Mensaje del 03 de Junio de 2002

Dice Jesús:

Ámense unos a otros como Yo los he amado.

Es cierto lo que hablaban al comienzo no se puede empezar nada, absolutamente nada si no se hace el planteo de que debo amar a mi hermano, al amar a mi hermano estoy reconociendo que tengo un Padre común y Yo ¿qué les digo en este día?, cada uno con sus trabajos, sus luchas, sus pesares, sus angustias, sus problemas, sus cosas, qué puede decirles el Hijo de Dios y Dios mismo cuando a veces parece que uno esta un poco en un pozo dónde no se ve mucha luz, y piensen también que a veces el Hijo de Dios puede estar también en un pozo y no ver mucha luz, lo digo por Mi naturaleza humana también, ¿no?.

Y quiero retomar la palabra del Evangelio con la Resurrección de Lázaro, Yo estoy convencido de que la mayoría no alcanza a entender que es la Resurrección de Lázaro, pero no por mala voluntad sino porque no es un simple volver a la vida, que ya de por sí representa un milagro, la cuestión fundamental reside en que: cuántas veces nosotros podemos estar como exactamente como Lázaro y nos hace falta alguien que nos diga "levántate, camina", ustedes dirán ¿y uno puede decírselo solo?, todos sabemos que aquello que nos dicen los demás nos impresiona mejor que aquello que nos decimos a nosotros mismos, ahora no necesariamente hay que estar enterrado como Lázaro para estar muerto, uno diariamente se cruza en la calle con personas que son muertos sin sepultura, es decir gente que ya no aspira a nada, que no quiere nada, que no le importa nada, que ya no tiene nada para que vivir ni para quién vivir, Yo creo que hay una forma…, una forma de haberme presentado a Mi, una forma inadecuada, porque por difícil que sea, por duro que sea, por feo que sea siempre podemos resucitar, hace falta una voz que nos diga: "ven, vení conmigo, te amo, te necesito, no puedo vivir sin vos, veo por tus ojos, respiro con tu mismo aliento", es decir, el hombre que está muerto prácticamente sobre la tierra, es por una razón muy simple no tiene amor, y entonces ¿cómo habrá que hacer para que el amor llegue a todos?, ¿pararse en una esquina y empezar a decir cosas?, no, no es práctico, habrá que empezar por el hogar entre los esposos, con los hijos, con los familiares, ¿verdad?, pero ¿por qué el hombre es tan mezquino para manifestar amor a los otros?, ¿por qué?, es suficiente una mirada, un gesto, es suficiente una sonrisa, es suficiente decir adiós con esa alegría de desearle al otro que su camino se dirige al Señor.

Entonces, si nosotros vemos tantos muertos sin sepultura en la calle cotidianamente, deberemos ingeniarnos como para llegar hasta esa persona y producir un efecto reparador en su vida, ¿se han animado alguna vez a acercarse a alguien desconocido o semidesconocido a conversar y lentamente introducirlo en el tipo de relaciones humanas, etcétera?, bueno, claro al hacerlo pueden llevarse alguna sorpresa porque mucha gente lo toma como un tirarse el lance con algún interés creado, pero si ustedes son limpios en vuestras palabras, porque vuestro corazón está limpio, porque la boca rebosa lo que sale del corazón, entonces la otra parte sentirá todo eso.

El mundo sigue haciendo así, evolucionado tan poquito, porque hay necesidad de gente que ame más y ¿por qué no ama más?, digo Yo, bueno los problemas son múltiples, habría que buscarlos en el pasado, habría que buscarlos en el presente, habría que buscarlos en que a veces se fue estafado en el amor y entonces uno es reacio a prestarse a dar amor, incluso el amor al Señor. Es por eso cada uno al levantarse tendría que trazarse como una meta, tendría que establecer algún objetivo, tendría que proponerse alguna cuestión fundamental, aquellos que tengo lejos, que debería estar más cerca, aquellos que no me quieren en absoluto, si iniciamos con ellos un diálogo amable por casualidad, en un momento determinado, en un negocio haciendo una compra, tal vez podamos llegar a entendernos, el mundo está como está por falta de amor y tampoco le pide al Espíritu Santo, que es la Gran Cruzada que trajo Mi Mamá, para que le inspire como ponerse a tono para el amor, muchos creen que lo tienen pero no, lo que tienen es un querer que mira al otro como una posible… trozo de comida o una naranja dónde la voy a exprimir hasta la última gota y después tirarla, claro de esa forma no llegamos a nada ¿no?.

Todos los días hay que empezar de nuevo y al que era enemigo ayer podría ser que no, en los amores todos los días hay que plantearse el problema, hoy debo empezar de nuevo, si pero lo que me hizo no tiene precio, me hizo mal, me hizo… no, no, no, cuando uno quiere empezar de nuevo, quiere empezar a edificar sin mentiras de por medio, ni siquiera el intento de una mentira, porque las cosas se saben siempre, la mentira tiene piernas cortas decían, y es cierto muy cortas; la verdad la alcanza en forma inmediata.

Por eso, hoy Mis queridos les propongo, les propongo recuperar con todas las fuerzas ese estado de actitud permanente de salir a la calle o estar en mi casa o hacer cualquier cosa pensando en que puedo reconquistar a alguno con afecto, ustedes creerán que las grandes crisis que pasan los países tienen otro origen que este, para nada, para nada, el hombre que ama sinceramente está como bañado de una luz resplandeciente y adonde va…, adonde va deja como una estela luminosa aunque nadie la vea y entonces los demás se contagian todo eso.

No quiero hablarles demasiado, solamente recomendarles que Yo soy amor, solamente se me entiende si se apela al amor por excelencia, los invito entonces a rebobinar lo que dijimos hoy, le nazca a ustedes…, le nazca a ustedes ese deseo esa vocación de servicio que en primera y última instancia es un don del Señor.

Saben que los amo con toda Mi ternura y todas las fuerzas de Mi corazón.

Amén.