Mensaje del 24 de Diciembre de 2008

Los invito a que estén conmigo en el pesebre, con el corazón simplemente, un ratito nada más adorando al Niño ¿eh?, un ratito nomás, no se olviden que allí en ese momento empezó la historia de la salvación del hombre, por eso la Navidad tiene tanta importancia, hermoso, hermoso, precioso. Mensaje del 24 de Diciembre de 2008

Habla Artemio:

… que los chicos se críen bien porque si no hay un niño feliz no hay hombre feliz y por lo que veo la mayoría de los hombres no son felices, porque no fueron niños felices antes ¿eh?, tener un hijo mis queridos sobre todo para los que son jovencitos y en eso están, tener un hijo es algo tan grande y tan terrible y tan maravilloso, háganlo bien, no traigan hijos al mundo así a la marchanta como dicen los chicos ¿no?, no.

Bueno, ahora vamos a leer el Evangelio de hoy, la palabra, a ver qué vamos a ver, para estar preparados vamos a decir: ven, ven, ven, Espíritu Divino, ven, ven, ven, acércate a mí…. Como recién que decíamos: Dios está aquí.

El Evangelio de hoy, miércoles, que además como todo miércoles es de San José, es de Lucas, 2, 6-14: “mientras estaban en Belén, llegó para María el momento del parto y dio a luz a su hijo primogénito. Vayamos por parte, la Virgen dijo en un Mensaje, hace cuatro años, después lo repitió, para todos aquellos que discuten tanto este tema, dijo: Yo fui virgen antes, durante y después del parto, así de simple, no se les ocurra pensar otra cosa porque lo dijo ella ¿eh?, ¿vos crees que el Señor no pudo hacer el milagro también de que la Virgen tuviera el niño sin dejar de ser virgen? ¿no?, bueno. Esta palabra: “dio a luz a su hijo primogénito”, quiere decir primero, es un motivo por el cual los protestantes dicen que tuvo otros hijos, pero no, simplemente dijo: primogénito, nada más. Lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, pues no había lugar para ellos en la sala principal de la casa. El pesebre, en todos los países que hace frío estaba ubicado debajo de la casa, no es un sótano, la casa está en una altura y debajo duerme toda la hacienda, que normalmente como los campos son pequeños pueden ser cuanto mucho diez vacas, alguna oveja, etc., pero nada más y esos animales durmiendo ahí abajo dan calor arriba, por eso uno ve las casas hechas que tienen hendijas anchas para que pase el calor de los animales para arriba, eso en montones de lugares está aún hoy ¿eh?, bueno. En la región había pastores que vivían en el campo y que por las noches se tornaban para cuidar sus rebaños. Se les apareció un Ángel del Señor, y la Gloria los rodeó de claridad. Quedaron muy asustados. Pero el Ángel les dijo: no tengan miedo, pues yo vengo a comunicarles una buena noticia, que será motivo de mucha alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David , porque David era un Profeta que vivió mil años antes de Jesús, ha nacido para ustedes un Salvador, que es el Mesías y el Señor . Mesías quiere decir el enviado de Dios. Miren cómo lo reconocerán: hallarán a un niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en un pesebre. De pronto una multitud de seres celestiales aparecieron junto al Ángel y alababan a Dios con estas palabras: Gloria a Dios en lo más alto del Cielo, y en la Tierra paz a los hombres, esta es la obra de su gracia”. Eso se entona en la Misa el: Gloria a Dios en las alturas y paz a los hombres de buena voluntad ¿eh?.

Bueno, ellos están un tiempito acá pero cuando vienen acercándose los Reyes Magos, que festejamos el 06 ¿no?, que sería el verdadero día para festejar la Navidad porque los Magos, para el mundo conocido eran de Occidente y nosotros estamos en Occidente, para nosotros la verdadera Navidad sería el 06 y no el 24, pero pasó el tiempo, lo borraron ¿eh?, unificaron las cosas, no para el caso es lo mismo. Entonces los Reyes vienen pero como no sabían bien el lugar pasan, lo hablan a Herodes Antipas y le preguntan: nos enteramos que nació aquí el Mesías, el Hijo de Dios, el Rey de Reyes, etc., no sé dice Herodes, no sé dónde está este chico y entonces le dice: bueno, cuando lo encuentran pasen a la vuelta y díganme así yo también voy a honrarlo. Cuando los Reyes llegan y lo honran se dan cuenta que lo de Herodes era una treta pero por eso ellos se van por otro camino, pero dejemos ahí eso ¿no?.

