Mis queridos, hombres de todas las latitudes, siempre les pedí pero hoy les pido muy especialmente, lo hago en Medjugorje y lo hago aquí: rueguen por la paz porque el mundo está al borde del abismo, ya sé que ustedes no tendrán problemas pero, en forma concreta, pero no se puede vivir en paz cuando uno sabe que hay tanto peligro para tantas vidas.
Mensaje del 03 de Octubre de 2007

Habla Artemio:

Nuestra Madre, la Virgen, nos va a hablar.

Dice Nuestra Madre:

Cuántos años en Medjugorje hace que estoy pidiendo por la paz, cuántos años hace y parece que los hombres no tienen ninguna gana de hacerme caso porque miro el mapa de Medio Oriente y hay tantas preparaciones de guerras y toda Europa está convulsionada, nadie tiene unas palabras para orientar a los hombres, hablan del choque de culturas, hablan del Islam, hablan del Cristianismo, todos hablan y hablan pero los hombres no hacen absolutamente nada para poner las cosas en paz.

Yo les pido que todas las noches tengan pensamientos y oraciones por la paz del mundo, es como si la Tierra estuviera por estallar como un volcán, ya sé que no en todos los pueblos del mundo pero en muchos, en muchos hay toda una situación muy difícil, todos se preparan para la guerra, todos y Yo les digo a ustedes y a todos los hombres del mundo: habrá que rezar, este es el mes del Santo Rosario, alguna vez, siquiera una decena del Rosario recen por la paz del mundo, además en cuántos países hoy han muerto montones de hombres. Yo les pregunto a los que tienen vida, piensen un momento lo que es dentro de un hogar de repente ver a algunos de la familia que no regresan porque han muerto, la guerra es espantosa y las heridas que dejan son para siempre, hasta la misma tierra queda árida y sin capacidad de ofrecer nada a las semillas que se arrojan en ella.

Mis queridos, hombres de todas las latitudes, siempre les pedí pero hoy les pido muy especialmente, lo hago en Medjugorje y lo hago aquí: rueguen por la paz porque el mundo está al borde del abismo, ya sé que ustedes no tendrán problemas pero, en forma concreta, pero no se puede vivir en paz cuando uno sabe que hay tanto peligro para tantas vidas.

Estoy muy desconforme de cómo los que tienen el poder en sus manos están manejando las cosas, hago un llamado terrible a todos los que tienen el poder en sus manos, de todas las naciones, hay otros métodos en lugar de la guerra, hay otras formas de solucionar los problemas, hay otras formas de vivir porque eso es lo que quieren los hombres, vivir, vivir, pero las amenazas son tan grandes, el dolor es tan grande. Están por un lado las bombas con sus mechas listas y por otro lado alguien que hace fuego, es cuestión que se acerque ese fuego a las mechas y todo estalla y no será solamente de una nación con otra, muchos se involucrarían porque así funcionan las naciones apoyándose una a la otra pero no por la paz y la salud y el bienestar y la felicidad sino cuando hay que mandar hombres a la guerra.

Ustedes dirán: ¿por qué la Madre está tan desesparada hoy pidiendo oraciones por la paz?, siempre les pido pero ahora especialmente, porque en las altas esferas, en todo el mundo, se están resolviendo problemas terribles y lo que está pasando en estos días y en lo que va del mes y lo que queda del mes es de un peligro muy grande, por eso, recen para que los hombres encuentren otros métodos para buscar soluciones y aquello que siempre dijimos que el sol sale para todos parece que no es tenido en cuenta por la mayoría.

No puede ser que algunos tengan que vivir siempre con el pie de la opresión sobre sus cabezas, esta no es la forma que ni el Padre, ni el Hijo ni el Espíritu Santo quieren.

Hoy, en la Capilla, en Mi Casa había tantos Santos, y había muchas personas que vos no conociste y los otros que ven tampoco conocieron pero son parientes, son familiares de aquellos que están en peligro y de los familiares que ya están en la otra vida y que tienen que interceder para que sus decisiones no sean tan terribles.

