Mensaje del 03 de Junio de 2003

Habla Artemio:

Hoy es 03 de Junio de 2003.

Ya hemos empezado el mes seis del calendario y no se ven grandes progresos en todas las obras, en todas las cosas y por supuesto que me da…, me da pena.

Dice Jesús:

Lo que leíste el otro día, en la Sagrada Escritura, vuelvo a tocar el tema, leíste que Yo llegué a un lugar y vi una multitud que esperaba y sentí compasión de ellos, es decir sentí lo que ellos sentían y me puse a enseñarles largamente, después viene la multiplicación de los panes, después cuando Yo llego a la barca, sobre las aguas; es decir en ese momento se sacó una conclusión, que todo lo que pasó en estos ocho años y lo que continuará puede ser tomado como que Yo me puse a enseñarles a los hombres largamente y nadie puede decir que no porque los Mensajes aquí han roto todos los esquemas de Mensajes anteriores.

Es decir, hay una superabundancia de palabras, de normas, de sugerencias, hay cosas explícitas y otras no tanto, hay cosas que se leen directamente y otras hay que leerlas entre líneas, pero todo ese conjunto es un patrimonio que no tiene igual en los dos mil años de cristianismo, porque puede haber sí el desarrollo de temas por pensadores, por sabios, pero Mi palabra, la de Mi Madre y la de los Santos y Santas que también escriben palabras…, nunca con tanta extensión.

Entonces, todo esto supera la posibilidad de…, supera ampliamente la posibilidad de tomar partido sobre las Revelaciones, porque si pequeñas Revelaciones hizo que muchos discutieran durante años una cantidad así inmensa, es evidente que supera todas las expectativas.

Lo fundamental reside en que la palabra está dicha y va a continuar y temprano o tarde va a llegar y como bien te dije ya en Chile, lo que no pasa en diez mil días pasa en un instante. Ahora, lo importante de todo esto, por supuesto que son las Revelaciones pero todo lo que las Revelaciones están produciendo entre las personas, porque a pesar de que la jerarquía Eclesiástica no haya tomado partido todavía por prudencia…, y que por otra parte no me parece mal por el hecho de que Yo quiero que aquellos que dirigen la Santa Madre Iglesia sean prudentes. Claro, pero la cuestión tampoco es de exagerar, es decir el hombre debe guardar prudencia mientras quedan dudas o pizcas de dudas, pero cuando algo es evidente el demorarlo, el demorar la llegada a los destinatarios entonces se convierte en algo que Yo no voy a sancionar pero la conciencia sí.

Yo me acuerdo que cuando vos eras rector de una Escuela decías, ni bien llegaba el informe sobre el pago de los sueldos al personal, vos decías: si hay que quedarse de noche fuera de hora, pues bien se queda, pero el dinero tiene que llegar lo antes posible a los destinatarios, porque cuando uno administra las cosas que son para otros tiene que tener sumo cuidado en demorarse, así decías, porque horas más a veces en disponer de una cantidad de dinero podía poner en peligro una vida porque quien no tenía dinero no podía disponer de él, entonces era algo sistemático, llegaba el aviso del dinero y había que pagar, sí o sí lo antes posible.

Valga esto, que vos ni te acordabas para las Revelaciones, cuando alguien sabe que está administrando cosas de otros, que sirven para otros y las demoran, están en falta grave, como aquello de no pagar los sueldos con rapidez. Es decir, todo lo que pasa sobre la Tierra tienen fundamento, entonces el hombre tiene libertad para obrar, pero cuidado, cuidado al hacer mal uso de la libertad, porque a veces una sola palabra que Yo puedo decir en las Revelaciones, tal vez puede salvar una vida, como que lo ha hecho muchas veces, no una, sino muchísimas.

Bien, entonces sirva el ejemplo, sirva el ejemplo en cuanto a las Revelaciones se refiere. No es que como dicen los humanos Yo esté sangrando por la herida, aunque sí sangro pero es demasiado el tiempo que todo esto debió ser reconocido, ocho años en los tiempos que corren parecería toda una vida, ¿y?..., por supuesto que ese: ¿y?, tiene que tener puntos suspensivos, aunque lo lógico son tres los puntos suspensivos pero Yo agregaría cientos.

Todos aquellos que tengan caridad de entendimiento que entiendan. Ya una vez dije Yo que la historia siempre está secando sus lágrimas con sus mechones blancos y en todo esto también la historia está secando sus lágrimas, ¿por qué?..., otra vez puntos suspensivos.

Amén.