Cuando el Rey se entera del Nacimiento de Jesús manda a matar a todos los niños menores de 4 años o 5 años ¿verdad? para que entre ellos muera también Jesús ¿verdad?, y esto se conoce en el calendario como el día de los inocentes, de la muerte de los inocentes, por eso es una torpeza hacer bromas sobre: que la inocencia te valga como hacen mucha gente, porque es una tomada de pelo muy grande a la muerte de miles de niños, que Herodes Antipas mandó a matar para matar también a Jesús. A todo esto José había recibido al Ángel que le dice: huí José porque sino Herodes va a matar al Niño y parte José para Egipto ¿mmm?, que no estaba tan lejos pero tampoco era cerca ¿no?, bueno. Iban en un burro, María iba arriba y José caminando, y cuando se adentraron en el desierto pasaban las tribus de árabes ¿no?, y José viendo que María corría peligro porque era muy hermosa mujer, le hace que se cubra el rostro, que deje nada más que ver los ojos, para que ningún árabe le echara el ojo viste, entonces así la defiende.

Pero es de una riqueza tan grande pensar en todos los momentos, en el nacimiento por supuesto, los Ángeles que llegan, bla, bla, todo eso es preciosísimo, pero ahí nomás está todo esto de la huída a Egipto y rápido ¿no?, ¿para qué?, se quedan mucho tiempo en Egipto hasta que muere Herodes Antipas y entonces ellos regresan.

Pero antes de llegar a Egipto hay escenas preciosísimas en la vida de Jesús donde José busca los oasis, el oasis en el desierto es un ojo de agua, una laguna, agua que sale de abajo ¿eh?, y cerca del oasis hay palmeras, hay sembrados, hay muchas cosas porque eso es muy fértil, nada más que no hay agua, en los oasis se puede tomar agua y se puede también cultivar plantas, bueno se hacen ustedes la imagen de José subiéndose a las palmeras buscando dátiles de las palmeras del desierto para, molidito se lo daban al bebé, pero María amamantaba al bebé y también ayudaba en la dieta del bebé leche cuajada de cabras que había cerca del oasis y miel silvestre, no es la misma miel que comemos nosotros, es una miel de las avispas que hay en el desierto ¿eh?.

Es decir, toda la comida de Jesús fue esa y se crió primero con la leche de su Mamá y leche cuajada y después leche cuajada y miel y dátiles ¿no?, porque el dátil es una de las poquísimas frutas que tiene todas las propiedades de minerales, vitaminas y lo que se les ocurra ¿eh?, todo, bueno.

Es hermoso ver las escenas cuando José busca encender el fuego, cuando cerca del agua, un lugar fresco, porque el desierto es muy cálido durante el día, por la noche no tanto y menos cerca de un oasis ¿no?.

Ya, les propongo que piensen un poquito lo que María y José habrán pensado, tenemos entre nosotros al Hijo de Dios, no era cualquiera ese chico y el susto que tenía José de no poder cuidarlo lo suficientemente bien ¿verdad?, por eso su preocupación, por eso la preocupación de que los árabes no la vieran a María porque de tan linda se la iban a robar. José con su bastón seguía camino y volvía a parar en otro oasis, así muchos días hasta que llegaron a Egipto, no se conoce tanto de la vida en Egipto pero se crió como todos los chicos se crían ¿verdad?, había amiguitos, como hay hoy día, pero Jesús decía: estos amiguitos vienen porque ya en aquél tiempo usaban las personas a los otros, ¿por qué?, porque venían y le ayudaban a Jesús a hacer pajaritos, palomitas de barro, los chicos le ayudaban, llegado un momento Jesús hacía así y los pájaros de barro se volaban, entonces Jesús le dice a la Madre: Mamá, estos chicos vienen no para jugar conmigo, vienen porque quieren ver cuando los pajaritos se vuelan ¿no?, como todo niño también especulaba un poquito respecto a que los amiguitos lo querían porque ya en ese entonces hacía sus milagros ¿mmm? y como ese otros tantos que no hay tiempo para referirlo ¿no?, pero uno de los más simbólicos es ese de los pajaritos de barro ¿no?, tal vez ni Jesús mismo sabía por qué Él producía esos milagros, tal vez ni Él lo sabía.

