Mensaje del 18 de Mayo de 2003

Habla Artemio:

Tanto como 18 de Mayo de 2003.

Esta todo lleno, han desaparecido las paredes, si sienten mucho calor es por una razón muy simple, porque Jesús está como el Señor de la Misericordia y es tanto el calor que sale de su corazón, los rayos que inciden sobre nuestros rostros y sobre nuestro cuerpo, entonces piensen: si sobre mi cuerpo están descendiendo los rayos de mi Dios y mi Señor ¿qué miedo puedo tener?, ¿qué enfermedad puedo tener que no se me pase?, ¿qué problemas podré tener que no se me solucionen?, es decir, además hay una cosa importante en todo esto ¿no? que es que tenemos que agradecer también al Señor que esté con nosotros y que haya venido con toda su corte celestial ¿mmm?, es decir ese estado tan especial donde todo está bien, donde todo es amor, donde todas esas pequeñeces como son la envidia, las porquerías que pasan en el mundo ya allí no se ven más ¿mmm?, nadie es celoso, nadie exige más de lo que conviene, no, porque es el estado que vamos a tener por toda una eternidad, bien vale la pena por supuesto, bien vale la pena, enfrentar la vida diariamente con entereza porque hay toda una eternidad que nos espera, pero no solo por esa eternidad sino porque ya en este mundo vivimos de otra forma cuando el Señor está con nosotros.

Y lo vamos a dejar al Señor que de su mensaje…

Dice Jesús:

¿Quién puede creer que un pueblo edificado sobre un cerro, pase desapercibido?, ¿quién puede creer que encendiendo una la luz en la noche, los demás y uno no la vea?; ¿quién puede creer que el camino, la verdad y la vida, como Yo soy, no los lleva siempre a buen fin?; ¿quién puede creer que Yo he castigado alguna vez a alguien?, deben pensar y repensar y volver a pensar, pero con el corazón que Yo soy el Señor de la Misericordia, para eso vengo a este lugar, a traer este mensaje y por supuesto muchas cosas más.

Y ustedes dirán: ¿qué nos viene a decir el Señor de la Misericordia?, en primer lugar Mis queridos les digo que los amo, no por un día o dos sino por toda una eternidad, que más puedo decirles… todo podría concretarse en ese amor que les tengo, pero hay que explicitarlo, hay que explicarlo, hay que darlo a entender y no solamente Yo sino cada uno de ustedes y por supuesto cada uno de aquellos que son ministros de la palabra. Mis queridos, ustedes o cualquiera, sean siempre emisarios ante cualquiera, de paz, de amor, de comprensión, olvídense de todas las cosas que separan, que generan odios, venganzas, celos, envidias, que se vea con vuestra sola presencia que detrás, que dentro, que delante de ustedes, hay algo más que vuestra persona, estoy Yo, formando parte de la Trinidad con Mi Padre y el Espíritu Santo y si ustedes quieren también está Mi Mamá.

Entonces, en qué puedo fundamentar mis temores, mis angustias, mis problemas, mis dramas, todo aquello que a veces me quita la paz, todos aquellos que tienen problemas personales o desórdenes en su conducta, o algo que no va, entonces busca al médico, si el médico lo dijo… listo, ¿por qué no me buscan a Mi?, si Yo los he visto desde la cero hora, desde que fueron creados, son hechos a Mi imagen y semejanza, quién más que Yo para cuidarlos; ¿no hay que ir de los médicos entonces?, si hay que ir también pero, pero hay que esperar que Yo les hable a través del médico, cuando vean que no son tratados con toda la caridad que corresponde… entonces díganse con claridad, no, este no es del Señor, detrás de un soberbio, de un orgulloso, de un pedante, de un sabelotodo… nunca puede estar el Señor, entonces busquen otro hasta que puedan comprobar que Yo les estoy hablando a través de esa persona, sino no.

Distinto irían las cosas en el mundo, si cada uno se pidiera sus derechos como hombre en cuanto a su dignidad esencial de persona, porqué otro, porque haya estudiado, o porque está malhumorado, o por lo que sea, no me va a tratar como un hermano; entonces sin perder la serenidad se lo haré ver, si entiende nos entenderemos, si no entiende iré a buscar a alguien que me entienda, porque todos usamos mucho la palabra diálogo pero, diálogo es exactamente dos o más ante una realidad para confirmarla o cambiarla. Supongamos si alguien está enfermo esa es su realidad, entonces al hablar con el médico o con cualquier profesional, él tendrá que poner sus argumentos, yo los míos y tendremos que llegar a un acuerdo para que yo empiece a sanarme ya con la palabra que él me dijo es decir, él tiene que convencerme, que quiere decir vencer juntos.

Así pasa con todas las personas, donde hay alguno que busca pleitos y peleas y celos y envidias y todo, bueno, no lo desprecio pero traten de hacerle entender y si no entiende apártense hasta que pueda entender. No hay diálogo cuando se habla otro idioma, valga esto para todo. Ahora, en el diálogo necesariamente los que están presentes ¿todos deben hablar?, puede que si, puede que no, pero a veces puede haber muy bien diálogo guardando silencio, o acaso ustedes no han visto esos viejitos que están horas sin decirse una palabra, pero están dialogando sobre todo sin decir nada.