Por eso, viste tanta gente hoy ahí adentro, había tantos Ángeles, estaban todos, todos, todo el lugar que podían ocupar.

Así no Mis queridos, así no, no podemos seguir, no, hay tanta dureza en los corazones, hay tanto orgullo, hay tanta soberbia, hay tantos enfrentamientos personales, grupales a nivel nación, las etnias de todos los países están en bronca con las otras etnias, las religiones entre sí, no tienen una conducta coherente, pero caramba, ¿todas no se dirigen por caminos diferentes hacia el mismo lugar, hacia la Trinidad perfecta?, y entonces ¿por qué?, ¿por qué no dialogan aquellos que tienen un gran peso espritual y moral en el mundo?, ¿por qué no hacen oír su palabra para decir: basta señores, no es posible así?.

Ya sé que ustedes pensaran: hay tantos intereses en juego, justamente por eso lo digo, porque hay tantos intereses en juego es que estoy tan preocupada. Los países no se resignan a tener menos, los países no se resignan a perder el monopolio de las cosas, los países no se resignan y los jefes de estado conservan esa soberbia que los hace creer todopoderosos, pero son alfeñiques que podrán ser destruidos con total facilidad.

También apelo a todos los dignatarios de la Santa Madre Iglesia, para que hagan oír su voz en todos los países, en todas las regiones, en todos los órdenes, cada uno en su lugar, cada uno en su medio y con sus circunstancias.

Hagan una cruzada universal de oraciones y pedidos y esfuerzos para lograr la paz que está en peligro, ustedes dirán: ¿por qué la Madre hoy está tan desesperada?, repito, porque se están resolviendo cosas muy grandes.

Díganme que puedo confiar en ustedes, díganme que van a pedir por la paz del mundo, pidan por la justicia, para que los hombres puedan tener lo que cada uno le corresponde, ya sé que hay tantas muertes todos los días pero con lo que estoy diciendo sumaríamos otras muertes más y además una guerra siempre es destrucción, una guerra siempre trae tantos dramas y tragedias que ya no es lo mismo, hay un antes y un después de los países en guerra y de los hombres en conflicto.

Cada día, cada noche, cada minuto, cada segundo y a través de los días y las noches, de vez en cuando, por lo menos, tengan un pensamiento dirigido a Mi Hijo para que calme los rencores, los odios, los deseos impuros de los que creen que haciendo la guerra pueden conseguir las cosas que no tienen, ¿a qué precio, pregunto Yo, consiguen lo que no tienen?, ¿a qué precio?.

Mis queridos, no quiero insistir, solamente quiero dejarles este Mensaje en este día, la paz es prioritaria, el mundo se debate en estos momentos en una situación muy seria, terrible, trágica. Háganme caso, insistan delante de las almas del Purgatorio, insistan delante de todos los Santos y Santas para que intercedan delante del Señor, insistan delante de todos aquellos hombres de buena voluntad que están dispuestos hasta dar su vida para evitar masacres y locuras de los hombres.

Que Mis palabras no pasen, porque si todo lo que tengo en mente ocurre ya nada será igual, ya nada será igual, porque aunque ustedes conserven el lugar que tienen, el hogar que tienen, las cosas que tienen, pero ¿se puede vivir feliz cuando los hombres de lugares lejanos viven al día con la sosobra permanente de una inminencia terrible?, ¿se puede?.

Este llamado a todas las naciones, a todos los hombres de buena voluntad, a todos los dignatarios de todas las naciones y también especialmente a los dignatarios de la Santa Madre Iglesia para que se ocupen de todo.

Ya les seguiré hablando de todo esto, no quiero darles detalles porque les amargaría la noche y los días siguiente de lo que podría pasar, tal vez de cada uno y todos juntos dependa la solución de todos los problemas.

Amén.

Habla Artemio:

El Ángel vino de los Cielos....

En el nombre el Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.