Porque este Jesús que se crió como cualquier hijo de nosotros, conocemos de su vida hasta digamos los doce o trece años cuando se pierde y es hallado en el Templo discutiendo con los doctores de la ley sobre las cosas de Dios, de ese momento hasta que comienza la predicación, para algunos Apóstoles empieza antes, para Juan por ejemplo, el Evangelio empieza con el milagro de las Bodas de Caná de Galilea, las bodas cuando convierte el agua en vino pero los estudios que se han hecho y las cosas que sabemos, porque fíjense que interesante, siempre dentro de todas las organizaciones sociales, también dentro de la Iglesia, quisieron borrar muchas cosas y esas cosas estaban anotadas en los Evangelios que se llaman Apócrifos, Evangelios que no es que sean malos sino Apócrifos quiere decir oscuro, no se entiende tan bien ¿eh?, bueno, pero cuando dejaron los cuatro Evangelios: Mateo, Marcos, Lucas y Juan, que forman la Biblia, junto con el Antiguo Testamento, todo lo demás lo quemaron, fogata general, se perdieron, habrán quedado pedacitos por ahí, pero fíjense ustedes qué interesante, en el año 1945, hace poco, una cabra se metió en una cueva cerca de Egipto ¿no? y el pastor la sigue para buscarla porque se le perdía, ¿qué encuentra ese pastor?, 25 jarrones enormes ¿no?, llenos de Documentos de los tiempos de Jesús, alguien se encargó de quemar todo lo otro pero ahí en ese lugar que se llama Nag Hammadi, el pastor encuentra todos los Documentos que habían sido quemados, por esos Documentos sabemos tantísimas cosas ¿verdad?.

En una de los libros que aparecieron, ese que se llama: Jesús de la Misericordia se manifiesta en Justiniano Posse, en ese libro está lo que les estoy diciendo, no así, pero de alguna forma está, pero fíjense ustedes, eso fue en el año 45, justo 50 años antes cuando se encontraron esos Documentos, justo la misma fecha de cuando aquí aparece Jesús por primera vez, en el año 95, en Marzo del 95, ¿coincidencia?, yo no las creo a las coincidencias, yo creo que hay una causa ¿eh?, 45, Marzo del 45 el pastor encuentra los Documentos, Marzo del 95, cincuenta años después empiezan las Revelaciones en este lugar, piénsenlo como quieran, da materia para todo.

Ahora, esos Documentos fueron traducidos por personas de muchos idiomas, entre ellos un argentino que es amigo mío y fue a España, García Bazán, fue a España y allí se tradujeron, todo eso del Nag Hammadi que se encontró allí ¿verdad?, bueno.

El número 5, 1945, el número 5 es para nosotros el número más precioso que hay porque dice: representa todo aquello que de tan grande no se puede medir, lo inconmensurable, el 5 representa lo que no se puede medir, otra cosa más, año 45, año 95, cincuenta años justo, Marzo y Marzo, ustedes dirán: coincidencias, para mí no, para mí no son coincidencias ¿eh?, claro, el encontrar todos esos Documentos nos hacen ver ahora claro montones de cosas, que mucho está reflejado en ese libro que les digo, conociendo esto que les acabo de decir la lectura de ese libro es más fácil, distinto no es tan fácil, pero es un libro hecho para los universitarios de Buenos Aires y del país con otro nivel de lenguaje y todo, no para nosotros viste, bueno.

Entonces, conocemos montones de cosas por eso lo comento, que son todos, que reflejan los tiempos del Señor, el nacimiento y todas las cosas, sino tendríamos muy poquitos Documentos de aquél entonces, que están guardados bajo siete llaves en las bibliotecas vaticanas y otros en la biblioteca de Jerusalén que guardan muy bien los judíos, puede haber fotocopias, puede haber libros pero todo está guardado allí.

