Mensaje del 28 de Marzo de 2003

Habla Artemio:

Hoy es 28 de Marzo de 2003.

El Señor está con nosotros como todos los días, su Mamá y todos los Santos.

El Señor me ha mostrado hoy dos campos inmensos llenos de refugiados que están esperando morir donde ni comen, ni toman agua, un inmenso campo con hombres y otro con mujeres y niños. Dentro de todo lo que más me impresionó es ver como los niños se pinchan en algunas partes del cuerpo para chupar su sangre por la sed que tienen. Nunca se me hubiera ocurrido que podía ver todo eso y mientras siga las bendiciones que el Señor me pidió, un niño viene corriendo toma mi mano izquierda y empieza a succionar de un estigma, nunca pensé que podía tener esta experiencia, nunca. Solamente viéndolo se puede creer hasta donde llega la maldad de los hombres, no sé si decir maldad, porque ellos seguramente creerán que hacen bien. ¿Qué podemos decir Señor ante tanta barbarie?, ¿qué podemos hacer Señor?, ¿qué podemos decir si las oraciones quedan cortadas en nuestros labios pensando en los labios resecos de aquellos que se están muriendo de sed?, Señor creo que lo único que podemos hacer es guardar silencio y pensar que estamos continuamente bajo tu mirada, la de tu Madre y la de todos los Santos, exactamente eso Señor, estar bajo tu mirada Señor, cubrirnos con tu mirada y la mirada de tu Mamá u decir con todas nuestras fuerzas: yo soy de Jesús, yo soy de Jesús, yo soy de Jesús, para corroborar que uno está al margen de todo ese sufrimiento. Es decir que nunca llegaríamos a hacer tanto daño a nadie sabiendo que uno es tuyo Señor, ni siquiera un pequeño insecto matamos porque si porque nos parece que estamos alterando el orden que hay en la naturaleza, mientras que otros hombres, millones están en contra de otros por sus intereses y porque el maligno ha inundado sus almas, haciéndoles creer que están actuando en nombre tuyo Señor.

Conserva siempre nuestra conciencia clara para que en cada acto de nuestra vida y siguiendo los dictados del Espíritu Santo, sepamos discernir que es lo que corresponde ante cada cosa, desde la mas simple hasta la más compleja. Además Señor si uno dice: soy de Jesús, se coloca como un ser disponible para que lo que vos quieras hacer con nosotros, es decir lo que tratamos de resaltar Señor es esa adición a todo lo que es tuyo, a todo lo que es bueno, a todo lo que es santo, a todo lo que permanece y permanecerá, porque estamos seguros Señor que aliados con el mal los hombres no pueden llegar a ninguna parte y los triunfos que pueden tener momentáneos son nada mas que eso, triunfos momentáneos, como bien dijiste Señor. Para todos aquellos que están odiando a sus hermanos porque los matan, para todos ha comenzado la cuenta regresiva, no porque vos quieras castigarlos Señor, sino por una simple razón de establecer las consecuencias lógicas, es decir la compensación que cada acción que hacemos los hombres tiene como consecuencia. Por eso Señor nosotros rarificamos una y mil veces todo el amor que te tenemos Señor, porque es algo que si bien vos lo sabes pero nos gusta repetir Señor, nos gusta repetir que te amamos Señor, que te amamos tanto que aquellos sufrimientos de los hombres también son nuestros sufrimientos y que todo te lo ofrecemos a vos Señor para que completes tu pasión y pueda seguir pagando las deudas de tantos que deben y deben enormidades, de tantos que están equivocando el camino, que no están peregrinando hacia la Jerusalén celestial, sino que están peregrinando hacia la oscuridad total y la oscuridad por mucho tiempo, porque por una elemental ley de la compensación, no se puede hacer tanto daño sin recibir la pena por ese daño realizado.

Señor Jesús toma nuestro cuerpo, nuestra alma, toma cada una de las partecitas de nuestro cuerpo, cada célula y que todas ellas entonen un cántico de alabanza y de adoración Señor, como una forma de decirte: yo soy de Jesús y nunca podría consentir tanto mal y tanto dolor. No sé Señor que pasará dentro de un momento, ni más tarde, ni mañana, no lo sé Señor pero sé que estamos bajo tu mirada, sé que tus ojos están clavados en nosotros para infundirnos todo el amor necesario para sobrevivir a tanta infamia Señor, a tanta infamia.

Pensamos y estamos seguros que vos seguís siendo Jesús: es la piedra de Horeb que está brotando, agua de vida saludable para ti, Cristo es la peña de Horeb que está brotando, agua de vida saludable para ti, ven a beberla que es más dulce que la miel, refresca el alma, refresca todo tu ser, ven a beberla que es más dulce que la miel, refresca el alma, refresca todo tu ser. Cristo es el lirio del valle de las flores, El es la rosa blanca y pura del salón, Cristo es al alma y amor de los amores, El es la fuente de al eterna salvación. Ven a beberla que es más dulce que la miel, refresca el alma, refresca todo tu ser, ven a beberla que es más dulce que la miel, refresca el alma, refresca todo tu ser.

Y todo esto continua como siempre en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Se termina la grabación…..……………………