre repitiendo uno aprende, con junto, pasión sentir, sentir junto con los otros, es decir si alguien se ríe pues bien, pongámonos a tono y riámonos con el, si alguien llora pues bien, pongámonos a tono y lloremos con él la pena que tiene, si alguien está…, bueno de cualquier forma estemos también nosotros de cualquier forma para ¿eh? poder estar a tono con la persona según su estado de ánimo, su preocupación, sus cosas, sus problemas, sus dolores, etc.

Es decir…, tenemos que hablar el idioma que hablan los otros, no podemos ir ni más adelante ni más atrás, el idioma que hablan los otros, eso ¿qué quiere decir?, que no podemos ni adelantarnos demasiado ni quedarnos atrás, sino hablar de acuerdo a como nos pueden entender, ¿con cada uno?, con cada uno de una manera diferente, esa es la base del entendimiento entre los seres humanos, porque si uno habla de una manera y otro de otro seguramente nunca se van a llevar de acuerdo y para llevarse de acuerdo entre los seres humanos hay que deponer muchas cosas, hay que sacrificar algo, hay que adaptarse, hay que tolerar, hay que volver a empezar, en todos los órdenes, no solamente entre los hermanos y la vida de pareja, padres e hijos ¿eh?, todos, es tan lindo aquello de que todos los días hay que empezar de nuevo, en nuestra relación con el Señor y con los hermanos, por eso podemos decir: no cuánto me odiabas ayer sino cuánto me amás hoy y de paso le estamos dando al hombre la oportunidad de que lo que hizo ayer quedó atrás y hoy pueda ser diferente, mejor que el día anterior.

Vieron Mis queridos que fácil es ser cristiano y practicar todas estas cosas que a Mi Mamá y a Mí y al Padre y al Espíritu Santo y a todos los Santos les gusta mucho, porque formamos todos un cuerpo total, pero piensen que esto no es por un día o dos, o cinco u ocho, es por toda una eternidad y no es poco decir toda una eternidad, porque aunque a veces, piensen ustedes si miran la cara de una persona y dicen: ¡ay!, esa persona no me gusta, me cae antipática, pero no te olvides que las vas a tener que ver por toda una eternidad, entonces buscale la forma para que te caiga más simpática, bueno.

Porque del otro lado ¿mmm?, es decir donde estamos todos nosotros allí todo ven todo de todos, así que traten de no tener secretos ni cositas raras por ahí escondidas, porque de este lado se ve todo, se ve absolutamente todo y se sabe todo, así que no anden con vueltas ni cosas raras, porque después uno llega a comprender todo y a saber todo, por supuesto que después de este lado se comprenden mucho mejor las cosas ¿eh? y uno piensa: mirá, que mal pensé de fulano de tal, sin embargo era una buena persona, pero yo como me apure demasiado pensé mal.

Mis queridos, ser cristianos es fácil, ser cristiano es hermoso, ser cristiano es ser feliz, ser cristiano es pensar en toda una eternidad de gozo en presencia del Padre, en presencia de todos los familiares, por toda una eternidad. ¿No es cierto que a ustedes les gusta todo esto y les gusta pensar en esa eternidad de gozo que tendrán todos, junto con la Trinidad, la Virgen y los Santos y por qué no Santos ustedes también?.

Qué hermoso que es todo esto ¿no?, sí.

Amén.