Nos fuimos un poco lejos pero tenía que decirlo esto en este día para que ustedes vean que todo esto de la Navidad y del Niñito y todas esas cositas que decimos, no es un cuentito de niño sino tiene fundamento histórico, pasó, pasó todo y hay fechas y hay números y hay Documentos, porque uno dice: ¿y qué habrá pasado?, son mil años, no, pará, hay Documentos que atestiguan las cosas que estamos diciendo ¿eh?, eso nos tiene que dar una seguridad muy grande a nosotros, porque viste como en aquél cuento del zorro ¿no?, que le dice: mostrale el documento, bueno, lo saben por ahí, así es.

Que hermoso es acordarnos de todas esas cosas y ver hasta qué punto como, parecería que el Señor jugara con los tiempos, jugara con todo, en el sentido de: me quemaron los Documentos, pero Yo se los guardé, y ¿quién los encontró?, ¿un científico de París?, no, los encontró una cabra y el pastorcito que dijo: no sé qué es esto, pero debe ser muy importante, que maravilla ¿eh?, lo que no pudieron hacer, destruir lo demás ¿eh?, estaban guardados en una cueva, allí.
Ustedes saben que las cosas en aquél entonces se escribían en la corteza de los árboles y se cortaba y se escribía y además en los cueros de oveja, normalmente allí, yo tengo un pedacito de esos cueros de oveja donde está escrito y siempre a mano por supuesto.

Bien, hemos referido entonces una serie de datos, los hemos asociado con la crianza de nuestros hijos para que se críen bien, para que aprendan a honrar la vida, lo hemos asociado a ciertas cosas que se refieren directamente a las Revelaciones de este lugar, que se dan exactamente cincuenta años después. Si el 5 es lo que no se puede medir, el 0 significa lo perfecto ¿mmm?, lo perfecto, bueno, también el 1 pero el 0 sobre todo ¿eh?, eso para que aquél que tiene algún no sé sobre las Revelaciones entiendan que hasta el Señor tuvo esa delicadeza de hacer coincidir el encuentro de los Documentos con las Revelaciones de este lugar.

A mi me llena de orgullo y a todos los que somos creo, buenas personas tendría que llenarnos de gusto también, bueno.

Aquí estamos Señor en este día pensando todas las cosas que rodean tu Nacimiento y además pensando en aquello que dijimos al comienzo y te vamos a decir Señor esta noche cuando vengas a nosotros, porque vos prometiste: entraré y cenaré con él, ¿qué le vamos a decir?, ese es nuestro problema tal vez, le vamos a hablar de nuestros dolores, de nuestras angustias, ¿le vamos a decir lo bien o lo mal que nos va?, el Señor lo sabe todo, qué nos vamos a poner a contar que estamos enfermos, no, no, no, es muy poco para decirle al Señor porque no es cualquiera, es Él que entra en nuestro corazón a compartir todo.

No será el tiempo ya en la vida de cada uno de nosotros, es decir las mismas palabras que dijo la Virgen María cuando el Arcángel le dice que va a ser Madre del Redentor, qué dice la Madre: “he aquí la cierva del Señor, hágase en Mí según tu palabra”, ¿no será bueno en esta noche cuando Jesús se acerque a nuestro corazón fervoroso, decirle con todas nuestras fuerzas y todo lo que reboza del corazón ¿eh?: mirá Señor, yo soy tu siervo, hablá que yo te escucho, hacé en mí lo que quieras Señor, vos sos Dios, esta noche nace tu Hijo, que también es Dios y hombre, mitad y mitad.

Entonces Señor vos que sos mitad Dios y mitad hombre cuánto entendes de mí Señor, todo, qué me voy a poner a explicarte lo que me pasa, lo que me sucedió, lo que sufrí, lo que, lo que, lo que, no, no. Que hermoso será decirle, pero con el corazón ¿eh?, así por decir nomás, no, no, Señor mirá, yo soy tu siervo, es decir alguien que te obedece, hacé en mí según tu palabra, es decir lo mismo que le dijo al Arcángel tu Mamá hoy te lo digo yo: hacé conmigo lo que quieras Señor, yo no sé lo que me conviene, yo no sé cómo va a ser mi futuro, yo no sé lo que va a pasar en un ratito, menos todavía mi futuro.