Muchas veces las palabras estropean el diálogo, cuánto puede más una caricia, poner la mano sobre el hombro, tocar suavemente el rostro de alguien, sonreír, hacia ese mundo debemos aspirar, “ahí donde viene uno y hace diez, pongan más amor que él y van a hacer cientos”, si alguien les trata mal sonrían, no con suficiencia sino para convencerle al otro que no les llegó el maltrato de él, porque ustedes están pensando que él es un hermano que a lo mejor en ese momento está desorbitado por problemas de cualquier naturaleza y en todo caso uno puede volver después para entenderse. Al que grita respóndanle con un susurro; al que se burla de ustedes sonríanle y márchense sin decir una palabra, la burla va a corroer su alma, si a ustedes no los hizo reaccionar.

Porque en todo Mis queridos, tienen que partir siempre de una base, si son todos hermanos, el amor debe privilegiar por sobre todas las cosas la relación, la relación, entonces Mis queridos, que se vea de lejos que me pertenecen a Mi, que de lejos se distingan, ya sé no todos distinguen pero hay que darle tiempo a las personas, hay que darles tiempo y si dándole tiempo incluso no entienden… pues bien, piensen que, en Mi Reino hay muchas estancias, mansiones, casas, es donde cada uno ocupará el lugar de acuerdo a lo que pudo entender, pero sobre todo por cuánto amó.

De esto no se olviden nunca, cuando vean que insisten, insisten, insisten y todo sigue igual, pues no abandonen el intento pero esperen mejor oportunidad, porque de nada vale que alguien les diga que si porque ustedes los están obligando a que digan que si. Yo pretendo que ustedes no se ajusten a la ley, a la Torá, Yo les pido que privilegien siempre al hombre, es decir entre la ley y el hombre deben quedarse siempre con el hombre, religiosamente hablando por supuesto.

Conocen ya Mi concepto sobre este tema, una es la ley del Señor y otra es la ley humana, hecha por los hombres, que se hacen para resguardar la vida de las personas, por eso una vez Yo dije o dos o tres: “hagan con este pobre infeliz lo que crean necesario”, si quieren cerrarlo enciérrenlo para que no le siga haciendo daño a la sociedad, pero al hacerlo apiádense de él, porque seguramente este hombre o está enfermo, o es ignorante, o no tiene todas las luces suficiente para entender las cosas, entonces es como querer entablar un diálogo con una persona que ha tomado en exceso, ¿alguno probó?, entonces sabrá que nunca llegan a un acuerdo y así pasa con mucha gente. Y hay que dispensarle a todos, según la Misericordia, todos los beneficios y todo el amor que corresponde, pero también hay que pensar: ¿no estaré invirtiendo demasiado en alguien que no se lo merece?, ¿no tendré que buscar a otros más? No se lo merece, no en cuanto a que es persona, no se merece que a lo mejor pierda el tiempo tratando de convencer a alguien que nunca podré convencer porque su mente no alcanza a entender las cosas.

En todo esto a veces se camina sobre el filo de una navaja entre hacer bien o mal las cosas, pero si ustedes son guiados por el amor no se van a equivocar nunca y si se equivocaran, cuando uno se equivoca por amor y con amor no produce ningún efecto maligno, no, de eso hay que convencerse pero también hay que convencerse cuál es el amor verdadero que uno debe tener por todos, ¿mmm?, ¿habrá que insistir en lo que decía la Madre Teresa? que: “hay que amar hasta que duela”, o bien como en una película de hace muchos años en que se hacía que ver que: ‘’amar es nunca tener que pedir perdón y amar es cambiar de casa el alma personal y ponerla en el lugar del otro’’. No sé tal vez ustedes dirán: el Señor en esta tarde se demora diciendo lo que ya sabemos, Mis queridos, nunca se crean que saben todo respecto al amor porque todos los días aprenderán siempre cosas nuevas, así como cada día habrá mayor conversión y cada día tiene circunstancias diferentes y en consecuencia lo que ayer pudo ser óptimo hoy ya no lo es tanto porque cambiaron las circunstancias.

Por eso les decía, en todos esos temas se camina siempre sobre el filo de una navaja, ¿qué quiero decir con esto?, con la posibilidad de equivocarse pero, si lo hacen con amor no tengan ningún temor.

Bueno, ya las sombras de la noche cayeron sobre las cosas y como dice la Sagrada Escritura: “cuando cae el sol el alma llama a cobijo”, y Yo busco siempre un lugar donde reclinar Mi cabeza, ¿cómo están ustedes Mis queridos?, ¿disponibles para que Yo pueda reclinar Mi cabeza en vuestro corazón?, ¿están disponibles?, piénsenlo, Yo estoy esperando.

Amén.

Habla Artemio:

Dice el Padre Pío, San Pío de Pietralcina que esto no es para que lo traduzcan, él no quiere traer problemas pero tiene ganas de decirlo.

Dice el Padre Pío:

Le (El) beati (bendecido) tudini del cuotidiano (cotidiano), beati colore (esas personas) quiano selto divivere sobriamente per (para) condidere el oro bene conipiu poberty. Beati coloro que renunciano a piu (más) oferti di (de) laboro per resolvere (sin embargo…) el problemi del disocupati. Beati funcionari que es… tentano di risolver el problema de la persona no le infromati (informado). Baeti y banquiere il comerciante, el agenti (agentes) di bendita que no aprofitano de la situacione per aumentare il oro guadañe (vadee algunos). Beati polidichi es sindicalisti que es simpre nano atrovare solucione (empequeñezca para encontrar solucione) concrete a la desocupacione. Beati noi cuando es: meteremos di pensare, que males el no frodare tanto lo fano tuti (ninguno para engañar tanto). Allora la vita sociale sará una anticipacione del Reino de … .

Yo e fato mia, mio que estos escritos de Paula Bella, li trovato molto bono, pero no, no hace falta que traduzcan esto, no quiero traerles problemas.

Amén.