Mensaje del 12 de Abril de 2000

Habla Artemio:

Delante de ti Señor vamos a pedir perdón porque no pedimos antes.

Perdón, perdón, perdóname Señor….

Hoy es 12 de Abril del 00.

Dice Jesús:

Yo quisiera poder decirles a todos los hombres de todas las latitudes qué es lo que me pasa con ustedes. Esto sigue siendo una Revelación Privada pero aunque haga referencia a ustedes ténganlo como para manifestarlo para todos.

Decía que me gustaría proceder con todos los hombres como procedo con ustedes y me gustaría poder decirles a todos cuánto me alegra, cuánto me gratifica a Mí, al Padre, al Espíritu Santo, cuánto gratifica a Mi Mamá, cuánto gratifica a los Santos, a las almas del Purgatorio.

¿Qué es o cuál es el motivo por tanta gratificación?, es fácil de entender, Yo les escuchaba hablar a ustedes en esta noche que consideran distinta, les sentía hablar con tanto énfasis sobre Mi Madre, los Santos, los diversos nombres con que llaman a Mi Madre pero todos tendiendo hacia algo que es la extensión de Mi Reino.

Ahora bien, todo ese fervor para hablar de Mis Santos, de Mi Madre, de las almas del Purgatorio que están esperando el auxilio de ustedes para salir de ese lugar y poder gozar de la Bienaventuranza Eterna, revela repito, todo un estado de ustedes en vuestro corazón que Yo lo siento plenificado por el tema que están teniendo, entonces como dice el Evangelio: vuestros labios y vuestro rostro hablan de la abundancia del corazón.

Por eso, lo que es tan hermoso que Yo observo aquí, cuánto me gustaría que los hombres de todas las latitudes también lo hicieran. El hablar de las cosas de Dios y sentirse gratificado, plenificado al hacerlo está revelando la totalidad de una vida, está revelando todo un mundo en la forma de pensar y eso es tan hermoso, Yo diría que es un transitar plenamente aquí en la Tierra ya dentro de la santidad, dentro del camino de la Santidad, o sino ¿qué dirían ustedes que es un Santo?.

Piensen en todo esto y piensen también que esto que me hace feliz a Mí los hace felices a ustedes, este ejemplo particular lo hago extensivo a todos los hombres.

Toda la armonía del universo se siente complacida cuando alguien con sus fuerzas pequeñas pero enormes porque Yo se las doy se ponen al servicio de una causa muy noble, la más noble de todas, la extensión del Reino que es la extensión del amor plenamente. De allí a ocurrir cosas extraordinarias hay apenas un paso, hoy has tenido noticias de varias personas que se sienten tan diferentes en los últimos tiempos y van cayendo en la cuenta que era verdad aquello de que el agua que tomaban no era simplemente agua bendecida sino agua Sagrada como dijo Mi Madre que salía de Mi Corazón.

Entonces, todos esos estados que revelan algunas personas que se sienten tan bien, tan en paz, tan felices, a lo mejor lleno de problemas y de preocupaciones y sin embargo parecería que tienen alguien por dentro que está cantando himnos de alabanzas y no se explican qué les está pasando pero hay algo que ha nacido o está naciendo que tiene dimensiones gigantescas. No eran palabras, esta agua es el Río de Agua Viva que sale del Corazón de Mi Hijo dijo Mi Madre, que todo lo puede si se la bebe o se la toma de alguna forma con fe, fe directa o indirecta porque no podemos pedirle a un niño que aún no entiende que tenga fe pero cuánto vale la fe de su mamá o bien por aquellos que aún no tomarían de esa agua y alguien la toma por ellos, lo ideal es que cada uno tome el agua.

Y vuelve a repetirse aquello de la mujer junto al pozo cuando Yo le digo: si bebieras de Mi agua ya no tendrías más sed, haciendo referencia a que el Río de Agua Viva es la plenificación total de la persona, entendiendo por eso la conversión total y definitiva y ese estado de euforia, de alegría sin límites que no tiene ningún tipo de explicación, solamente por explicarse a la luz de esto y si a tan corto tiempo han visto estas cosas ¿imaginan cuánto verán aún?.

Así se manejan las cosas en la Economía Divina, si Yo quiero hacerlas porque me parece que así corresponde suceden las maravillas más grandes, las cosas más sublimes, las resoluciones más imposibles.

Por eso, nuevamente los invito a esa entrega total y definitiva en una fe sin límites, directamente sin límites, con esa confianza total y definitiva que nada hay tan maravilloso como estar en las manos del Señor y hacer que el Señor habite en el corazón. Tomen conciencia de todas estas cosas porque es legítimo hacerlo y por otra parte no caerán en la soberbia o en el orgullo porque todo viene de la misma fuente.

Este Corazón atravesado por una lanza que derramó su sangre y sigue derramando todavía, por una razón simple, los amo.

Amén.