Por eso, yo te pido hacé lo que vos quieras conmigo, tu Mamá era una chica de dieciséis años todavía no cumplidos y con toda su confianza le dijo: hacé conmigo Señor tu palabra, y nosotros Señor con toda nuestra debilidad, nuestra precariedad, nuestra poquita cosa te decimos, lo mismo que tu Mamá: servite de nosotros Señor, danos y hacé con nosotros lo que vos quieras, repito, no sabemos lo que nos conviene, no sabemos nada, no conocemos qué va a pasar mañana ni el año que viene, nada, pero vos Señor ves todo, entonces toda tu vida, todo lo mío te lo encomiendo y te lo pongo en tus manos para que vos hagas conmigo lo que quieras, yo no quiero decirte nada Señor, simplemente te digo: necesito Señor al venir a cenar conmigo, necesito que hagas conmigo todo lo que te parece bien, no lo que me parece bien a mí, lo que a vos te parece bien, porque yo sé que vos Señor desde hace miles de años éramos una idea en tu mente y vos ya veías todo y nos amabas, entonces, lo que yo considero mi proyecto de vida, lo que estoy haciendo, etc., etc., me gustaría que coincidiera con lo que vos pensabas de mí, más aún, lo que vos pensabas de mí quiero que coincida con lo poquito que hay en mí, dale Señor, yo necesito que lo hagas.

Señor, me acuerdo en este momento, de ese muchacho francés Foucauld, que en una Navidad le dijo así, de repente como si algo lo hubiera tocado le dijo: mirá Señor, toda mi vida fue vivir de un modo miserable, todas las porquerías del mundo las probé, todas las borracheras las tuve, todas las porquerías más grandes las hice, pero hoy digo basta Señor y abro mi alma y te digo, como te dijo tu Mamá: he aquí tu ciervo, tu ciervo escucha, habla Señor.

Resumimos y ya lo vemos a Carlos de Foucauld en pleno desierto africano vestido simplemente con ropas muy simples por el calor, cerca de un oasis y allí hizo una choza con ramas de palmera y vivió ahí, cultivó la huerta y todo pero no tuvo una vida muy tranquila, ¿por qué?, porque por el lugar pasaban todas las caravanas de beduinos que iban por el desierto y no son muy amigables los beduinos ¿eh?, no son gente amigable, conocemos ya que los árabes cuando odian, odian ¿eh?, bueno. Y entonces le quemaban la choza, lo golpeaban, le hacían de todo, le robaban las frutas y verduras, lo dejaban sin poder comer y Carlos volvía a hacer todo de nuevo, volvía a plantar, volvía a cultivar, hasta que por ahí de nuevo le pasaba lo mismo y él no solamente eso sino que además cuando se daba alguna pequeña escaramuza en el lugar él se acercaba y sanaba a los enfermos, les ayudaba, les curaba sus heridas y todo, bueno, así pasó como diez años, diez, con esa vida y en ese lugar es una enormidad y un buen día un jeque árabe, un jefe, jeque, se acerca a Carlos de Foucauld, y le dice: yo hace mucho tiempo que paso por acá y siempre te hemos destruido la choza, hemos robado tus verduras y tus frutas y te hemos golpeado y vos nunca dijiste una palabra para protestar, nunca, y el jeque árabe sigue: mire señor le dice, en árabe se lo dice: yo quisiera saber quién es su Dios, porque si su Dios hace hombres como usted realmente debe ser el Dios verdadero. Miren que los árabes son los más religiosos de los hombres, terriblemente religiosos, sin embargo este jeque le dice: señor, quiero saber quién es su Dios, porque si hace hombres como te hizo a vos, como lo hace a usted, realmente debe ser el verdadero.

