Mensaje del 26 de Abril de 2003

Habla Artemio:

Hoy es sábado 26, día anterior al día de la Misericordia, es posible que sea después de Pascua la fiesta más grande del año.

Dice Jesús:

"Bienaventurados los presentes, porque he oído sus palabras, escuchado lo que cada uno me contó y contabilizado todas las cosas que me dijeron; bienaventurados porque, sobre la Tierra, en este momento, ustedes son los únicos que han tenido el privilegio de que el Hijo de Dios y Dios mismo en persona, les diera la absolución de vuestras faltas y escuchara a todo vuestro interior; bienaventurados porque, son tan pocos".

Llegará el día en que miles y miles y miles de personas lleguen el día anterior al día de la Misericordia para los festejos, y también cantidades innumerables lo hará el 15 de Septiembre, porque el Templo del Tercer Milenio estará bajo la advocación de Jesús de la Misericordia y de Mi Mamá, con el nombre de Inmaculado Corazón de María; será el último día antes de la Misericordia, que son pocos, ya el próximo serán muchísimos, Yo lo sé, pero ustedes no, y tampoco les voy a adelantar nada. Bienaventurados ¿eh?, es decir felices ustedes, porque en vuestros pulmones estuvo aire que Yo respiraba, y todos los que están aquí adentro, pero especialmente Yo que estaba allí cerquita, es decir todo vuestro organismo hasta la última de las células está bendecida por Mí.

Es una pena que muchos países en el mundo tengan tan poco en cuenta el día de mañana, pero por supuesto, los hombres tienen que reprocharse en no haberme dado a conocer antes, es decir supieron desde siempre de la existencia de la Misericordia, pero de un día especialmente dedicado no, y tampoco supieron de Santa Faustina, a quien le di Mis Mensajes de la Misericordia, y tampoco saben que esos mensajes de la Misericordia los continuo en este lugar y se los doy a Artemio desde hace ocho años, bueno en realidad hace sesenta y cinco años que se los estoy dando, digamos las cosas bien, llamemos a todo por su nombre ¿mmm?.

Me acuerdo que era un tiempo, Yo te decía: que me dabas trabajo y me hacías sufrir, pero hace mucho tiempo, ahora el que te da trabajo y Él permite que vos sufras toda la enormidad que estás sufriendo… ahora sí viene de MÍ parte, Yo no te pido que analices ni entiendas, solamente te pido que aceptes, y hay formas y formas de aceptar, a veces se puede aceptar con una palabrota y está bien porque uno es un ser humano, y otras veces así simplemente, y otras veces: y bueno Señor no hay más remedio, dale nomás, pero en todos los casos tiene el mismo valor. No puedo pedirle a alguien que es hombre que tenga la fortaleza de Dios, entonces cuando a uno le duele algo sufre por lo que le duele. Por eso, si no lo tenías en cuenta Yo te lo digo para que lo tengas en cuenta.

Piensen en todo lo que me han confidenciado y quédense en paz porque las cosas que me dijeron ya no son de ustedes, son Mías, en consecuencia si son Mías ya no piensen más en ellas, o piensen de otra forma.

Los amo tiernamente y mañana recordaremos el amor obrando, que es Mi Misericordia.

Amén.