Mi alma estará triste hasta la muerte. Ustedes me tienen entre ustedes resucitado pero estamos recordando estos episodios como una forma de tomar una vez más conciencia de lo que representa cada uno de estos días.

Mensaje del 19 de Abril de 2000

Habla Artemio:

Hoy es 19 de Abril del 00.

Habla Señor que te estamos escuchando.

Dice Jesús:

Mi alma estará triste hasta la muerte. Ustedes me tienen entre ustedes resucitado pero estamos recordando estos episodios como una forma de tomar una vez más conciencia de lo que representa cada uno de estos días.

Hoy quiero decirles solamente algunas palabras sobre la soledad, ¿hay momentos más triste en el hombre que cuando está solo y se siente solo?, es decir, aunque esté rodeado de otros hombres pero solo en cuanto a que nadie piensa en él ni le quiere, ni le ama.

Yo les propongo que piensen en Mi soledad, ustedes dirán: ¿qué puede importarle estar solo al Hijo de Dios?, quien así piensa olvida Mis aspectos humanos. Es posible que cualquier reo a través del tiempo haya sufrido como Yo sufrí o más, pero cada uno siente su propio sufrimiento como dicen, pero hay una diferencia entre el sufrimiento de los reos que mueren diariamente y Mi sufrimiento, porque mientras Yo estaba en ese estado deplorable, en esa situación tan dolorosa y terrible cada uno de ustedes estaba en Mi mente. Mi sufrimiento no era estéril, estaba sufriendo por ustedes, solamente quien hace un acto de amor grande puede entender esto, de otra forma no se entiende.

¿Qué es lo que no se entiende?, que alguien siendo Todopoderoso, Hijo del Padre, tenga que pasar todas las humillaciones, todos los, todas las cosas terribles que uno tuvo que pasar… (se dio vuelta la cinta)…, todas las cosas que uno tuvo que pasar con un sentido, el amor por ustedes.

No hay nada superior que dar la vida por los amigos y Yo he dado Mi vida por ustedes, así lo estableció Mi Padre y así se cumplió, todo en forma inexorable, no hubo nada que no se hubiese cumplido como lo quiso Mi Padre, nada.

Entonces Mis queridos, tengan en cuenta que si Yo represento algo para ustedes, si ocupo algún lugar en vuestros corazones, pequeño o grande, piensen que me hacen feliz cuando pueden hacer lo que Yo estoy haciendo por ustedes, es decir dar Mi vida.

Estas cosas no son entendibles fácilmente, ni siquiera hablando el lenguaje del amor total, pero hay que hacer un pequeño esfuerzo o gran esfuerzo también para entender. El Padre ama tanto al hombre que manda a su Hijo para que muera muerte de cruz, entonces ante cada sufrimiento, ante cada cosa acordarse que se están perdiendo pedacitos de vida todos los días, realmente lo están ganando, porque esta ley es así, amar hasta los extremos sino no vale el amor y no solo este amor sino todos los tipos de amor o clases de amor que haya en el mundo. No se ama verdaderamente mientras no se ama hasta los extremos, allí está la cuestión fundamental, nadie puede decir que amó de veras si no ama hasta los últimos extremos.

Dice Nuestra Madre:

Cuando en cualquier circunstancia de la vida sientan que vuestro corazón está
como apretado por la angustia de cualquier tipo.

Piensen en Mi Corazón cuando estaba previendo la muerte de Mi Hijo, como cualquier madre, pero tal vez en el fondo tenía una satisfacción encubierta porque sabía que todo eso debía cumplirse, por ustedes, por cada uno de ustedes, por cada uno de los hombres que habitaron sobre esta Tierra y habitarán hasta el fin de los tiempos, cada uno.

Abrir vuestros corazones y dejar entrar todo este torrente de amor que en este día se vierte sobre todos los hombres, sobre toda la humanidad, sobre todos los continentes, como para llamar al hombre a reflexión, a la toma de conciencia, para llamar al hombre y decirle que por aquí está el camino, no hay otro, no hay otro. Han ensayado miles y miles de métodos y ninguno les ha dado resultado, cuando caigan en la cuenta que éste es el único, entonces vuestra vida será plena y valiosa, tendrá sentido y también lo tendrá la muerte porque es una culminación de todo esto y es la apertura a vivir eternamente en los senos del Padre.

Los dolores humanos se vuelven tan pequeñitos cuando se hacen con todo el amor porque tiene un sentido, toda la vida adquiere un sentido, todo tiene una significación, pero todo esto que no sea un motivo de tristeza o en todo caso una tristeza alegre, porque estamos en estos días pasando por todo esto pero con la seguridad del triunfo total.

Qué más se puede pedir.

Amén.