Las conclusiones la sacan ustedes ¿eh?, por eso es hermoso poder decirte hoy nuevamente Señor con el cántico que iniciamos, todos: el Ángel vino de los Cielos…. Que hermoso che, que hermoso, que hermoso ¿eh?, y al lado dice: se siente aquí, se siente aquí, se siente aquí, el Espíritu de Dios se siente aquí…. Si estamos glorificando al Señor el Señor se siente aquí, es precioso, que precioso, no sé, tengo muchas navidades pasadas ya pero la siento como única ésta, no sé por qué, que cosa, por compartirla con ustedes, por pensar en los cincuenta años que les hablé, tantas cosas. Y 24: la Virgen se está peinando….

Bueno, me siento en la obligación, no sé, hermosa obligación de decirles quiénes están en la reunión de hoy, Jesús presidiendo la asamblea, la Virgen, Santa Teresita, hoy como son pocos termino rápido con las bendiciones, más allá está Santa Rita de Casia, está San Pío de Pietralcina, que se cambia de lugar fácilmente, están los tres Francisco, de Asís, Javier y de Paula ¿eh?, está la Madre Teresa de Calcuta, está Santa Faustina, está también, bueno ya voy a empezar con las personas, el Padre Víctor Pugnata, el Padre Mario Pantaleo, el Padre Gabriel que ustedes no conocen ¿mmm?, bueno hay muchos más Santos, Ángeles, hay de todo, por supuesto que está mi mamá y mi hermana y hoy también está mi papá, es medio reacio en venir, por cosas que no tengo por qué contarlas ahora, pero está también él, está, yo hablo de los que conozco ¿eh?, de las personas que conozco, bueno hay dos abuelos de Luis que no hace mucho se murieron, hay también de Hugo R. su papá ¿mmm?, a ver, de Mabel está su papá y su mamá, de Marisa está su papá ¿verdad?, de Hugo ya te dije, bueno ahora digo de otros que por supuesto si tenías temor ya no lo tengas, tu mamá está también, quiere decir que está en la Luz ¿cuántos días hace que murió?..., ocho días, bueno, bueno, veo muchas más personas pero yo no lo sé, hay dos personas de edad tomados de la mano, deben ser esposos, los dos bajitos son, ella tiene el pelo blanco, él con el pelo cortado a la humberta, es decir cortito hacia arriba, también está allí, a ver quién más le puedo decir, hay tres o cuatro niños, hay tres niños que fueron abortados pero del otro lado crecen y están aquí, están aquí esos chicos, ahora se agregaron cuatro más, no miro a nadie, no digo nada de nadie pero pertenecen a ustedes, nunca se van a olvidar de ellos porque los van a encontrar del otro lado ¿eh?, si ustedes creían que se libraban pero no, tal vez no querían librarse de ellos, pero no es problema de ahora resolver, están acá y listo y hay otros familiares de ustedes que están cerca, por ejemplo el papá y la mamá de Osvaldo G. también están aquí, cerca de mí y de Oscar hay tres personas de edad, no sé quiénes serán…, ¿cómo?, tus abuelos, bueno, bueno tu papá Paula… ¿eh?, hay otra persona también, una mujer ahí, no sé quién es, bueno, sería muy largo de decir de todos ¿no?, pero hay tantos, es decir, ustedes ven la Capilla medio vacía pero yo la veo tan llena, todos quieren como robar cámara ¿no?, para manifestarse, los abuelos de Luis están también, cerca de ti hay dos criaturitas que no sé quiénes son, ¿vos sabés quiénes son?..., las dos criaturitas ¿sabés quiénes son?..., y tendrá doce años…, bueno, sí pero del otro lado crecen querida, normalmente hasta los doce, trece, catorce años, tanto los abortos como los chicos crecen…, ¿cómo?..., sí, están, claro pero yo no sé, no los conozco…, hay gente pero no sé si son…, sí, sí señor, bueno, ya que tenés tan cerca de tu mamá pedile a Dios que te de la vista querida ¿eh?, bueno.
Yo pienso que si están tomándolos por el hombro son familiares de ustedes ¿eh?, no hay ninguna duda ¿eh?, que lindo che. A ver si reconoces Hugo tu papá tiene una camisa a cuadritos y un pantalón, no es jean, es medio así pero no es de jean… ¿la camisa?..., sí, pero la camisa a cuadritos, a cuadritos... (se dio vuelta la cinta y se corta la grabación) ….

