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Mensaje del 18 de Abril de 2001

¿Ustedes sabían que la Madre de Dios también se emociona y a veces le cuesta decir alguna palabra?, ¿sabían eso ustedes?. Mensaje del 18 de Abril de 2001

Habla Artemio:

Ven Señor Jesús, ven, has estado siempre con nosotros, pero es habitual que vos des tu Mensaje también en esta noche, miércoles 18 de Abril del 2001, próximos a festejar el domingo de la Misericordia.

Ya estás entre nosotros Señor justamente con todos tus Santos, tu Madre y todos, vamos a aguadar un poquito de silencio Señor para que todos te pidan por sus intenciones personales.

Habla Señor.

Dice Jesús:


Bienaventurados todos ustedes porque creen en Mí y en Mis promesas; bienaventurados por vuestra constancia, por vuestro esfuerzo y por todo lo que son; bienaventurados porque han confiado siempre en Mi palabra, en la palabra de Mi Madre y en la de los Santos. Bienaventurados porque muchos no ven y creen más que si vieran; bienaventurados porque son humildes, sencillos de corazón, porque han entendido lo esencial y llenan Mi alma de gozo; bienaventurados Mis queridos, porque cada uno en su lugar me sigue, me atiende, me quiere, me ama y me llena de alegría.

Bienaventurados porque a pesar de los dolores cotidianos nunca les desaparece la risa o la sonrisa de vuestro rostro; bienaventurados Mis queridos, por vuestra constancia en el tiempo y el espacio; bienaventurados porque, no los negaré delante de Mi Padre. Bienaventurados porque aquí tuve un lugar donde recostar Mi cabeza; bienaventurados porque, Mi palabra, la palabra de la Misericordia, han hecho posible que llegue hasta los rincones más remotos del planeta.
Bienaventurados porque todos los días cuando ven el sol desean que ese sol salga para todos; bienaventurados Mis queridos porque, los amo con toda Mi alma, con todo Mi Corazón y porque entro a cada instante en vuestra casa, que es vuestro corazón, porque siempre está disponible para recibirme.
Bienaventurados porque puedo darles las gracias por todo lo que hacen por Mí.

Dice Nuestra Señora:

¿Ustedes sabían que la Madre de Dios también se emociona y a veces le cuesta decir alguna palabra?, ¿sabían eso ustedes?.

Todo lo que ha pasado esta noche acá ha hecho reposar Mi Corazón y puedo asegurarles que la llama de amor que sale de él ha incendiado a toda la Tierra.

No les digo más, no les hablo más esta noche porque Mi congoja es grande, porque si ustedes vieran todo lo que Yo estoy viendo no podrían resistirlo.

Gracias Mis queridos, por amarme como me aman, por servirme como me sirven, por alabarme como lo hacen, gracias Mis queridos, eternamente gracias.

Amén.

Fundación Jesús de la Misericordia y Corazón Inmaculado de María  |  Aprobada por Res. 139 A - Gob.de Córdoba – Sec. De Justicia – Dir.de Ins.de Pers.Jur.  |  Dirección: 9 de Julio 1162  |  Teléfono: 03537 – 431197 - 2553  |  Justiniano Posse – (Cba.)

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