Dice la Virgen María:

… tener en la panza nada menos que al Hijo de Dios, me costó acostumbrarme, no se dan una idea, cuánto me costó acostumbrarme.

Yo era una niña casi, sí, era tan jovencita y además todo el problema que vino porque José no sabía y que, claro, él me rechazó en silencio, me repudió en silencio pero a Mí me dolía ¿por qué?, porque era Mi esposo, Yo lo amé tanto, lo amé toda Mi vida. Ustedes saben que con Mi esposo que era muy fuerte y viril y un hombre muy, muy importante en Mi vida era todo, lo mismo para Jesús, uy sí, ustedes me creen si les digo que siempre dormimos juntos pero nunca ni siquiera una insinuación de otra cosa.

Mis queridos, quiero que entiendan esto, el amor cuando adquiere así límites tan altos y tan elevados, tan elevados así, el hombre se olvida de todas sus necesidades elementales, así como algunos hasta se olvidan de comer o que se yo, también en José y jamás dijo una palabra, respetó Mi virginidad, más aún les digo: amó Mi virginidad, amó Mi virginidad, él siempre me lo decía y Yo creí que a lo mejor él me estaba como engañando o que se yo, porque vieron un hombre es un hombre siempre ¿no?, y entonces y además joven, fuerte, entonces piensen: él era un hombre, aunque se lo ve medio serio a veces ¿no?, y de paso a vos te reprocho que no lo nombraste porque los viste hoy ¿eh?, estaba ahí, bueno. Y era alegre, era alegre, sobre todo cuando jugaba con el bebé era muy alegre, muy, muy alegre y como se preocupaba, es que no es tan simple ser el Hijo, el Padre Adoptivo de Dios ¿no es cierto? ¿mmm?.

Lo que siento tanto es que tan pocas cosas se dijeron de él, si no fuera por esos datos que escribió Teresa de Jesús prácticamente no sabríamos nada, es decir ustedes no sabrían nada de la vida de José, pero Yo una vez en una Revelación les dije muchas cosas, busquen esa Revelación donde Yo le cuento un montón de cosas de la vida de Mi marido ¿mmm?, háganlo, háganlo, les va a gustar conocer el carácter que tenía, la forma de ser, cuando se sentaba a la mesa, qué cosas le gustaba comer, está todo en la Revelación, búsquenla, no sé, ya hace bastante que se las di, tal vez dos años, pero busquen en la Revelación y van a encontrar todo lo que quieran saber de José ¿mmm?.

Es decir, una gran parte porque fueron muchos los años, pero no se olviden de esto, cuando Jesús muere ya no estaba José ¿eh?, por eso Juan me manda, perdón, Jesús me manda a vivir con Juan ¿mmm?, me manda a vivir con Juan y Yo me quedé toda la vida con Juan hasta que él me hizo volver a Nazareth porque tenía miedo a los judíos que querían hacerle daño a él y no sea cosa que le hagan mal a la Virgen María y entonces me manda de nuevo a Nazareth, pero Yo lo quise siempre y lo amé a través del tiempo porque si bien era un amor lleno de vida espiritual, y sí claro, la Madre de Dios tiene que amar de una manera ¿no?, es lógico, pero también lo quise como hombre, era tan viril, tan fornido, tenía esos músculos tan, claro, pero sobre todo del torso para arriba porque las piernas de un carpintero no son tan fuertes como sus brazos ni su torso ¿eh?.

Bueno, los estoy demorando un poco pero Yo quería decirles algo, sobre todo saben que los quiero un montón, que quiero decirles que estoy siempre con ustedes, que vayan donde vayan Yo los acompaño continuamente, continuamente ¿eh? y junto con Mi Hijo estamos delante y detrás, derecha e izquierda, arriba y abajo, siempre, siempre con ustedes ¿eh?, no se olviden Mis queridos de invocarme, solamente digan: Inmaculado Corazón de María y todo peligro pasó, todo peligro pasó y cuando vean que anda rondando el malo, como dice Pío, entonces con decir: Inmaculado Corazón de María ya está, el malo se va.

Les recomiendo que se acuerden de las almas que están en la oscuridad, en el Purgatorio, les recomiendo que se acuerden también de todos los enfermos, de los presos, de los que están en los neuro psiquiátricos y también se acuerden de todo este Oriente en que Yo viví que no tiene agua para beber, los que beben agua es contaminada, acuérdense de todo eso; ustedes dirán ¿qué podemos hacer nosotros de acá?, pero Yo les digo simplemente hagan eso que la Misericordia de Mi Hijo se encarga de llevar toneladas de agua si ustedes así lo desean y si ustedes están disponibles para que eso ocurra de esa forma, acuérdense ¿eh?, todo Oriente está sediento pero no solamente de agua, del agua natural sino también del pan del amor que no tienen y viven siempre en guerra y siguen viviendo, pero todo eso terminará ¿o acaso Mi Hijo no les dijo cuando anunció la llegada del Tercer Milenio, no les dijo: todo será hecho nuevo, todo, todo, absolutamente todo?.

Mis queridos, no quiero demorarlos, porque Yo estoy siempre con ustedes pero estaría siempre hablándoles.

Acuérdense los amo un montón, acuérdense, tienen que educar a sus hijos, sus nietos o sus bisnietos con las palabras que oyeron porque si no hay una reverencia enorme por la vida no puede haber el amor al prójimo, todo se resuelve, acuérdense en los primeros años, en la niñez siempre, ahí se resuelve todo.

Y ya los dejo pero me hizo reír un poco cuando comentaron esa escena cerca del ojo de agua, el oasis, no era muy ágil José para subir a la palmera, Yo le decía: te caés José, te caés José, no me caigo mujer, no me caigo, te caés José, dejalo, te caés José, más vale te pongas a ordeñar las cabras porque sino qué le damos al bebé, no vamos a tener leche cuajada para darle, vení José bajate, bajate, que el Niño tantos dátiles tampoco puede comer ahora, noo, Yo los mastico en Mi boca y se los pongo un poquito a Él pero noo.

No se hacen una idea lo hermoso que era ver el rostro de Mi esposo cuando la luz de la leña que ardía le iluminaba ese rostro tan varonil con su barba, que se peinaba siempre con los dedos, una barba espesa, negra, tupida y bueno la barba fue incluso una de las cosas que le ayudó para no desentonar con los árabes en el desierto, sí, le ayudó a no desentonar y a Mí solamente me veían los ojos así que qué importaba otra cosa, pero Él con su cabellera negra y su barba negra, cualquiera diría: éste es un árabe también.

Bueno, estoy mezclando un poco las cosas, estoy contando muchas intimidades pero me gustaría hablar siempre de esto ¿mmm?. Llenen de amor el pesebre, no lo dejen así tan lleno de tierra fría como está en todos lados y se almacena la tierra fría sobre todo lo que preparan.

Los invito a que estén conmigo en el pesebre, con el corazón simplemente, un ratito nada más adorando al Niño ¿eh?, un ratito nomás, no se olviden que allí en ese momento empezó la historia de la salvación del hombre, por eso la Navidad tiene tanta importancia, hermoso, hermoso, precioso.

Los amo un montón, piensen que estoy siempre delante como les dije, delante y detrás, arriba y abajo, a derecha e izquierda junto con Mi Hijo, siempre que ustedes lo quieran, siempre que ustedes nos acepten, si ustedes quieren nunca tendrán problemas porque Yo los cubriré siempre con Mi hábito y con Mi sombra, con Mi manto y con Mi manos, siempre, siempre, siempre, no se olviden, para Mí la palabra siempre quiere decir eso, siempre.

Los amo, los amo tiernamente, hoy y siempre, son Mis hijos, todo lo que va a Mi Hijo pasa por Mí, no lo olviden, todo. Mis queridos, aunque sea tan conocida la expresión les digo: buena Navidad, buena Navidad.

Amén.

Habla Artemio:

Ahora el Señor nos bendice a todos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

Cuando el pueblo alaba a Dios suceden cosas suceden cosas, maravillosas….
Mirarte solo a ti Señor…

Dios está aquí….

Que Dios nos bendiga a todos, nuestras familias, a todos los que amamos, con
toda su fuerza y poder porque Él es Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Amén.


Buena Navidad.

(Se corta la grabación)….